6 de agosto de 2019
Tengo listas mis maletas; iré a trabajar a Alemania junto con mi esposa; mi hermano me está esperando allá y nos alojaremos en su casa, ya le di la noticia de mi vuelo.
Al igual que él, soy un científico, gracias a mis investigaciones y a las suyas hicimos grandes avances en la medicina y no solo en ese campo, incluso mejoramos la tecnología. Pero ahora toca un trabajo que a mí parecer es más un reto: buscar y crear una cura para el SIDA, tal vez suena descabellado y hasta imposible, pero si hay medicamentos para controlar la enfermedad también puede haber una vacuna.
Ya le hablé del viaje a mi hijo, así que lo dejaremos a cargo de la casa, sé que no pasará absolutamente nada; él sabe cuidarse solo, ya es un joven de veintiún años, gracias al trabajo que obtuvo luego de acabar el colegio, pudo ayudar de muchas maneras a la familia, pero ahora es momento de que también piense en su persona.
Antes de que me dieran la noticia, trabajaba en unas instalaciones científicas aquí en Ecuador; en estos años la nación ha prosperado sorprendentemente, la economía mejoró mucho, a pesar de los conflictos mundiales que iniciaron hace unos meses y las nuevas organizaciones terroristas que comenzaron a surgir se podía decir que había paz. Mi esposa pidió permiso en su trabajo para ir conmigo, creo yo que se merece un descanso, al menos en el tiempo en el que estaré allá, eso sí, costará acostumbrarme al cambio de aires.
—Ya tengo todo listo Marcos —dijo mi esposa, me observaba mientras ponía en el suelo las maletas que llevaría, vestía con jeans, blusa y un suéter—. ¿Crees que Maxwell estará bien?
Escuchaba atentamente sus palabras, fruncí el ceño como diciéndole que no exagere y me levanté, en su mirada notaba el miedo de dejar a su hijo solo, pero no podía ponerme a discutir con ella. Era una mañana de invierno, normal como cualquier otra, en fin, el ambiente no es el mismo en casa, aunque hayan pasado años, el perder a hija fue muy duro para todos, en especial para su hermano; la quería demasiado, y creo que eso le afectó mucho psicológicamente, su actitud cambio un poco pero seguía siendo el mismo.
Recurrimos a psicólogos, pero no hubo ningún cambio, aun así logro ser un hijo ejemplar.
—Ya es hora cariño —dijo mi esposa mientras se dirigía a la puerta principal, no sin antes despedirse de Maxwell, tomé mi diario y caminé detrás de ella; me despedí de y salí; tomamos un taxi y nos dirigimos al aeropuerto, nuestro vuelo salía en hora y media, pero hasta llegar allá con el tráfico que había tardaríamos mucho tiempo.
Con el cambio de gobierno, Ecuador fue convirtiéndose en una potencia y, al igual que Estados Unidos, intervenía en cada conflicto que ocurría en el mundo, incluso de forma militar, todo era casi perfecto y digo casi, porque ni siquiera con la pena de muerte instaurada en la constitución, la tasa de delincuencia disminuía, los desgraciados asaltaban a todo lo que se moviera. Tardamos casi la hora y media que faltaban para que el avión parta, pero logramos abordarlo de todas maneras, buscamos nuestros lugares y nos sentamos, miré por un momento hacia la ventana.
—¿Nervioso? —dijo Eleanor fijando su vista en mí.
—Un poco —contesté devolviendo la mirada, a decir verdad estaba muy nervioso solo que trataba de no demostrarlo—. Nos espera un largo viaje, de aquí a Buenos Aires y luego a Berlín.
—Tienes razón, ya verás que sin darnos cuenta estaremos sobre Alemania; por ahora descansa, has estado muy estresado.
El avión emprendió la marcha, el piloto ordenó ponerse los cinturones y después de realizar dicha acción recosté mi cabeza suavemente, solo pasaron pocos minutos, el tiempo transcurría con mucha lentitud mientras contemplaba el cielo totalmente azulado.
12 al 19 de agosto de 2019
Han pasado seis días desde que llegamos a Alemania y me he acostumbrado a trabajar junto a otros científicos de renombre, de vez en cuando me comunico con mi hijo. El trabajo es difícil; he escuchado rumores de que se escogerán a los mejores científicos para que trabajen en una vacuna para el SIDA, al menos eso escuché de mis superiores.
Pensaba que vivir aquí sería un tanto complicado, pero me equivocaba; el inglés me ha servido para desenvolverme aquí con notable facilidad, el trabajo es estresante y hago todo lo que puedo; de vez en cuando nos dan días libres, los cuales aprovecho para conocer la ciudad. Mi esposa a veces se preocupa por Maxwell y lo entiendo; pero hay momentos en los que se vuelve un poco estresante.
—Ya quédate tranquila, por favor —dije con frialdad sin que mi esposa lo notara; nuestra habitación se encontraba un poco desordenada y ella estaba sentada en el filo de la cama—. No te preocupes tanto.
—No puedo... saber que mi hijo esta solo en casa... No me deja estar tranquila —respondió, su tono de voz era triste; como si tuviera depresión.
—Eleanor, él ya es un adulto, sabe cuidarse muy bien; además su novia lo vigilará; así que deja de pensar ya en eso —continuaba; en ese preciso momento mi hermano entró en la habitación y nos vio—. Puedes llamarlo mas tarde para que estés más tranquila —añadí y salí de la recámara haciéndole una señal a mi hermano para que la deje sola.
Será porque hay noticias de ataques terroristas; los yihadistas que siguen intentando imponer su ley y el hecho de que Estados Unidos les impida que realicen esos ataques, no lo sé con exactitud, lo que si puedo asegurar es que mi país será el siguiente en la lista y con las políticas que ha tenido; no tardará en suceder, tal como pasó con Reino Unido; sin que nadie sospechara, destruyeron todo Londres; ahora es una ciudad fantasma, sin rastro alguno de vida.
Canadá también sufrió las consecuencias, recuerdo que eso fue noticia mundial, pasaban por televisión por medio de drones como las ciudades estaban siendo arrasadas, eran ataques masivos a un solo país para ser exacto, actualmente este país ya no existe, es solo escombros; los supervivientes (si los hubo) se trasladaron a distintas partes del mundo, obviamente se les ayudo.
Rusia, llamado nuevamente Imperio Ruso tras el nuevo gobierno y posterior cambio de ideología política también sufrió ataques pero parecía como si no les afectara; luego de unas semanas, Estados Unidos y el Imperio realizaron un ataque conjunto contra posiciones yihadistas, debido a eso; Emiratos Árabes Unidos y Afganistán junto a otros países árabes entraron en una guerra que hasta el día de hoy continúa y parece que no acabará en un buen y largo tiempo.