Capítulo 7 Antes de salvar a los demás, debí intentar salvarme a mí.

Puse mi corazón en una maleta

También puse ahí mis sueños y mis metas

Cartas viejas y aquella cometa que mi mamá reparó

Pero todo se perdió en el naufragio que provoco mi dolor

Y nunca llegamos a puerto felicidad

Ya nunca llegaremos a ningún lugar

En la actualidad

Llegamos a la hermosa casa azul. Esta casa la diseño el papá de Bianca como regalo de bodas para su esposa porque los ojos de la mamá de Bianca eran azules y también era su color favorito. Una de las cosas que más amaba el papá de Bianca de su difunta esposa eran sus ojos, pero lamentablemente su esposa enfermo de cáncer de corneas y tuvieron que quitarle los ojos, igual eso no funciono porque meses después la mamá de Bianca falleció cuando Bianca tenía apenas 12 años. El papá de Bianca no volvió a pisar la casa azul y se la regalo a Bianca cuando ella cumplió 16. Ahora el papá de Bianca está casado y tiene otro hijo de dos años al que Bianca adora. Bianca siempre dice que le da felicidad que su papá haya vuelto a encontrar a alguien que lo ame, pero que ella siente y puede ver que aun ama y extraña a su mamá. Es normal, es difícil olvidar a nuestro primer amor.

Mi mamá mira la casa azul y sonríe, mi hermana murmura sobre lo hermosa que es la casa y el jardín donde solo hay rosas azules. Siempre me gusto eso de esta casa, eso y la razón por la que se construyó, por eso me pareció muy romántico que Jared me dijera que me ama por primera vez aquí.

-Y eso que dentro de la casa todo sigue siendo de diferentes tonos de azul-dice Emily.

-Pero también hay adornos blancos, pocos pero los hay-dice Bianca con una sonrisa mientras camina hasta la puerta de la casa.

No camino con ellos, voy a ver las flores. Me gusta mucho ver las flores y pensar. Me relaja estar aquí de pie mirando las hermosas rosas azules que Bianca mismo sembró y vio crecer. Ella ama estas flores, siente que su mamá esta con ella mientras esas flores están aquí. Toco una rosa y por accidente una espina me pincha el dedo índice, pero no duele, tampoco sale sangre. Aprieto con fuerza las espinas con mi mano derecha y espero a que duela pero nada. Después de unos minutos de ver las rosas entro en la casa y escucho que están en la sala hablando de mí.

-Alice es el tipo de persona que puede hacerte sentir mejor en cinco segundos, siempre nos levantaba el ánimo y aun no entiendo como lo hacía. Pero cuando venía a estos lugares… era otra Alice, melancólica y rota-Jared deja de hablar un momento-sabíamos que solo visitaba sus lugares favoritos cuando quería o necesitaba sentirse mejor con ella o con la Alice que solía ser. Ya estaba rota antes que sucediera lo de Peter, estaba rota hace tanto tiempo y no sabemos que la rompió. Quizás fue lo de su padre, el no querer lastimar a su mamá o la presión de ser perfecta y mostrarse siempre fuerte. Quizás fue todo eso junto o nada de eso, solo ella sabe… no ella tampoco lo sabía, eso creo yo, era una de las cosas que más la torturaba. Le molestaba no encontrarle una razón a su dolor, le molestaba llorar sin ninguna razón. Le molestaba estar triste todo el tiempo y fingir que todo estaba bien. En sus lugares favoritos no tenía que fingir, por eso le gustaba venir aquí, porque podía ser ella y solamente ella. Porque podía revolcarse en su dolor y después pararse y seguir luchando. Siempre se ponía de pie sin ayuda de nadie. Es fuerte, más fuerte que todos nosotros juntos, ella nos cargaba a todos, cargaba nuestros problemas y nunca permitió que nadie cargue con los problemas de ella. Eso tiene que cambiar, ella no está sola, tiene que aprender eso. Ella tiene que entender que estamos aquí para ella y que está bien pedir ayuda cuando siente que el dolor y la soledad cruzan su puerta. Que está bien pedir ayuda cuando siente que sus piernas tiemblan, está bien no ser siempre fuerte, que está bien llorar a veces y ella no debería sentirse mal por eso. Nadie debería sentirse mal por eso.

No, pero tampoco podían ayudarme mucho, solo yo podía hacerlo, solo yo podía sacarme del hueco en el que estaba, pero no quise hacerlo. Tampoco quise pedir ayuda ¿Cómo podían ayudarme si no sabían cuánto dolía? Solo quería encontrar un lugar donde puedan reparar mi alma, donde puedan reponer las partes que he perdido en el camino. Estoy tan rota, tan destrozada que no recuerdo como era antes. Solo quiero salir de este desastre, pero no encuentro una manera, no veo una salida, no veo nada… estoy tan perdida. Camino a la deriva, alejada de todos los que me aman, me he apartado de ellos apropósito y ahora no sé como volver a ellos, solo quiero regresar el tiempo a los buenos momentos del pasado. Estoy en mi momento más oscuro, en lo más profundo del hueco, enterrada bajo todos mis arrepentimientos y malos momentos, enterrada junto a mis demonios. No puedo hacer nada, estoy tan cansada de tratar de salir, debí pedir ayuda cuando aún tenía fuerzas, cuando aun podía salir, ahora ya estoy tan cansada y mis huesos están hechos pedazos. Ahora solo espero a que mi reloj llegue a cero.