Athena & Medusa: Saint Seiya Fanfic

Capítulo 2: Otra vieja enemiga

Athena es convertida en piedra y Medusa observa satisfecha el acto que acaba de cometer.

—Al fin... pude vengarme… todo está bien ¿No?

Lo dijo con risas al principio pero luego rabia y tristeza a la vez, siglos de sufrimiento e incomprensión pasaron por su mente y lo que tanto deseaba por fin había llegado, su venganza estaba consumada y aún así estaba confundida sin saber que sentir, quiso dejarse caer pero se mantuvo fuerte ya que el caballero de virgo se encontraba presente.

Shaka se sentó en posición de meditación con los ojos cerrados permaneció tranquilo.

—¡Oye tú —dijo Medusa a Shaka en tono de burla— no pudiste proteger a Athena! ¡¿Qué clase de caballero eres?!

—Me mantendré al margen para que Athena y tú resuelvan sus asuntos. —respondió Shaka.

—¿Qué dices? Pero si Athena está… petrifi…

De pronto la figura petrificada de Athena comienza a brillar y a romperse. Medusa no puede creer lo que ve. Y ese mismo instante, hilos blancos muy finos se extienden por el suelo como ligera neblina sin que nadie lo note.

Medusa y Shaka permanecen concentrados en el brillo y cascarones de piedra que se desprenden de Athena hasta que la luz empieza a difuminarse y revela que la diosa de la sabiduría es de carne y hueso otra vez.

—¡¿Cómo es posible?! —exclamó Medusa— ¡mi mirada que pudo petrificar al Titán Atlas! ¡¿no te hizo ningún daño?!

—No olvides que fui yo quien te dio ese poder, tu mirada no tiene efecto en mi.

—Ya veo —dijo la Gorgona— sigues jugando conmigo… ¡te mataré de la forma tradicional! con mis propias manos.

—¡Medusa eres una inútil! —se escucha una horrible voz femenina que viene desde las profundidades de la tierra— si tú no puedes vengarte yo sí que me vengaré.

Al decir esto sale del interior de un hoyo oculto en el suelo la dueña de la terrible voz. Una criatura con ocho patas y forma de araña con el torso de mujer, seis ojos, una boca y mandíbula arácnida que le distorsiona la forma de hablar.

Los hilos que flotaban por encima del suelo se fueron uniendo para ser más resistentes y salieron disparados contra Athena y contra Shaka, que quedaron atrapados en su red.

La diosa ahora inmovilizada de manos y pies al igual que el caballero de virgo, Saori observa con sorpresa a la nueva criatura.

—¡Tú eres…!

—Soy la que te ganó en aquella competencia de tejido que tuvimos, soy Aracne.

En efecto Aracne era una mujer muy talentosa en el arte de tejer, se creía muy superior con sus hermosos tejidos muy superior incluyendo a los dioses y un día fue visitada por Athena. Las dos tuvieron un duelo para ver quién fabricaba el mejor tejido y salió victoriosa Aracne que presumía tanto y de mala forma que terminó enfadando a la diosa. Ese enfado hizo que la convirtiera en una araña.

—Te creías la mejor en todo 
—continua increpando Aracne— no pudiste aceptar tu derrota y me transformaste en esta monstruosidad, ahora me cobraré por eso.

—¡Yo también deseo venganza! —se oye el grito a lo lejos de un minotauro que viene corriendo a toda velocidad, sus pisadas hacen temblar el suelo — ¡Athena tú me convertiste en este horrible monstruo!

—No, lo tuyo fue diferente —dijo Medusa.

—Así es… tu mamá se enamoró y lo hizo con un toro… luego naciste tú —dijo burlonamente Aracne.

—¡Mamá! ¡¿Por quéee?! —gritó llorando el minotauro mientras se iba corriendo lejos.

—¡Libera a Athena en este instante alimaña arácnida! —le reclama Shaka a Aracne mientras intenta liberarse.

—Es inútil, mis hilos son casi tan fuertes como los que usa Minos en su Marioneta Cósmica. Y ahora a lo que vine, mira Medusa como se hace, me vengaré por las dos… ¿Medusa? ¿Dónde se fue? —Aracne miraba a todos lados con sus seis ojos buscando a la Gorgona que desapareció sin dejar rastro.

Saori quiere liberarse de las telas de araña pero son demasiado fuertes para ella e intenta razonar con su nueva enemiga.

—Aracne, —dice apenada la diosa griega— a ti también te hice mucho daño… yo… lo siento.

—No tienes por qué —dice sonriente— ahora me cobraré por todo.

Aracne se acerca lentamente mientras los hilos aprietan fuertemente el cuello de Saori Kido.

—Este es tu fin.

De repente el plano dimensional cambia, el suelo y el cielo se desvanecen y se llenan de iconografías e imágenes de Buda que aparecen en paredes infinitas.

Se trata de la técnica del “tesoro del cielo”; Shaka abrió los ojos ya que la presencia de Medusa había desaparecido.

Aracne sorprendida, queda inmovilizada y delante de ella aparece Shaka quien se despojó de su armadura para poder liberarse de los hilos que lo sujetaban. A pesar de ser un monstruo, en el fondo Aracne es todavía una mujer y se ruboriza al ver el torso desnudo del caballero dorado.

—Es apuesto y por aquí solo vienen muertos feos —Piensa.

—¿Por qué te sonrojas? —pregunta el santo de oro— no pienses en cosas pervertidas, ni que estuviéramos en Wattpad. Se quedan los tres en silencio y lanzan una mirada acusadora a la persona que está leyendo esto.

Shaka eleva el cosmos y prepara su ataque.

—Athena me dijiste que no atacara a Medusa pero no me dijiste nada sobre ella.

—Sha… ka —dice débilmente Saori.

—¡Ahora recibe mi técnica… El tesoro del cielo! —al pronunciar estás palabras Aracne es lanzada hacia atrás y cae al suelo que apareció y el plano dimensional volvió a la normalidad.

—¿Qué me hiciste? —pregunta la arácnida levantándose poco a poco y sus seis ojos ahora lucen blancos.

—Te quité el sentido de la vista, eso por haberte osado a mirarme sin armadura, y ahora el siguiente sentid…

No terminó de hablar porque desde los túneles subterráneos de Aracne apareció Medusa dando un salto sorpresivo y lanzando su mirada letal al caballero ateniense.

—¡Shaka no! —Exclamó Saori pero demasiado tarde, Shaka de virgo quedó convertido en piedra.



#5467 en Fanfic

En el texto hay: mitologia griega, medusa, saintseiya

Editado: 01.10.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.