Arlett
Pensar en que estuve cara a cara con la muerte, me pone los vellos de punta
Reflexionar en la muerte para mi siempre fue un dolor de cabeza
Mi madre me dice que no le tema a la muerte, siempre me da un sermón cuando comienzo a decirle que temo morir y dejar a todos los que quiero
Es por esto que en este momento estoy escuchando la plática mas aburrida, y todo se lo atribuyó a mis jodidos prejuicios
Siempre tengo que salir con alguna locura
--Madre he escuchado mil y una veces tu prédica sobre la jodida Parca-- me levanto del sofá y camino hacia la cocina
--Hija quiero que entiendas que es por tu bien que te hablo de la muerte, quiero que comprendas que no tienes que tenerle miedo, en vez de miedo quiero que te sientas cómoda hablando de ella-- dice mi madre cuando llega a mi costado
--Comprendo tu punto pero tienen que comprenderme a mi, tengo temor de que un día despierte y ya no ustedes no estén a mi lado, tengo miedo de que un día ustedes despierten y yo no este hay para acompañarlos-- la abalanzo sobre ella y la abrazo con todas mis fuerzas
--No tienes porque sentir ese temor hija, si algún día nosotros partimos de tu lado quiero que me promesas que no te quedaras sumida en la tristeza-- me dice acunado mi rostro en su rostro
--No te prometo nada Madre-- entre lágrimas y la aflicción le regalo una sonrisa a mi madre
--Más te vale que me lo cumplas, porque si no lo haces te ahuyentó todas las noches alandote las patas, ya estas advertida hijita-- termina de hablar y lo me lanzo una gran carcajada
--Todo contigo es imposible madre-- acuno sus cachetes en mis manos
--Solo quiero que pienses en una cosa y es en cuando me darás nietos-- abro los ojos de una magnitud que ni me pasaba por la mente que podía abrirlos
--Madre te he dicho que te hagas la idea que no tendrás nietos-- ella abre la boca para hablar pero yo la interrumpo
--La gran interrogante es con quien los tendria-- contraigo los hombros
--Si ese es el problema es el donador de esperma, yo te puedo conseguir varios números de teléfonos -me guiña un ojo y se adentra a la cocina
--Verdaderamente eres un caso madre-- le grito y ella estalla en carcajadas
Llego al restaurante y me encuentro a el vejestorio hablando animadamente con Grabiel
Camino a paso determinado hacia ellos
--Vejestorio, es bueno verlo por aquí-- beso sus mejilla y el sonríe y me devuelve el saludo
--Que bueno que te apareces por aquí Arlett, porque te tengo una sorpresa para ti--
Miro su rostro tratando de adivinar cual sera su dichosa sorpresa, pero esto se dificulta ya que en el rostro del vejestorio no hay ninguna emoción
Desvío mi mira hacia donde se encuentra mi jefe el pervertido y este se encuentra mirándome de una manera que no lo puedo describir
Me esta comenzando a asustar
--¿Arlettcita, recuerdas la conferencia de cocina que te dije que se celebrarían en México?--
El vejestorio de mi tío me saca de mis pensamientos
--Claro que recuerdo tío, el día que te invitaron estabas conmigo--
--Pues resulta que no podre asistir por que tu prima Emma para ese tiempo estará por dar a luz a mi primer nieto, como sabrás eso yo no me lo puedo perder-- dice esto último con un brillo en los ojos
Porque no me había enterado que mi sexi prima a punto de alumbrar
En que clase de mundo vivo
--Pues entonces no podrás asistir a la conferencia-- digo con pesar
--Yo no, pero tu si-- en el instante que esas palabras salen de su boca en mi crece una emoción de esas que te hacen gritar de felicidad
-- Encerio tío, cuando me voy-- lo abrazo y beso sus mejillas
--No iras sola querida sobrina-- dice esto y yo lo miro con cara de duda
--Pues entonces quien me acompañara-- pregunto y en su rostro se asoma un sonrisa burlona
--Pues tiene a tu acompañante para la conferencia justo al lado de ti-- señala justamente al lado derecho de donde estoy
Giro la cabeza y me encuentro a Grabiel con una sonrisa mas brillante que las joyas de la corona Española
Ese chico si que es un grano en el bendito trasero
Miro fijamente al vejestorio tratando de que me explique la parte de la historia que me he perdido
--Te he dicho pequeña traviesa que no me mires como lo estas haciendo en estos momentos, sabes que me intimidas mirándome fijamente-- sonrió y él se relaja un poco
--Es mejor para todos que alguno de los dos no valla a la convención, ya que si estoy más de dos días con mi jefe me volveré totalmente loca--
--Ya esta decidido Arlett, tu iras con Grabiel, y punto final-- dice decidido
El vejestorio comuna hacia la salida del restaurante y yo me dispongo a observar la cara de mi ahora enemigo
Cuanto me gustaría dárselo de comer a los tiburones
--Aunque no me quieras cerca de ti, yo siempre estaré cerca para todo lo que necesites--
Se aleja después de decir aquellas palabras dejándome totalmente shockeada
¡¡Joder cuantas cosas mas me pasaran!!
Me encuentro en la cocina preparando un pie de manzana, cuando entra Nahomy una sub-chef de intercambio
--Arlett, afuera se encuentra un chico preguntando por ti, dijo que quería verte-- se postra a mi costado y comienza a cortar unas fresas
--Veré que necesita ese chico-- me limpio las manos y camino despacio hacia la puerta
En el camino se cruza Grabiel en mi camino
--Señorita Shelby, necesito hablar algo urgente con usted-- sus manos toman las mías y en ese instante siento una pequeña chispa de electricidad correr por mi cuerpo.
Dios que ha sido eso
Miro su rostro y me detengo en sus ojos, aquellos ojos negros como la noche, en lo que quisiera que solamente yo me pudiera reflejar, bajo mi mirada hacia su bonita apetitosa boca, puedo decirles que su boca estará en mi lista de las cosas que puedo ver pero jamas tocar
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Editado: 07.11.2022