Isabel
Llevo dos días en este lugar y parece que estoy como en una cárcel, pienso. Decido ir a dar un paseo por la casa y escucho las voces de Caín y Axel. Por lo que oigo están discutiendo y lo que están diciendo no me gusta nada. Con el extraño comportamiento de todos los habitantes decido quedarme a investigar. Al poco rato de haberme puesto a espiarles me descubren, por lo que me veo obligada a salir corriendo de allí y Cain junto con otros dos que no distingo empezaron a seguirme.
Cuando salí estaba lloviendo y hacía un viento capaz de arrancar desde la raíz y arrastrar un árbol. Me fui a resguardar entre dos casas cercanas, las cuales flaqueaban un oscuro callejón sin salida.
Espere hasta que terminara de llover; mire el reloj que tenía escondido y me percate que solo había pasado quince minutos los cuales se me antojaron horas. Observe a mi alrededor por si deslumbraba a mis perseguidores y gracias a la luna llena pude respirar aliviada de no verles. Por fin conseguí librarme de ellos, pensé. Después de recuperar el aliento, me asome y proseguí mi camino.
Sin darme cuenta cometí el error de no fijarme en un callejón cercano donde me había escondido. Empecé a correr lo más rápido que podía hacia las afueras de la aldea, en dirección al bosque en el nordeste de la aldea donde había pasado las dos últimas semanas escondida ya que alguien de la capital me quería muerta y Caín se enteró esa misma semana cuando fue a la capital cuando fue a arreglar unos asuntos .
Menos mal que llevo ropa de hombre, hay luna llena que me proporciona luz suficiente y la reciente lluvia les dificulta que me persigan pensé. Sigo corriendo hasta que diviso un árbol lo suficientemente grueso como para ocultarme y me escondo y aprovecho para recuperar el aliento.
Después de diez minutos oigo sus voces:
-La perdimos Caín- dijo uno de ellos cuya voz no reconocí.
- Es mejor volvamos y mañana retomemos la búsqueda - dice el otro a quien,por la voz , reconozco y es Axel.
-Está bien- responde Caín no muy convencido.
Cuando me asegure de que ya se fueron, salgo de donde estoy escondida y voy al encuentro de un lugar seco donde dormir. Después de un rato caminando encuentro un granero y no dudo en entrar. Por suerte veo un sitio cómodo y me tumbo.
Me vienen todos los recuerdos de los últimos días. Cuanto más lo pienso y me fijo en los pequeños detalles de los lugares,la forma de hablar de todos , la ropa y los detalles del mobiliario; más segura ( convencida) estoy de que me encuentro en la Edad Media, y que como consecuencia he viajado en el tiempo ( al pasado) como me dijo el otro día Breeze pienso. Con ese pensamiento me quedo dormida.
No se cuanto tiempo ha pasado desde que me dormí, solo se que dormí lo bastante como para estar despejada y fresca como una rosa, aunque tenía el cuerpo dolorido ya que había dormido sobre el suelo sin nada blando debajo de mi cuerpo me digo.
Mire el reloj para ver la hora pero estaba parado; seguro que esto ha pasado al haber viajado al pasado y así me veo obligada a guiarme por el sol, voy a mirar el móvil pienso. Cuando lo hago, veo que funciona a la perfección menos el reloj que tampoco funciona. Siento algo de alivio al ver que el móvil me funcionaba porque por lo menos podría escuchar música cuando no hubiera nadie a mi alrededor.
Cuando salgo del granero, a lo lejos diviso un camino y decido tomarlo para alejarme lo máximo posible de Caín y sus secuaces. Rato más tarde llego a una pequeña aldea y me quedé fascinada, como consecuencia no me doy cuenta de que estaban llegando a la aldea dos hombres a caballo. En ese mismo instante en que llegaron los dos jinetes, oigo unas voces y al reconocer la voz de Axel me estremezco:
-¡ Cain ahí está la chica!
Cuando quiero darme cuenta de cómo reaccionar Caín se encuentra a un metro escaso de mi y temiendo lo peor cerré los ojos , pero lo peor que me temía que me podía pasar nunca llegó. En ese instante abro ,los ojos para observar lo que está pasando a mi alrededor y veo que el más joven de los jinetes, un chico mayor que como mucho me sacaría 3 años; se está enfrentando a Caín hasta que este último queda reducido por el chico misterioso del cual no puedo apartar la mirada.
-Su Majestad, este es Caín el mercenario y contrabandista que estábamos buscando desde hace tiempo- dice el chico joven.
-He aquí a sus cómplices- dice el otro jinete
-Nos los llevamos a la capital- dice la reina y se gira hacia el joven misterioso- bien hecho Alex.
Alex y yo oímos un ruido de la parte más cercana a la aldea proveniente del bosque y nos giramos para descubrir quien o que lo ha provocado.
Lo primero que se me pasa por la cabeza es que se trate de un animal salvaje, pero a quien veo en el foco del ruido es a Breeze.
Antes de poder contenerme exclamo casi al mismo tiempo que Alex:
-¡¿ Qué haces aquí Breeze?!
A diferencia de Alex, quien se queda como una estatua; salto encima de Breeze dando un efusivo abrazo. Breeze en ese instante no se movió y se sonrojó por la sorpresa pero al final me lo devolvió.
Por lo que veo os adelantasteis- dice Breeze al mismo tiempo que nos separamos.
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Editado: 25.07.2024