Un sentimiento Extraño

Posé mis manos sobre el escritorio, «¿se suponía que este era mi trabajo?» pensé por un instante mientras miraba aquella bola de papel con algunas ideas garabateadas en ella, había pasado un año desde que aquel número dejo de llamar a mi teléfono, aun recordaba la sensación al escuchar ese sonido, trataba de contestar el teléfono lo más rápido posible, sin embargo, nadie regresaba el saludo del otro lado, estuvimos así por un año, hasta que simplemente se detuvo.

—¿Te encuentras bien Colin?

—Me encuentro bien Ameli

—¿tienes lista la propuesta para el siguiente articulo?

—Lo lamento, lo entregare antes de ir a casa

—¿sucede algo?

—No, no sucede nada

Si, no sucedía nada, mi vida era tan aburrida en aquella revista sin sentido que no tenía el mínimo interés de estar en ese lugar, a mi llegada se me prohibió participar en cualquier concurso de fotografía me sentía realmente frustrada y del área de imagen me cambiaron a la de planeación de contenido editorial «¿Por qué me habían hecho esto?» rezongué en mi mente impaciente.

—Bien, es hora de salir. No olviden sus papeles para este fin de semana largo

Tome mi bolsa dispuesta a irme, mientras mis compañeros charlaban sobre ir a beber, hacia tiempo que no bebía nada, debido a mi condición creía que no podría hacerlo de todas maneras, coloque los papeles en mi bolso, colocándomelo sobre el hombro derecho.

—Colin espera —mi jefe me detuvo con una sonrisa

—¿Sí? —respondí recelosa

—he recibido un correo de una empresa de publicidad en Beijín, ¿conoces a esta persona? —me enseño el nombre del director, pero no me sonaba de ningún lado.

—Lo lamento, pero no he escuchado de él

—me ha dicho que tiene buenas referencias de ti y a pedido que nuestra empresa te envié a China como pasante, a cambios ellos mandaran a un empleado experto en publicidad

—¿esta diciendo que quiere cambiarme? —cruce los brazos un poco enojada

—Nada de eso, no podemos hacer el cambio al menos que estés de acuerdo con ello

—Lo lamento, pero me gustaría pensarlo

—Claro debes consultarlo con el señor Aren —murmuro tronando los dedos mirándome de reojo

—¿puede pedirle al CEO de esa empresa que envié un correo con petición formal a mi correo?

—Ellos adjuntaron el correo para ti también, lo recibí hace dos días pensé lo habías leído

Tome mi teléfono revisando los correos, efectivamente el correo estaba en mi bandeja, pero por algún motivo se fue a spam, lo comencé a leer calmadamente, era tal y como mi jefe decía, la empresa solicitaba se me enviase a Beijín por mi buen desempeño en la compañía en la que estuve como pasante, aunque no recordara nada al parecer hice un buen trabajo en aquel lugar, eso me llenaba de orgullo.

Maneje con cuidado a casa eran las cinco de la tarde cuando llegue, tenia dos meses viviendo sola con Aren, en ocasiones me resultaba molesto, otras más se sentía solamente extraño y solamente en algunas ocasiones lo sentía como mi hogar, deje mi saco en el armario junto con mi bolso, poniéndome unas pantuflas me tire sobre las almohadas del sillón, la decisión fue tomada por mis padres, no existía algo que yo pudiese hacer para contrarrestar sus deseos.

—Estoy en casa —la voz de aren taladro mis oídos

—Hoy estas temprano —exprese con mi ano cubriendo mi rostro

—¿paso algo?

—Aren

—¿Sí? —sentí sus labios sobre los míos, pero no me moví ni un centímetro

—Llevamos dos meses viviendo juntos por petición tuya, contra mi voluntad me arrastraron hasta aquí

—¿Qué hay con eso?

—dijiste que si no lograbas convencerme de casarnos podría volver a casa

—He sido muy paciente

—Y yo lo he sido más, no pretendo …casarme contigo —dije en un murmullo leve esto ultimo

—¿no quieres casarte conmigo? ¿planeas quedarte como una solterona toda tu vida?

—Si ese es mi destino lo aceptaré

—¿estas acaso loca?

—No lo estoy —repuse mirándolo molesta

—¿es por ese correo que te enviaron del trabajo? ¿quieres ir a Beijín para encontrarte con alguien?

Cuando lo escuchaba hablar tenía la ligera sensación de que él sabía algo que yo ignoraba, guardé silencio tratando de calmar mis ansias por golpearle el rostro y lentamente comencé a explicar mis razones.

—Aren, tu y yo juntos realmente no hacemos un buen equipo, lamento que hayas pasado un año esperando, pero aun así no cambiara la forma en la que te veo, tomare el trabajo en Beijín, la empresa en la que trabajo esta acabada de todas maneras.

—¿crees que lo vamos a permitir?, tus padres piensan que estas loca ¿crees que te dejaran ir solo porque quieres?

—Lo harán

—¡COLIN! —suspire al escuchar su voz siendo proyectada como si se tratase de una bala