CAPITULO 1

Me acababa de despertar porque mi teléfono sonaba y tenía como 50 mensajes y 20 llamadas de mi única amiga.

-¿Pero ahora qué te pasa? -Le respondí al llamado con la voz pastosa.

-Ah, estás viva, qué alivio -dijo con sarcasmo-. Te estoy llamando hace dos horas...

-Estaba durmiendo, te dije que me iba a dormir un rato.

-Sí, un rato me dijiste, no 3 horas -suspiró por lo rápido que estaba hablando-. Estoy afuera, como no respondías tuve que venir.

-¿Qué? ¿Afuera? -Me levanté de la cama rápidamente para vestirme bien. No estaba para nada bien, no me bañaba hace dos días y seguro que tenia el maquillaje corrido por toda la cara-. Espera que me cambio rápido y bajo.

-Bueno, pero apúrate -dijo mientras yo me vestía rápido.

Bajé corriendo las escaleras para abrirle la puerta a mi amiga.

-¿Pero qué? ¿Y esa cara? ¿No era que ya estabas bien? -dijo con cara de preocupación.

-Sí, te dije que estoy bien -le dije girando los ojos.

-¿Pero vos te miraste en un espejo? -me agarró del brazo y me arrastró hasta mi cuarto.

-Ya sé, de seguro estoy fatal.

-Fatal es poco decir, Bianqui -me paró enfrente del espejo y guau, si que estaba horrible, estaba sola en mi casa así que nadie me decía nada- y oles horrible encima -se alejó de mí. Ahora mismo te vas a bañar con desinfectante y cloro por favor -me agarró de los hombros y me miró a los ojos-. Hoy vamos a salir quieras o no, me da igual amiga, no puedes estar más así, menos por alguien que no vale la pena.

-Ya lo sé -dije mientras se me caía una lágrima- pero no creas que es por él, no me importa, crecí sabiendo que los hombres no valen la pena -sollocé mientras hablaba-. Lo que me duele es su traición -la miré y le dije todo con la mirada, sabía perfectamente que no quería decir su nombre.

-Siempre supe que era una perra envidiosa.

-No le digas así.

-Y todavía la defiendes, ¿es en serio, Bianca?

-Sí, Lila, pasé toda mi infancia junto a ella, eso es lo que realmente duele- Y listo, ya me había largado a llorar- Todas mis amigas me traicionaron, Lila, por favor tú no, tú eres la única amiga que me queda, te lo ruego, tú no me traiciones- la miré a los ojos esperando una respuesta.

-Te juro que yo no te voy a traicionar- me dijo mirándome a los ojos. Si decía la verdad, ella era incapaz de lastimar una mosca, en cambio la sin nombre, no, siempre supe que me tenía envidia pero pensé que como era básicamente mi hermana jamás me traicionaría, un gran error, a la primera que me descuido un puñal por la espalda. 

-Bueno, bueno, basta de sentimentalismo y te vas a bañar, que yo te voy a buscar el mejor outfit que tengas en tu armario- se levantó y me pegó un empujón- dale, ve, sucia, jaja.

-Jaja- creo que solo ella era capaz de hacerme sonreír. Me fui a preparar mis cosas para darme una ducha.

-Ah, hoy nos vamos a la fiesta de Mariana, nos invito-

-¿Espera qué? Si ella nos cae mal-

-Ella, no, la fiesta, y además te vas a despejar-

-Bueno, está bien-

Me tome mi tiempo para darme una ducha muy relajante la verdad, si, no voy a negar que pensé en lo que había pasado, pero ya fue, la verdad que Thiago (mi ex) no me importaba, apenas llevábamos unos 4 meses y mi mama siempre me había dicho que es una relación de verdad después de los 6 meses, así que no me había ilusionado tanto, pero obvio si me dolió también. me gustaba mucho fue mi primer novio y que las cosas terminaran así fua bastante devastador, pero por suerte tenia  a la loca  de Lila todavía, Lila era como mi otra hermana Nacimos con un mes de diferencia no mas mi mama y la suya eran mejores amigas desde... no se, siempre y  querían que sus hijas también lo fueran y si lo éramos lila era mi verdadera hermana de corazón no, por que físicamente éramos distintas, para empezar su padre era coreano así que tenia rasgos coreanos , Lila tiene una belleza exótica y cautivadora. tiene 18 como yo, pero parece más joven por su rostro angelical y su piel suave y clara. Su cabello es castaño y lo lleva largo y liso, con un flequillo que le da un toque de inocencia. Sus ojos son marrones y expresivos, y siempre están llenos de curiosidad y alegría. es muy linda y tierna, pero también  MUY  loca y divertida. Le gusta hacer reír a todos con sus ocurrencias y su sentido del humor. Es dulce, inteligente y creativa. Además, le encanta salir de fiesta y disfrutar de la noche, bailando, cantando y conociendo gente nueva. Es  alegre y sociable, siempre tiene una sonrisa en los labios y una chispa en la mirada...

-¿!ya vas a salir?¡-Grito la loca de mi amiga- Vamos, para que tengamos tiempo de cambiarnos bien, y además me estoy asiendo encima !apúrate¡

-!Ya voyy¡ - me salí de la ducha y me envolví con la toalla total solo estaba bajo el agua para relajarme, tendría que haber salido hace media hora- Ya, entra tu, no me vallas a orinar el piso

- Ja- dijo y se metió rápido al baño, vi en mi cama que ya me había preparado mi ropa y si que estaba muy bonita la combinación, obviamente también ella va a usar mi ropa por que al lado había otro conjunto muy sexi para ella, teníamos casi la misma talla así que no había problema es que usáramos la ropa de la otra. A mí me había preparado un conjunto muy bonito: una falda negra ajustada, una blusa blanca con un escote en V, unas medias negras y unos botas negras. Me vestí rápidamente y me sequé el pelo con el secador. Luego me maquillé un poco, resaltando mis ojos verdes y mis labios rosados. Me miré al espejo y me gustó lo que vi. Me sentía linda y segura de mí misma.

Mientras tanto, Lila salió del baño y se puso el otro conjunto que había elegido: unos jeans rotos, una camiseta negra con un estampado de una calavera, una campera de cuero negra y unas zapatillas blancas. Se peinó su cabello liso y se puso unos pendientes de oro. También se maquilló, pero de forma más atrevida, con un delineado negro y un labial rojo. Ella también se miró al espejo y sonrió.