Capítulo 6 " Encuentro "

Solo quedan dos meses, 60 días para entregarla... No podría tener el valor de hacerlo, lo cierto es que me encariñe con Sira. 
Ella es la niña linda y yo soy el chico malo 
Debo admitir que sentimientos han empezado a nacer y cada vez me cuesta mucho más ocultarlos, pero ella sin saberlo ha hecho que poco a poco haya querido cambiar; he dejado en parte las drogas, ya casi no fumo, no estoy en peleas callejeras... 
Nunca pensé que mi vida cambiaría así tan drásticamente.
Hoy la veré, pero no quiero porque en esa ocasión yo hablaré con ella pero Daniel me estará observando a lo lejos. Sin darme cuenta el se obsesiono con ella al mismo tiempo en el que ella empezó a volverse mi droga, me estoy volviendo adicto a su mirada, su voz, su cabello... Sus palabras de aliento.

- Hola - llegó un poco tensa 
- Hola, ¿ Que tienes ? - 
- Nada - Dijo sentándose a mi lado 
-  Sabes que puedes decírmelo - Dije mientras miraba de reojo a Daniel observando
- Renier yo ya no puedo verte ni hablarte, mi madre me matará - Dijo con tristeza en su rostro 
- ¿ Es lo que quieres ? - pregunté tomando su rostro en mis manos 
- No, yo quisiera que ella pueda ver lo que yo veo en ti, no eres ni la sombra de lo que me han dicho; yo ya te quiero -  Me sentí feliz y a la vez triste porque; si soy lo que dicen 
- Entonces no te alejes de mi, yo no te alejare de mi; soy muy terco y te necesito en mi vida - Dije sosteniendo su mano, ella sonrió y me abrazó 
- Cuentas conmigo para lo que sea - Dijo mirándome con el universo de sus ojos 
- Si, pero para evitar que te castiguen, será mejor dejar de vernos aquí porque las personas son muy chismosas - Dije mirando de nuevo hacia Daniel quien me veía con cara de molesto.
- Es lo cierto, luego vemos donde- 
Seguimos hablando muy entretenidamente,hubo chistes y hasta debates de historia nórdica, es muy terca así que la deje ganar; pero no quería que la dejara ganar ella quería pelea hasta que uno de los dos ceda.
Luego de todo nos despedimos y vi como se iba, nuevamente volví a ser quién era sin tener que fingir simpatía.

- Es terca - Dijo Daniel  a mí lado 
- Si que lo es - Dije viendo hacia el frente 
- No la venderé, me está gustando la chica - Me recorrió un escalofrío de solo pensar lo que esté idiota haría con ella.
- Está bien, pronto la tendrás - Dije en voz baja 
- Te dije no te encariñes, al caso tú solo eres un esclavo de las drogas; una chica como ella jamás se fijaria en ti. Solo es empática contigo y lo sabes- 
Me puse de pie y me fui de ahí, hasta ahora las palabras de nadie me habían afectado pero esas, esas rebosaron el vaso de agua.

Fui, me cambié, listo para ir a un bar...