Pov. Cameron
“Qué bueno que volviste, a ver si aprendes un par de cosas del valor de la familia mientras te quedas aquí”
Las palabras de Ryan resonaban con fuerza en mi cabeza ¿por qué? No tengo ni la mas remota idea, me llevo el vaso de whisky de nuevo a los labios.
¿Cuál es la historia que no nos han contado? ¿Qué es ese único que secreto que jamás me han dicho?
Recuerdo muy poco de ese día, recuerdo la voz desesperada de Ryan, recuerdo la voz furiosa de papá, yo estaba aún en la universidad, en el ultimo semestre.
Estaba estudiando, tenía exámenes en unos pocos días, Ryan me llamo al teléfono, Val había desaparecido, yo no podía viajar en ese momento, él no lo sabía, pero yo había tenido una discusión bastante fuerte con papá y no tenía dinero para regresar, le dije que llamara a papá, que en ese momento no podía ayudarlo, ese día se destrozo cada lazo que tenía con mi hermano. Pocos días después me enteré de que Valentina estaba en el hospital, y se iban a mudar a otra ciudad, después de ese momento no supe mucho de ellos hasta el día que mi padre me dio el caso que debía llevar.
Mis sentidos se ponen alerta cuando escucho un grito agudo, el vaso ha caído al suelo y yo ya estoy corriendo en dirección de aquel sonido.
Veo a Rosa corriendo escaleras arriba a mi lado, su habitación y el despacho están en la misma planta, por lo que ahora estamos uno al lado del otro, me mira rápidamente con los ojos tristes y completamente seria, corre directamente a la habitación de Valentina, pero puedo ver que la puerta del cuarto de Ryan esta abierta en su totalidad, llego a la puerta del cuarto de mi hermana pequeña.
La escena que tengo frente a mi me desconcierta.
¿Qué demonios he estado haciendo los últimos años?
Pov. Thomas
¿Siempre ha sido así de hermoso esté lugar?
<<Tal vez, solo que jamás quisiste verlo de esta forma>>
Es cierto, tal vez nunca quise ver la belleza plena de este lugar, bueno que eso de ser un preadolescente con problemas de temperamento no es como que haya ayudado mucho a mi forma de ver las pequeñas cosas que el mundo nos ofrece.
<<Aparte solo tenías ojos para ella>>
Cierto, solo tenia ojos para ella, sonrío sin poder evitarlo, me perdí de muchas cosas pero ella me necesitaba más que todo y cuando se fue… solo ya no pude más con todo y me perdí en toda la oscuridad que me rodeaba.
Miro el cielo, ambos estamos recostados sobre el césped de la pequeña colina que hay a algunos cuantos minutos caminando desde casa, es sábado, así que podemos estar completamente tranquilos, hemos venido a ver el amanecer, hace mucho que no lo veíamos juntos, siento la mirada de mi hermana sobre mí, sé perfectamente que está evitando preguntarme.
Si bueno, la vida no siempre nos pone el camino sencillo, no soy el primero ni el ultimo que alguna vez se sintió en lo más profundo del abismo.
<<Por esa razón te niegas a sentir algo por alguien>>
No, eso no es cierto.
<<Lo único que vas a lograr seguir negando tu miedo, será perderla a ella también>>