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Y tenía razón, el lugar se estaba incendiando así que solo cierro los ojos con fuerza y corro hacia la puerta ahora está abierta y sigo corriendo por el pasillo siguiendo el mismo camino, de la escalera de caracol, los pasillos, el río de pecadores y ahora subo las escaleras y sigo corriendo como loca porque ahora ni con los ojos cerrados consigo ver nada, solo siento que ya no hay suelo y caigo a máxima velocidad, en eso me levanto sobresaltada viendo a mi alrededor y empanada de sudor frío, ya que no estoy en mi dormitorio, si no en el bosque y no se logra ver mucho puede que esté bastante adentrada, me abrazo a mi misma e intento calmar mis nervios y después de un rato me levanto completa mente del suelo y pongo mi camino al internado, mi paso es firme pero estoy temblando bastante por el frío que hace afuera, llegó al área verde de la escuela y me siento más relajada, me siento sobre una banca pues me duele la cabeza de lo que pasó, me siento muy confundida y no se si realmente confiar en él o si realmente estuve con él.

—hola, el otro día que te acercaste a mi no te pregunté tu nombre.–se sienta a lado mío y yo respiro profundamente para responderle, su pequeña voz es tan específica que ya se quien es sin si quiera verla. 
—¿Cómo te llamas tú?.–la volteo a ver intrigada por ese cambio de humor. 
—Lilih. 
—Yo soy Arwen. 
—¿También viniste a la fiesta? 
—¿Es hoy? 
—Si, una vez cada cuatro meses hacen una fiesta y al día siguiente es la convención de demostraciones dónde solo los más destacados pueden entrar.– lo dice en forma de burla, recitando a la secretaría. 
—Me imagino que tú entraras ahí. 
—Rechace la oferta.–Dice apenada.— Me da pánico escénico y no se, siento que lo podría arruinar, además.–se endereza con orgullo —Ya sin ese mismo circo tengo bastante prestigio, soy la mejor en pocas palabras.–que egocéntrica. 
—Bueno, entonces ¿por qué viniste a la fiesta si no te gustan esas cosas? 
Titubea un poco sonrojada.—Tenia curiosidad de cómo es, a lo mejor me animo a participar, y hablando de eso ¿por qué no nos acercamos un poco más?, La temática de esta vez es música electrónica, se está poniendo muy bueno. 
Vamos caminando un poco antes de seguir platicando y poder preguntarle… 
—¿Es por tu padre?, Dicen que en esta convención algunos padres vienen acá y la pasan con ellos, podría ser que el tuyo venga. 
—Llevo ya un año y medio aquí, y no he conseguido ni verlo, solo se que soy una persona mala, lo siento en la sangre.– ve sus muñecas por como resaltan las venas azules. 
—La fe es lo último que se pierde, recuerda eso, yo llevo tres años aquí y apenas se presentó mi padre. 
Me voltea a ver sorprendida.—¿Cuándo fue eso? 
—No tiene mucho, pero ese no es el caso, lo importante es saber que vas a exponer.–se ríe un poco y voltea a ver a todos lados. 
—Tengo un pequeño tema, se llama revueltos, es sobre los amoríos que hay entre nosotros, lo hice casi llegando aquí pues tengo unas clases avanzadas y una es comportamiento psicológico. 
—¿Nosotros?, O sea te gusta alguien.–afirmo y la miro más a detalle, está bastante roja pero hay algo más, siento su aura, de color azul, los demonios tienen colores, rojos, naranjas hasta negros pero azules no, entonces que será ella realmente?.—Dime, ¿Cuántos años tienes? 
—Tengo 15, y no, no me gusta nadie. 
Creí que era más pequeña pero intentaré estudiarla un poco más y sigo insistiendo. 
—¿Es un ángel no?.–Ya nos estamos acercando y se escucha más la música y Martin Garrix es quien suena , el lugar siempre es muy bonito, hay carpas, hay mucha comida, bebidas de todo, luces de colores y en algunos años llegan a lanzar fuegos artificiales, aunque la verdad este me sorprende más, hay tres carpas, una de comida, otra de bebidas y otra con algunas mesas, están distribuidas en todo el lugar, está bastante iluminado para ser de noche, las luces son naranjas, rojas, rosas, verdes, y hay un hermoso escenario con corona dónde se encuentran los Djs, son 4 hay unas enormes bocinas; mujeres y hombres bailando en unos tubos que se mueven de adelante para atrás, tiene un pequeño aire de circo, hay todo tipo de personas dando ciertos espectáculos. 
—Mira si me gusta alguien o no, no debe ser de tu incumbencia.– lo dice bastante molesta. 
—Solo quiero ayudarte, cuando los ángeles se acercan muy rápido a un demonio o a alguien en general es por una razón, el cincuenta porciento de los ángeles que están en este internado solo utilizan su virtud para castigar a los demonios sin si quiera a ver cometido ningún pecado, es su diversión de ellos. 
No dice nada y solo me mira sonrojada y es ahí cuando lo veo, un ángel con virtud malvada, está bastante guapillo pero eso nada más es para usarlo a su favor, nota nuestra presencia a pesar de toda la gente que hay y se acerca a otros ángeles y se van al bosque, se lo que traman pero no sé si ella me crea. 
—Mira creo que fue mala idea ya me tengo que ir.–me da la espalda y se va retirando. 
—Si enserio me crees, no vayas al bosque te lo digo por tu bien, te mandarán al limbo. 
—El me quiere, también me ha defendido de otros.–me voltea a ver y no se mueve, intento meterme en su cabeza. 
—Eso mismo pensaba de Owen y mira lo que pasó, lo mandé al infierno por tratarme como alguien que no vale la pena.–me acerco a ella, y le tocó el hombro.—Te lo suplico, se que te harán daño, tengo más tiempo aquí y se cómo funciona estás fiestas y como son la mayoría aquí, toman todo a su favor, sin importarle nada ni nadie más que ellos mismos, es como una guerra de nunca acabar. 
—No puedo, ya quedé con el.–baja la cabeza y la vuelve a subir mirándome a los ojos.— No porque a ti te hallan traicionado significa que el lo hará conmigo.– Y es ahí cuando se va, no la sigo en el instante pues se que merece un poco de castigo después de todo, en eso voy a disfrutar de la fiesta y voy por unas bebidas,  se escucha hey brother de Avicci.