XIX.- La chica sombría y el chico serio II

“¡Y comenzamos! Yuu se convirtió en modelo.”

Gritaba Takashi por toda la escuela. Después de varios fallos y rechazos por fin alguien se interesó en tomarle fotos publicitarias para zapatos. También le ofrecieron posar como modelo de partes principalmente para joyas artesanales de una marca local. Evidentemente la paga no sería mucha pero necesitaba armar un portafolio y aspirar a una agencia famosa.

Sus padres accedieron solo si no olvidaba que el deber de un estudiante es estudiar, no trabajar.

Takashi parecía haber aceptado la ruptura con Kiniro quien ya estaba en brazos de un extranjero llamado Ryan Tseng. No tenía objeciones hasta que comenzó a salir con Suzume. No había razón para rechazarla pero noto que había sucesos extraños alrededor de ella principalmente en las citas.

Podían salir al cine, a comer, de paseo en bicicleta, al parque de diversiones, acuarios, zoológico, viajes cortos y otras cosas similares pero siempre mostraba una expresión extraña cuando la veía y le preguntaba si se divirtió.

Las expresiones faciales las encontraba extrañas. No sabía cómo definirlo era como si cambiará de personalidad. Comprobó muchas veces que era Suzume y estaba seguro de no confundirla con su gemela pero podría equivocarse.

Por su parte Yuu, estaba haciendo tareas en cada receso que no tenía tiempo para conocer a sus compañeros. A penas podía distinguirlos y no tenía ganas de conocer más personas. Después de su incursión en el modelaje, sus cosas comenzaron a desaparecer, lo seguían a su casa o las atrapaba tomándole fotos.

Lo encontraba bastante molesto y no querían que se interpusieran de ninguna manera en su vida privada.

— Hola, ¿Suzuhara? ¿Necesitas los apuntes de ayer?

— Ette, ¿quién eres? — pregunto al ver una chica con cabello largo

— Yourata Sumika...me siento allá atrás...— dijo nerviosa. — ¿te presto mis apuntes?

— No, lo siento. Debo irme ahora y no sé cuándo regrese a la escuela...— y salió.

En el salón todos la miraron como fue rechazada. Sumika apenada, regreso a su lugar intentando no llorar sin embargo Suzume se dio cuenta de todo. Su hermanita estaba enamorada de Yuu y la estaba forzando a salir con su mejor amigo.

— ¿Suzuhara? ¿Podemos ir al cine? — dijo una vez Suzume hablándole al espejo del baño en la escuela. — Podemos... ¿podemos...? ¡Diablos!

Se sentía frustrada. Nunca había sido difícil pero ahora porque sí.

Al terminar la jornada escolar salió junto a Takashi quien la llevaría a comer. El chico recibió una llamada de su amigo diciéndole que tuvo una emergencia familiar y no asistiría a la escuela lo que quedaba del mes. Suzume curiosa indagó un poco.

— A mi hermana le gusta Suzuhara...— dijo de la nada — quiere que vayamos a una cita doble con él...

— Eso será un problema...Yuu está siendo acosado y no le gusta salir...— respondió como si nada.

— Es tan triste...mi hermana tenía esa ilusión...— decía en voz baja — le gusta tanto que no se atreve a hablarle con naturalidad...

— Hmmm, veré que puedo hacer pero no te prometo nada. ¿Comemos?

— Si...— contesto. Así que el chico es acosado...interesante.

Suzume siguió intercambiando lugares con Sumika algunas veces hasta que Takashi decidió terminar con ella. Le parecía extraño su comportamiento.

El día en que rompieron, Suzume (Sumika) rompió en llanto. Yuu la consoló solo porque iba pasando por allí. Takashi estaba seguro de que Yuu aprovecharía para ligársela pero no pudo estar más equivocado.

Takashi no quería ver su error, creer que Suzume jugaba con él y con Yuu, pensaba que si eran gemelas podían cambiar de lugar pero los detalles tan precisos lo hacían dudar, nadie podría recordar con tanta precisión hasta las flores que adornaban la mesa.

Después de unos días Sumika le pidió una cita a Yuu quien la rechazo cortésmente. Diciéndole que se preparaba para un papel muy importante.

Su primera audición para una serie de 10 capítulos en un papel secundario. Eso lo emocionaba.

Suzume no entendía como Yuu las ignoraba. Sentía que debía ayudar a Sumika a salir con el chico que siempre quiso.

— ¿Suzuhara?

— ¿Si?— dijo levantando la vista. No estaba seguro de si ya había visto a tal persona o no.

— Vamos a un viaje al acuario... ¿sí?

— Lo siento, estoy ocupado...— respondió intentando rechazarla.

— Oh entiendo, solo que quería ir con mi hermana y su novio para que no se sintiera solos y nerviosos... pero si ya tienes planes que se le va a hacer...

— Hmmm... de acuerdo, vamos este sábado, ¿ok? Después estoy ocupado...

— Gracias...— y se alejó.

El día de la cita, Sumika se vistió como cualquier otro día para esperar al chico con el que Suzume se vería. Se sentía confiada de que lo haría caer a sus pies. Suzume mientras estaría en casa viendo televisión.