La Búsqueda del Olvido
Después de la trágica muerte de Damián a manos de Ángela, el dolor y la culpa la consumían de una manera que amenazaba con destrozar su espíritu y su corazón. A medida que los días pasaban, el peso de su error se volvía insoportable, y Ángela se sumió en un abismo de desesperación y desolación.
Decidida a poner fin a su sufrimiento y encontrar la redención por su terrible acto, Ángela emprendió una búsqueda desesperada en los reinos celestiales y demoníacos en busca de una manera de acabar con su existencia. Los susurros de los seres divinos y demoníacos la rodeaban, ofreciéndole promesas de paz y perdón, pero Ángela sabía que solo encontraría la redención en la muerte.
Con cada paso que daba en su búsqueda, el recuerdo de Damián y su amor prohibido la atormentaba, recordándole el precio de su error y la tragedia de su destino entrelazado. Pero a pesar del dolor y la tristeza que la envolvían, Ángela seguía adelante, decidida a encontrar la paz en la oscuridad que la esperaba al final de su camino.
Finalmente, en lo más profundo de los reinos celestiales, Ángela encontró un lugar sagrado y olvidado donde el velo entre la vida y la muerte era más delgado. Con el corazón lleno de dolor y determinación, Ángela se preparó para enfrentar su destino final, dispuesta a abrazar la muerte como un acto de redención y perdón.
Con una última mirada al cielo estrellado, Ángela cerró los ojos y se lanzó al abismo de la eternidad, dejando atrás el dolor y la culpa que habían marcado su existencia. En la oscuridad que la rodeaba, encontró la paz y el olvido que tanto había anhelado, sabiendo que en la muerte encontraría la redención que le había sido negada en vida. Y así, Ángela desapareció en las sombras, dejando atrás un legado de amor y tragedia que perduraría por siempre en los reinos celestiales y demoníacos.