Larissa
Me despierto gracias a a esa maldita alarma, la cual se encuentra en mi tocador, el cual es de un lindo color blanco. La alarma sigue sonando lo que significa que es hora de levantarme para ir a la escuela, lo cual no me agrada en lo absoluto. Decido darme por vencida y me levanto de mi cómoda cama. Un poco fastidiada me dirijo al baño, parece que esa alarma fuera de incendios podría escucharse hasta en Canadá.Hago mis necesidades, normalmente no acostumbro a lavarme la cara pero esta vez lo necesito si no quiero quedarme dormida otra vez el primer día de clases y ser expulsada.
Seco mi rostro con una toalla de tela color blanca, lo cual hizo que me despertara por qué estaba bastante a sueñada, me dirijo a mi armario en busca de lo que me pondré el día de hoy, como es el primer día de clases me gustaría causar impresión en los chicos lindo, no es que me guste ser popular pero tampoco la nerd, soy la chica intermedia.
Encuentro un lindo atuendo el cual consiste en unos jeans ajustados, una blusa hasta los hombros y algo ajustada con unas pequeñas aventuras en la parte de las rodillas, y por último unos lindo tenis urbanos blancos. Me dispongo a arreglar mi cabello, por alguna razón hoy es un desastre ¿Será que me está advirtiendo algo?...
No creo, me planchó el cabello como última opción lo cual hace que mi cabello se vea mejor, y para finalizar mi a atuendo me pongo unos lentes azules, tomo mi mochila lista para dirigirme a la cocina en busca de un desayuno que me apetezca. Salgo de mi habitación y me dirijo a la cocina en la cual se encuentra "Lys" es nuestra ama de las llaves, es casi como una madre para mí, ya que la mía casi no se encuentra en casa, por lo cual Lys, hace que me sienta mejor con su compañía.
-Buenos días nana -Le saludo con un amable beso en la mejilla.
-Buenos días Las, creí que no te levantaría hoy, con ese sueño pesado que tienes -Dice con sarcasmo y humor.
Solo hago una mueca de risa, por lo cual decide mejor ir en busca del desayuno para ambas, como mis padres no están, Lys me acompaña en todo momento.
-Bueno, cómo se que no te gusta desayunar te hice esto -Dice mientras me muestra una sonrisa y un plato de unos lindos hotcakes, con fruta en forma de corazón, y una taza de chocolate caliente. A lo cual solo le doy una sonrisa cómplice.
Nos disponemos a desayunar mientras platicamos sobre lo divertido que es estar juntas, justo en ese momento entran mis padres con su ropa forma y cabello arreglo sin que un cabello ese fuera de su lugar.
-Buenos días Larissa ¿Lista para la escuela cariño? -Dijo mi madre, con una expresión de felicidad en su rostro.
-Si, es lo mismo de cada año -Conteste con una mueca de sierto disgusto.
-Me alegro por ti Las -Dijo mi padre un tanto serio.
Ciertamente no me gusta estar con mis padres, por qué siempre está muy molestos por su trabajo o muy felices, y eso me molesta un poco ya que casi nunca se encuentran en casa o teniendo tiempo para mí, desde que recuerdo a sido así, por lo que tuve que acostumbrarme a vivir así, y fue entonces cuando llegó Lys, a lo que alegro mi estancia en casa. Me apresuro a desayunar no por qué llegaba tarde si no más bien para salir de este ambiente un tanto tenso.
Cuando terminó, recojo mis trastes y salgo de la cocina sin decir nada, tomo mis cosas y me dirijo al auto que se encuentra afuera esperándome para llevarme a la maldita institución.
-¡Hey! - le saludé a Nicolás el cual es el chófer.
-Buenos días Larissa ¿Lista para la escuela?- Pregunto amable, mientras habría la puerta por mi.
-La verdad no, pero no puedo hacer nada al respecto -Le respondí con simpleza mientras entraba al auto .
El solo se rió ante mi respuesta, lo cual hizo que me contagiara la risa. Cuando menos lo espero ya nos encontramos afuera de la escuela. Nicolás me abrió la puerta nuevamente a lo cual salí del auto, veo a varios grupitos fuera de la escuela me despedí de Nicolás y me adentre a la escuela, gracias al cielo encontré mi loquer mientras ponía unas cuantas cosas por ahi.
Escucho que alguien me habla por lo cual voltea a ver de quién se trata, a lo que me doy cuenta de que es una chica, más o menos de mi estatura, castaña y de ojos azules muy lindos, usa ropa holgada por lo cual me doy cuenta de que es nerd esta chica, supongo que es nueva ya que estoy casi segura de que no sabe dónde está su aula.
-... Disculpa me podrías decir ¿Dónde se encuentra el aula 122B? -Me dice con cierta timides, le doy una pequeña inspección.
-Hola... No lo creo -Le respondo con una mueca de simpleza.
Me doy media vuelta, dispuesta a irme cuando escucho un par de risas y burlas, volver a ver y me doy cuenta de que hay una rueda ahí, me acerco y me doy cuenta de que la chica que anteriormente me había preguntado algo, se encontraba tirada en el suela y el causante de eso era una chico bastante alto de ojos verdes, me enojo un poco en la manera en la que estaba ahí burlándose de ella.
-¡¿Por qué haces eso?! -Grito la castaña muestras se levantaba del suelo.
-Por que puedo y se me da la gana -Dijo el chico mientras se acercaba a ella.
La castaña no dijo nada más, a lo cual el chico aprovecho la situación para decirle unos cuantos insultos, por lo cual me molestó un poco así que decidí acercarme.
-Oye tu, ¿Quien demonios te crees para hacer eso? -Le dije mientras observaba al chico con firmeza.
- ¿Disculpa? -Dijo el ojiverde mientras también me observaba
-Disculpa aceptada, ahora adiós -Le respondi con simpleza mientras tomaba a la castaña para irnos de ese sitio
Nos dirigimos al baños de chicas, no me agrada la idea de que los hombres se sientan superiores a la mujeres, por lo cual tome la decisión de ayudar a esta chica.
-Muchas gracias -Dijo la castaña cuando llegamos al baño. - Coraline -Se presento con una sonrisa tímida mientas extendía su mano.