Capítulo 1: Inicio de Clases

La academia militar de ciencia y tecnología "AMCT" para abreviar, también llamada la escuela de los genios, solo las personas muy inteligentes pueden entrar y algunos cuantos con demasiado dinero pero es una gran suma y no muchas personas pueden pagarla, claro que esto muy pocas personas lo saben, yo lo sé gracias a Joshua que entró por dinero pero supo mantenerse, puesto que los que entran por dinero tienden a no durar ni la mitad del primer año, ciertamente pocos se gradúan, a mí me faltan 3 años para terminar, actualmente estoy en mi tercer año y siento que voy a reprobar, todo por culpa de Joshua que hizo mal un experimento, me inculpo y tuve que pasar las vacaciones en la academia, juro que cuando llegué lo mataré.

-¡Hey pendejo!-Volteò y veo a Edgar haciendo señas para que lo acompañe. Me dirijo hacía el y juntos caminamos hacia la oficina de servicios escolares, mientras se burla de mi por mis vacaciones fallidas, yo solo ruedo los ojos y lo ignoro. Tardamos unos 15 minutos para llegar a la oficina, puesto que la escuela es como la mitad de la mitad de la Ciudad.

-Dormitorio B107- Dice Edgar al secretario, lleva puesto el uniforme militar del país, no dice nada solo asiente y nos da unos papeles, llaves y demás cosas.

En papeles se encuentran los horarios para nuestro dormitorio al igual que los informes sobre el grupo de nuevo ingreso que nos toca supervisar por todo el año.

La AMCT, tiene la costumbre de que todos los años, los grados de tercero y cuarto año asesoren a los de primer y segundo año, los grados de quinto y sexto se enfocan en diferentes actividades más avanzadas por lo que no asesoran.

Como Edgar tiene hambre nos dirigimos hacia la cafetería donde reconozco una distintiva cabellera con muchos rulos, me acercó sigilosamente y lo golpeó en la cabeza, la persona voltea dispuesta a devolver el golpe pero al ver que se trataba de mi, se detuvo y me saludo como si nada.

-¿Cómo estuvieron tus vacaciones?- pregunta con una sonrisa burlona y da un sorbo a su malteada, atras de mi escuchó la carcajada de Edgar.

-No te hagas el tonto Joshua, me debes una- Respondo, al escucharme el solo me da una mirada "inocente" y se encoge de hombros.

Estoy dispuesto a darle otro golpe, sin embargo Edgar se interpone para robarle la malteada, y no logro de tenerme, ocasionando que derramé la bebida

«Mierda»

Me encuentro con la mirada fulminante de Edgar y eso solo me dice que es tiempo de correr.

Comienzo a correr empujando a los estudiantes que se me atraviesan sin pedirles perdón con Édgar persiguiendo me.

«Izquierda, Derecha, todo recto y la libro»

Llegó a mi destino sin Edgar detrás y estando a salvó.

-¿Qué haces ahí agachado?- Me pregunta una linda voz con una pequeña risita, giro la cabeza y me encuentro con los hermosos ojos de mi novia Charlotte.

-Mmm nada- no pienso contarle que estoy escondíen dome de Edgar -¿Te cortaste el cabello? Me encanta tu fleco.

Me levantó, la tomo de la cintura y le doy un dulce beso en la frente. Ella solo me abraza como diciéndome "Gracias, te extrañe".

La acompaño hasta su dormitorio cargando sus maletas mientras me plática sobre sus vacaciones.

La ayudo a desempacar mientras conversamos cosas triviales, me despido con un beso cuando llegan sus compañeras y la vuelvo a abrazar sintiendo su cabeza apoyada en mi hombro.

Voy rumbo a mi dormitorio, esperando que a Edgar se le haya pasado el enojo mientras camino por los pasillos me percató del reloj que marca la uno en punto, la hora de llegada de los de nuevo ingreso.

Salgo de dormitorio "A", que son los dormitorios de las chica y los "B" son para los chicos, tardo unos 25 minutos para llegar a mi dormitorio, cuando llegó a la puerta dudo si abrir pero no creo que su enojo dure tanto así que abro la puerta.

-Hasta que llegas pendejo- me recibe la voz de Edgar.

-Estaba con Charlotte y esconde ese celular o tendremos otro entrenamiento infernal- digo y el me ignora, supongo que ya se le pasó el enojo.

Camino a mi habitación mientras agarro una manzana de la mesa donde están postrados los pies de Edgar; gracias a qué ahora somos estudiantes de tercer año nuestro dormitorio ahora es más grande, consta de 2 habitaciones, con dos camas cada una, un baño y una sala de área común, que es donde estaba Edgar.