A: Rocío Gonzales Aguilar/San Francisco, California, Estados Unidos.
Ayer,
No sabía lo que me pasaba,
Ni tenía en mi alma una ilusión,
Simplemente vivía, comía, me divertía y disfrutaba,
Sin sentir los latidos de mi corazón.
Y en una noche cualquiera,
Algo sucedió en mi interior
Como un susurro,
Como un bebe,
Como un temblor,
Sentí que algo nacía,
Sentí que algo se movía,
Sentí que algo clamaba.
Fue un estremecimiento
Una dolorosa sensación,
Un gran acontecimiento,
¡Me estaba naciendo una ilusión!
Una ilusión sin fundamento,
Sin esperanza ni religión,
Un hermoso sentimiento,
Me laceraba el corazón.
No lo pude detener, ni mucho menos comprender,
Nació. Creció y vivió como un niño sin amor.
Ahora,
Comprendo muy bien mi situación,
Ese niño sin amor
Que los primeros días me causó un gran dolor,
Nació en mi corazón y vino para darme una lección.
Me enseñó a no rendirme,
A nunca dejar de luchar,
A creer y no agachar la cabeza,
A no darme por vencido
Y le devolvió la fuerza,
A mí castigado corazón.
Ahora me acompaña en mi camino,
El poder del amor,
Que me llenó mi corazón vacío,
Y me suavizó mi corazón de acero.
Corazón que ahora late por ti cariño mío,
Amor que me devolvió mi corazón perdido.
Mi corazón de caballero.
https://youtu.be/tps2pSOp1js
15 de Enero del 2002.