Antipoesía dietética

Maldita sea, ¡muéranse!

Abandonen este plano en el nombre del más alto. Expiren su existencia y caduquen por el bien de todo, por el bien mío...
 


 

Siempre he pensado que merezco lo peor, así que cuando lo peor llega no tengo ni la más mínima duda de que voy a aceptarlo.
 


 

Pero a ustedes no. A ustedes no los acepto así que muéranse.
 


 

Acepto casi cualquier castigo que esté escrito en ese documento pero tengan por seguro que no pasaré desapercibido las pequeñas letras de visibilidad casi nula que están hasta el final de la hoja.
 


 

Y tengan en cuenta también que si algo no me gusta en ese apartado tomaré dicha hoja para limpiarme el culo con ella.
 


 

Porque no estoy para eso; no estoy para nadie, no estoy para mí.
 


 

Abandonen este plano en el nombre del más alto. Expiren su existencia y caduquen por el bien de todo, por el bien mío.
 


 

¡No estoy para nadie!
 


 

Quisiera estar para mí pero ni eso. 
 


 

Estoy destrozado. No funciono;
soy un fallido espécimen de humano que crearon por error y que rellenaron de cobardía y tristeza. 
Un alma atravesada con katanas que no es capaz de sanar. 
 


 

Llenaré este espacio de oscuridad para que nadie vea mi cara y lo adornaré con rosas negras de afiladas espinas que añadirán un color más, el color de esta misma obra.
 


 

Espero morir al finalizarla, y revivir en forma de letras; y que esas letras sirvan de escudo contra ellos, contra esos que deseo que mueran en este comunicado.
 


 

¡Muéranse!, mueran de una vez y déjenme en paz.
 


 

Estoy destrozado y no funciono. No funciono porque estoy destrozado y de momento siento que nadie puede repararme. Y al único que le tenía fe para hacerlo no está para mí porque soy yo, y en este momento yo no estoy para mí. 
 


 

Sentimientos depresivos y asesinos de toda mi felicidad que parpadea de repente por lapsos efímeros.
Maldita sea, ¡muéranse!
 


 

Sentimientos que me estancan en el pútrido bosque y en el bucle pantanoso donde no hay nadie, excepto yo.
Maldita sea, ¡muéranse!
 


 

Mueran de una vez.
 


 

Mueran.
Mueran.
Mueran.
Mueran.
Mueran. 
Mueran.
Mueran. 
 


 

Mueran aunque sea conmigo. 
 


 

No aplazen mi tormento porque no estoy para eso.
 


 

Porque no estoy para eso, no estoy para nadie y no estoy para mí. 
 


 



#970 en Paranormal
#349 en Mística

En el texto hay: suicida, antipoesía., crudo

Editado: 08.12.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.