Capítulo 51: Duelo
Pasamos los pasillos del castillo y salimos al jardín principal.
- ¿Dónde estará? – pregunte, Tsubasa se quedó quieto un momento y me tomo de la mano.
- Por aquí, vamos. – las habilidades del elegido eran increíbles, Tsubasa podía escuchar cualquier cosa a su alrededor.
Después del jardín principal entramos a una nueva área del castillo, me pare frente a la gran puerta cubierta de enredaderas y cerraduras. Siete cerrojos delos cuales algunas tenían puesta la lleve, el símbolo de la puerta era un árbol enorme al igual que el emblema del medallón de la orden.
- El mecanismo es impresionante – dijo Zaahir
- No tenemos tiempo para esto ahora – Tsubasa quito de la pared dos espadas decorativas, me entrego una a mí y otra a Zaahir. Debemos seguir, para los demás no es tan fácil y debemos apresurarnos.
No sabía lo que estaba escuchando, pero si Fred, Aideen y Alek estaban en problemas no había tiempo que perder.
Llegamos a la parte trasera del castillo la cual estaba en ruinas, donde se supone debería estar los límites del castillo solo había un gran acantilado y la vista al mar, Dean estaba parado sosteniendo una espada plateada delgada y un mango algo extraño, era la primera vez que miraba una espada así. Dean no tenía su máscara y no había salida para el más que el precipicio o nosotros.
Tsubasa intento atacarlo con su habilidad pero nada sucedió. Estábamos conmocionados incluso Zaahir intento segarlo con su luz pero no pareció tener ni un efecto en él, quise atacarlo pero Tsubasa y Zaahir me detuvieron impidiendo mi paso con sus brazos.
- ¿desde cuándo lo sabes? – pregunto Tsubasa y Dean solo sonrió.
- Desde que ataque el castillo – yo estaba confundida.
- ¿Qué está pasando? ¿Qué es lo que él sabe? –
- Viste los recuerdos, él fue bendecido, ninguna habilidad puede hacerle daño –
- En efecto, los ataques con gemas no surten efecto en mí, las habilidades tampoco, ni si quiera magnolia pudo hacer algo contra mí – se jactaba de eso, quizá la única forma de hacerle daño era cuerpo a cuerpo, pero ni siquiera eso me constaba. – puedes intentar atacarme con esa espada de juguete pequeño pero dudo mucho que puedas hacerme algo, tengo años de experiencia en esgrima. – a pesar de ser inteligente, Zaahir seguía siendo un niño, podía ver como sus manos temblaban.
- Él no lo será, yo me enfrentare a ti. – Tsubasa tomo la espada de Zaahir y avanzo poco a poco hasta posicionarse en forma de batalla.- Zaahir si algo llega a suceder protege a Hana por mí.
La pelea empezó, con anterioridad había visto como María y Luka luchaban pero esto era diferente, la forma de pelear de Dean era extraña, luchaba con una sola mano mientras Tsubasa usaba ambas firmante, también la forma de pararse de Dean me parecía extraña, además de eso el nivel era más alto a otras peleas que había visto y eran tan rápidos. Daban vueltas y saltos por todos lados.
Dean avanzaba desplazando sus pies marcando una distancia, mientras atacaba con su mano izquierda, la otra mano parecía inútil en comparación, solamente la tenía levantada hacia atrás, él era quien más se movía, daba brincos al avanzar y vueltas rápidas. Tsubasa estuvo a punto de atacarlo con la espada, pero cuando se acercó Dean cambio de mano y surgió peleando sin inmutarse. De pronto un estruendo sacudió todo y una ventisca fría pasó por detrás de nosotros, en esa sorpresa dean aprovecho y con el mango de su espada desvió el ataque de Tsubasa, tomo el filo con la otra mano y lo apuñalo rápidamente.
Tsubasa dio pasos atrás separándose de la hoja, Dean se había cortado su mano pero no parecía importarle, quiera ir a curar a Tsubasa pero Zaahir- me lo impidió, aun herido Tusaba se abalanzo sobre el he intento atacarle de nuevo, pero esta vez Dean hizo volar la espada de Tsubasa y quedo desarmado. Cuando Dean intento de nuevo atacarlo una flecha llego disparada y los separo.
- Lamentamos la tardanza – Alek, Aideen, Valentina y Fred aparecieron.
Fred fue quien lanzo la flecha con su ballesta, valentina cargaba a Aideen mientras la chaqueta de Fred la cubría y Alek estaba más pálido que de costumbre, además de eso sus manos, nariz y ojos estaban rojos.