Capítulo 4: Secretos

POV: Katsumi

—¿Nos acompañas a la cafetería, Katsumi?

—Sí, esperenme— contesto mientras guardo mis cosas.

Camino con Jane y Lisa, platicando sobre la clase, que a mí parecer fue muy aburrida y estresante, la maestra se la pasó dictando, al principio me pareció agradable por su apariencia de abuelita linda y cariñosa, pero luego saco su lado gruñón.

Llegamos a la cafetería diez minutos después de salir del salón, y me alegro de que ellas me hayan acogido por qué no sabría que hacer entre toda la gente que está aquí apenas y se puede pasar, y eso que hay 5 cafeterías en toda la academia aunque todas con temática distinta en la que estamos es de temática de biblioteca, hay un área con libros cerca de cada mesa y pequeñas flores, es muy bonito pero no se logra apreciar por qué la mayor parte de las personas estamos haciendo fila para pedir el almuerzo por eso la fila para el almuerzos larguísima, estoy viendo si no está alguna de las chicas al frente para que no hagamos tanta fila y gracias a Dios Génesis estaba casi al frente de la fila por lo que me junte con ella y les hice señas a las gemelas para que me siguieran.

Cuando llegó mi turno elegí el menú B, que consiste en un jugo de manzana con dos sandwich y de postre un helado. Fui la única que eligió el menú B, Génesis y Jane eligieron el A, que es un yogurt de fresa con dos hotcakes y de postre también helado pero de vainilla, Lisa escogió el menú D, que es una gaseosa con una hamburguesa con papas y de postre una rebanada de pastel de manzana.

Cuando las cuatro elegimos nuestros almuerzos fuimos a una mesa que estaba hasta el fondo con una ventana de la cuál se puede ver a las personas que están entrenando en su clase de defensa. Como somos demasiados alumnos y solo hay 5 cafeterías tenemos distintos horarios para nuestro almuerzo se varía en el año o especialidad en la que estemos, en mi caso estoy en la especialidad de Tecnología y en primer año, por lo cual tengo el almuerzo temprano.

—Génesis—señale a la mencionada— Lisa— apunte con mi mano hacia la gemela menor, y la que tiene el cabello rubio con las puntas rosas— Jane— moví mi mano hacia la mayor y ellas se saludaron.

Las gemelas son muy buenas para hablar con los demás por lo que inmediatamente se empezaron a llevar con Génesis y contar chistes y anécdotas, yo participe pero poco no me gusta contar mucho, no desde...

«¡No! No pienses en eso»

Volteo hacia otro lado, para evitarme a mi misma odio cuando mi mente hace esto, cuando yo no logro bloquear eso, no me gusta, me siento miserable, que soy una basura, que todo es mi culpa , tengo miedo que sus ojos se vuelvan crueles y me miren con frialdad...

Tomo unas respiraciones silenciosas para calmarme, nadie aquí sabe lo que pasó, solo Kumi y ella no lo contará a nadie. Pero ¿que pasa si ella lo hace? ¡No! Ella no lo haría. Ella no es así... ¿y si ella cambia también? No, ella es mi prima ella no me hará lo mismo. Pero recuerda nadie es lo que aparenta, dice una voz en mi cabeza.

«¡Basta!»

Okay vamos a distraernos, veamos que hay. Veo como una hoja entra por la ventana que está abierta sigo su trayectoria tratando de adivinar dónde caerá, pero no atino sigue sin caer, flota cada vez más lejos pasando nuestra mesa al final logra caer a unos 5 pasos de nuestra mesa. Levanto la mirada y lo primero que veo es unos ojos color miel mirándome, reaccionó tratando de parecer normal y le hago señas para que venga a sentarse con nosotras, ella tarda unos segundos pero al final camina hacia nosotras .

—Hola

Saluda y se sienta. La miro por el rabillo del ojo y siento que quiere preguntarme algo pero una voz la detiene justo cuando iba a hablar.

—Jou, ven necesitamos hablar sobre la tarea— le exige una chica muy hermosa de cabello rojo a Camile.

—Claro, Adanson.— Responde la morena con la voz levemente irritada.

Se levanta y sigue a la chica no sin antes despedirse, cuando veo que se sienta en una mesa del otro extremo giro mi cabeza hacia mis acompañantes y lo primero que veo es a una exitada Lisa que apenas puede hablar.

—Su amiga es genial — dice después de tranquilizarse.

—¿Eh?

—¿No lo saben?

—¿Saber qué?

— El perfecto 10

—¿De que hablas? — pregunta está vez Génesis.

— La chica con la que se fue su amiga, esa chica es la tercera persona que en los 50 años que tiene la academia de haber sacado un 10 perfecto en el examen de ingreso. Y aparte su amiga tuvo el segundo puntaje más alto.

Génesis y yo exclamamos sorprendidas, no sabíamos eso de Camile, ella nunca lo dijo. Ambas son muy sorprendentes y hermosas. Le preguntaré más tarde a Camile más sobre la chica.