#3

La sacudida del avión me saca de la terrible pesadilla en la que me mostraban el cuerpo de mi querido Daniel  sin vida, solo recordarlo me provoca ganas de llorar y no puedo evitar derramar unas cuantas lagrimas pero las borro en cuanto nos informan que podemos bajar por lo que veo deben ser como las cinco de la mañana, al salir del aeropuerto ninguno dice nada y es mejor así no estoy como para responder sus preguntas, reconozco a uno de los chicos que nos espera junto a una camioneta negra así que me acerco a él para hablar

-Buenos días señorita, bienvenida… es señor Sebastián la espera en la casa junto al jefe de seguridad del Polaris y el agente encargado de la búsqueda del joven Daniel- habla en un perfecto inglés 

-Bien… ¿trajiste mis cosas?-

-Así es señorita, Tania la espera en casa todo esta como a usted le gusta- dijo entregándome el celular que siempre uso cuando estoy aquí

-Vamos, suban a los autos- les dije a todos, ninguno dijo nada e hicieron lo que les dije

Cuando estábamos en camino llame para informarme como estaban las cosas en el Polaris y me dijeron que los chicos estaban nerviosos y que no querían trabajar esta noche, dije que llegaría a más tardar al medio día para hablar con ellos así que pedí que los reunieran a todos… cuando me di cuenta ya estábamos pasando las enormes rejas de la casa, bueno casi mansión… casi… fui la primera en bajar del auto, vi varios autos fuera de la casa así que supuse que ya todos estaban esperando, entre deprisa a la casa, seguida por mi familia y encontré a Sebastián esperándome en la puerta del despacho, me gire a ver a mi familia

-Pónganse cómodos… la cocina esta por haya si tiene hambre pueden usar lo que deseen- vi a Tania bajar las escaleras - Tania muéstrales la casa y sus habitaciones tal y como te dije

-Como ordenes- dijo con un mal español

La ignore y fui al despacho salude a las tres personas que estaba en el lugar las cuales dos ya me conocían pero el encargado de la investigación me veía un poco confundido

-Vamos al punto agente quiero saber cómo va la investigación y cuánto tiempo les llevara encontrar a Daniel-

-Investigamos al secuestrador tiene muchas propiedades incluso fuera del país, nos llevara un poco de tiempo revisarlas todas y estar pendientes hasta el momento sabemos que no ha salido del país-

-Bien no me interesa si el mismo presidente se pone a buscar a Daniel, lo quiero de vuelta cuanto antes- hable fuerte, el solo asintió y de despidió de todos

-John quiero que aumentes la seguridad del Polaris e investiguen a todos los clientes no quiero que esto se repita-

-Claro que si Andrea, los chicos estarán reunidos al medio día tendremos todo listo para su llegada-

-Perfecto puedes retirarte- se despidió y se fue dejándome con Sebastián, tome una copa y la llene con wiski, me senté en mi silla y me dedique a ver como se derretía el hielo dentro del vaso con alcohol

-¿No dirás nada?- pregunto en un susurro

-¿Qué puedo decir?… sabes que lo quiero como si fuera mi hermano… sabia cuanto te amaba por eso permití que estuvieran juntos prometiste cuidarlo con tu vida… ¿y que paso?... ¡he Sebastián¡ ¿QUÉ PASO?- eso ultimo lo grite arrojando el vaso contra la pared

-¡Que no ves que estoy desecho… yo lo amo, y no sé que mierda le pueda estar haciendo ese psicópata¡- dijo dando golpes en la pared ambos estábamos llorando y alzamos mucho la vos, Tania entro de repente con una expresión de miedo

-Pueden dejar de gritar y romper cosas, todos están asustado haya afuera- dijo viéndonos a ambos

-Deja de joder Tania que esto aún no termina y si no quieren escuchar que se vallan a otro lugar- dije perdiendo la paciencia

-Andrea es tu familia la que está ahí afuera- dijo viéndome con desaprobación

-Me importa un carajo, ahora sal de aquí Tania o te daré de comer a los perros- Dije lanzando un cenicero que impacto contra el piso cerca de sus pies, ella soltó un grito y me vio asustada pues yo siempre fui muy calmada pero ahora si perdí el control- y ni una palabra de esto a mi familia- sentencie antes de que ella cerrara la puerta

-Andrea si le pasa algo… yo…. Yo no sé que hacer, no puedo vivir sin el-

-yo te tengo mucho cariño Sebastián… pero si le pasa algo no te lo perdonare y ten por seguro que yo misma te mato-

-¡¿Y crees que yo me lo perdonaría?¡… maldición Andrea lo amo, siento que desgarran por dentro… no sabes cuánto deseo que esto sea un sueño y que él entre por la puerta con su bella sonrisa y me cuente como estuvo su día mientras prepara la cena y luego dormir juntos mientras le digo cuanto lo amo-

Estaba sentada en mi silla escuchando a Sebastián hablar y recordando cada uno de los días que pase con él, lloro porque la angustia de no saber si está bien o… vivo, si ha comido o si está enfermo, solo lo quiero de vuelta…

Cuando pude calmarme busco a Sebastián con la mirada y lo encuentro sentado en el piso recostado a la pared aun llorando como un niño que perdió a su mama en el parque, me levanto y me acerco él y lo abraso, el solo llora más