ATADA CAPITULO: 7

Dormía tranquilamente en mi cama cuando de pronto alguien entró a la casa.

Era Raúl Soto.

Yo seguía dormida sin escuchar nada, yo me quedé impactada al ver la sombra que se acercaba cada vez más cuando de pronto Raúl Soto me puso algo que me hizo dormir.

Después de un rato me desperté y vi que seguía en la casa, atada fuertemente donde mis manos no se podrían desatar.

Unos minutos después vi que Raúl Soto venía hacia acá y me dijo:

-Por fin estamos juntos mi amor.

-No soy tu amor.

-Claro que sí, además tu mamá te vendió y yo te compre así que ahora eres mía.

-¡No soy tuya!

-Ahora mismo te lo voy a demostrar.

Unos segundos después el teléfono de Raúl sonaba fuertemente.

-¿Qué quieres?

-Señor hemos encontrado Andrés.

-Qué dices estúpido Andrés está muerto.

-No señor parece que el muerto revivió aquí lo tenemos, descubrimos que atrás de la espalda tiene una mariposa negra eso debe significar algo y ya lo estamos investigando.

-Ahorita mismo voy no se muevan de ahí y vigilenlo bien.

-Por esta vez te salvaste preciosa pero enseguida vuelvo tú y yo tenemos algo pendiente.

Raúl se había ido yo seguía atada con las manos todas adoloridas cuando de pronto vi, qué Víctor se acercaba a mí.

-¿Está bien señorita?

-Sí.

-Listo, ya la desate ahora vámonos de aquí.