Amor en la oscuridad

El concilio

Al despertar me sentí un poco alarmada, creí que todo había sido solo un sueño, pero la vista me ayudo a darme cuenta que todo lo sucedido era real, Jung Kook estaba delante de mí cambiándose de ropa frente al espejo de su habitación, se veía muy bien en conjunto de chico rebelde, era demasiado guapo que parecía irreal, sin embargo, ahí estaba arreglándose la ropa y alisándola con pulcritud.

−Ya despertaste Melantha, Adara tenía razón, solo duermen cuatro horas −dijo Jung Kook mirando su reloj y sonriendo tiernamente−. No creí que serían tan exactos, para serte sincero, nunca me fijé en Seok Jin y su tiempo de sueño.

−Entonces espiaste mis horas de sueño ¿no te aburres mientras yo duermo? −pregunté levantándome de la cama.

−No, la verdad creo que verte dormir es algo interesante de ver, como si una parte de mi humanidad reviviera −se acercó a mí−. La magia de tu naturaleza es tan espectacular que siento que cada sorpresa en ti me gustará.

−No te veías muy feliz cuando bebí la sangre de James y casi lo asesino −me estremecí ante el recuerdo, o al menos yo lo sentí así sabiendo que mi cuerpo no sucumbía a esa clase de reacciones−. Parecías molesto e incluso horrorizado conmigo y mi forma de hacer las cosas.

−Creí que tu naturaleza tan humana y dulce me sería arrebatada al hacer eso −dijo Jung Kook triste−. Ese hombre está loco y parece un oportunista que solo quiere rodearse de vampiros como tú o Seok Jin, pero a veces se puede controlar a nuestra especie solo con sangre.

−Lo sé, puedo darme cuenta yo sola de cómo son las personas −repliqué pensativa−. Los únicos a los que tomaré en cuenta seriamente son ustedes, tanto tú como los chicos y Adara son todo para mí, a veces le preguntaré a mi madre.

−Él quiere que tú y Seok Jin estén juntos porque traerían vampiros puros −siguió él con la voz cargada de tristeza y celos−. Ji Min parece no estar feliz conmigo, quizás siente que hice algo malo contigo al convertirte.

−Seok Jin y yo no nos vemos de esa forma, él aun ama a Adara y eso no cambiara pronto, espero que en algún momento conozca a su chica ideal −respondí pensativa−. En cuanto a Ji Min, creo que en algún momento entenderá que el hecho de que yo sea un vampiro ocurriría tarde o temprano, el veneno habría destruido la cura en un mes más, o tú me habrías mordido fuera de control, todo eso pasaría algún día.

Jung Kook solo me miró sorprendido ante mi lógica, quizás el creía ser capaz de soportar la sed, pero yo era más realista, beber tanto de mi sangre terminaría descontrolándolo en algún momento tarde o temprano. Lo había comprobado la noche anterior con sus caricias y besos, yo había bebido su sangre y luego él lo había hecho conmigo, aunque él se controlaba bebió más de la cuenta y me dejó agotada, pero feliz.

− ¿No confías en mi control? −preguntó con la mano en el pecho falsamente indignado−. Yo te habría cuidado hasta de mí mismo.

−Una vez me dijiste que querías alguien con quien pasar la eternidad −respondí ignorando su pregunta−. Creo que solo era cuestión de tiempo que me preguntaras si quería ser inmortal como tú.

−Tienes razón, y la verdad contigo todo es más fácil de cierto modo −dijo él, yo fruncí el señor confundida−. Me refiero a que nunca sentiré que te estoy quitando la posibilidad de elegir tener o no hijos.

−Aún no me preocupa esa idea, sin embargo, es verdad que me gusta tener la opción siempre −respondí pensando las cosas desde su punto de vista−. Lo triste es que ahora siento que debemos cuidarnos todo el tiempo, como cualquier pareja.

− ¿Te molesta cuidarte? −me preguntó sorprendido.

−Creo que la parte hormonal de mi cerebro aún actúa con mucha fuerza −admití un poco nerviosa, sabía que no podía ruborizarme, pero lo estaría siendo humana−. La verdad me alegra tanto, sentir lo que sentí cuando vi tu cuerpo desnudo, ver los músculos que se marcaban en tu cuerpo fue muy alentador y sensacional.

Jung Kook empezó a reír un poco avergonzado por mis palabras, creo que le gustaba saber lo que causaba en mi mente, no era imposible, yo lo amaba, aunque no tenía la valentía de decírselo todavía, había demasiadas cosas que quería resolver antes de confesar lo que yo sentía por él.

−Me encanta tu sinceridad, apuesto que te costó mucho confesar esto −dijo finalmente después de reír−. En recompensa te diré que me gustan mucho tus bellos ojos, por el momento son rojos, pero luego serán azules y el rojo aparecerá únicamente cuando estés cazando.

− ¿Por qué son diferentes los ojos de los vampiros puros y los normales? −pregunté curiosa.

−Quizás sea por lo que dijo el viejo raro, tus tejidos son humanos en muy diminutas cantidades, así que hay melanina que puede teñir el color de sus ojos de ese azul gélido −respondió mirando a la nada−. Es un color frío dependiendo quién lo tenga, en ti creo que no serían tan aterradores, el padre de Jin los tiene así y realmente da miedo, Seok Jin no da miedo, él es cálido pase lo que pase.

Mi madre tenía ese color en mis sueños, se veía aterradora y fría con ese color, quizás era una monarca muy seria o solo es como yo la veía de bebé, porque ahora estaba segura que esos sueños eran recuerdos perdidos. Yo no podía verme diferente, yo nunca me había considerado una persona cálida, eso era culpa del hecho de no tener hermanos, pero mi madre siempre había sido cariñosa conmigo de todas formas, y yo lo era con ella y mi padre, sin embargo, la gente fuera de mi familia no tenía mi lado más amable en la mayoría de los casos, solo Adara quien se portaba como una hermana mayor.




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