#2 ojos color miel

Seguía un poco en shock, pero se me quito definitiva cuando mi padre se corrió y pude ver que en los sillones estaba un señor de no más de treinta años o puede que tenga la edad de mi padre y aparente menos eso es una posibilidad.

- Te presento a el señor castro el será mi nuevo socio y poder vender mis productos en parís y Alemania

- Es un placer 

- El placer es mío señorita  

- Bueno pasemos al comedor antes que la comida se enfrié

 Mi padre hablaba animadamente con el señor castro, mi madre también estaba en la conversación, pero no habla mucho. Quería irme, pero si me iba se molestarían y ya tengo mucho con estar aquí como para discutir con ellos.  

De pronto a otro los tres se pusieron demasiado serios y no sabía porque ya que no les puse atención a lo que decían porque no me importa no es algo de mi interés aparte de que también estaban hablando en susurros, pero lo que ellos no sabían en especial mis padres es que se leer los labios y entendí le doy gracias a nana por enseñarme. Les puse atención cuando me nombraron 

- Ya le han dicho a Abby – ese fue el Señor Castro 

- No - fue Kiara – no sabemos cómo decirle que se va a casar – ¿Qué acaba de decir? No, no me voy a casar. Ellos ya no pueden manejar mi viada de ese modo, y gracias a que se leer los labios ya sé por qué me quieren aquí y estoy un cien por ciento seguro que es por beneficio para ellos y no para mi 

- ¿Qué yo que? - me levanté con fuerza de la silla y no me falto mucho para gritar , mi rostro solo habían rastros de odio ellos los sabían en especial mi padre por esa mirada helada que te ve el alma era idéntica a la de él, esa mirada que hace muchos años me daba miedo y que ahora ni cosquillas me hace -  Ustedes no pueden hacer eso ni casarme ni meterse en mi vida se los dije una vez y se los repito ahora y espero que no lo olviden yo escojo mi vida lo que quiero o no y el día cuando me case lo hare porque yo quiero no porque un par de imbéciles que no sirven para nada quieren sacar beneficio de mi así que vallasen al diablo los dos – me dirijo donde está el señor castro y le extiendo la mano – es un gusto conocerlo y disculpe por este show – cuando me iba a voltear sentí una gran cachetada y fue Kiara la que me había golpeado y yo también le devolví el golpe pero no fue una cachetada fue un hermoso derechazo.

Ella y los otros dos hombres me veían con los ojos grandes y en especial Kiara ya que no se los espero una persona cambia en tres años y ellos pensaron que era la misma y se equivocaron mucho, en especial si pensaron que iba a dejarme que me maltrataran. Este es un infierno del cual me fui porque ya no quería sufrir más maltratos ni físicos ni mentales me había cansado de ser un estorbo, un fantasma que andaba en los alrededores de esta casa y cuando me veían era solo por el interés, me acerque a Kiara y estando al frente de ella dije  

- Nunca en tu vida vuelvas a pegarme porque esto es poco de lo que puedo hacer contigo no eres mi madre y mucho menos mi padre o alguien al que quiera pero diablos – grite – ni ha esa basura dejare que  me ponga una mano encima otra vez, así que la próxima piensa dos veces lo que vas hacer – fije la mirada en mi padre – gracias por lo que me obligaste aprender me sirve de mucho.

Cuando Salí del comedor se escuchaba los gritos de Kiara y apuesto que mi padre debe estar rojo pero no de vergüenza si no de enojo, enfajo…ext.

Llegando a la salida estaba Luis y debo decir que tiene cierto parecido con nana pero sé que es un buen amigo de nana, pero no creo que sean familia bueno uno nunca sabe. Me acerco a él y le di un abrazo; él es una de las personas que valió la pena ver en este viaje

- ¿Cómo estás? muñeca – él me dice así porque cuando era pequeña como pasaba de un lugar a otro, encerrada no tomaba el sol así que era muy blanca y él decía que parecía a una muñeca de porcelana él es como mi tío y es una de las personas que respeto y puedo decir que le quiero

- Está bien hace tres minutos atrás – bufo y mi nana me ve confundía al parecer no escucho los gritos míos, pero Luis si ya que me ve con una sonrisa ladeada- me arias es favor de mandar a uno de tus chicos a recoger mi maleta me quedare en un hotel – y el asintió y me dio un beso en la frente y me dijo en un susurro “si te enojas te vas arrugar como mari” y mi nana lo escucho y le pego en el brazo y yo me reí con ellos puedo ser que ahora sea una chica muy sonriente pero con aquellas personas que quiero no puedo no sonreírles y sé que cuento con ellos en las buenas y malas pero igual tengo miedo de que me fallen como todos me han fallado alguna vez.

- ¿Qué paso by?  porque quieres las maletas e irte a un hotel?  

- Mi padre, nana eso pasa me quiere casar y hacerme como le da la gana y se equivocó esta vez no me dejare no soy aquella niña tonta e inocente y parte Kiara me ha pegado- vi como nana apretaba la mandíbula a ella le molesta que Kiara se crea mi madre o me falte el respeto le agarre una mano y le dije - pero yo le he devuelto el golpe no quiero estar aquí para ver como señor perfecto defiende a su débil esposa y está más enojado porque todo sucedió con su nuevo casi socio de frente y tampoco quiero que te pase nada así que ve a tu casa.