Sentí mis huesos temblar, mi respiración se agitó y clavé mis uñas en la piel de mi blanca piel; de pronto me sentí muy observada al pasar por esa vieja y espeluznante casa, y joder, hasta cualquiera sentiría ese miedo.
-...Keith...keith...¿a que le tienes tanto miedo?.-un susurro se hizo presente en mi oreja, sentí la atracción de la casa hacía mi, comencé a caminar hacía ella como si algo mágico me lo dice, mi mente no reacciona, mi cuerpo menos. No se lo que estoy sintiendo.-Ven conmigo...también flotarás...
-¡Hey!.-un grito me hace reaccionar, me di la vuelta y pude presenciar a la mismísima Beverly Marsh, si supiera que hace unos 44 minutos atrás hablábamos de ella.-¿Ibas a entrar allá dentro?.-me dice mientras se acerca hacía mi, la miré unos segundos y dejé escapar aire de mi boca, como si lo estuviera conteniendo hace mil años.
-Sí.-solo pude alticular, sentí miedo, mucho miedo, y no sabía el por que.
-¿Por qué?.-la miré con el ceño fruncido, ni yo misma lo sabía.-Oh perdona, no le digas a Gretta que me viste.-iba a seguir su camino, pero la paré con el brazo.
-No, ¿por que le diría? Gretta no es mi amiga.-le dije, ella miró hacía un punto fijo durante unos segundos para luego torcer los labios.
-¿Q-que? pero te juntas con ella..
-Que me junté con ella no significa que sea su amiga, además. Ya me cansé de ella, se lo dejé bien claro hace unos.-puse mi mano en mi barbilla y una sonrisa salió de mis labios.-50 minutos.-ella asiente mientras trata de calcular la información.
-Oh.-solo sale de sus rojos labios.
-Sí, tampoco es que me voy a poner a llorar.-dije mientras con mi dedo finjía que una lagrima falsa caía, una pequeña sonrisa adornó mi rostro y el de ella también.
-Tú nunca me trataste mal.-me dice mientras juega con el pequeño agujero de su pantalón, hice una mueca.
-No tenía razones. Solo molesto a gente que de verdad me molesta y-A la mente se me vino Richie, el no me molesta, pero algo en el me llama la atención.-Y eso.-dije sonriendo.
-Ya veo, me siento algo tonta.-admite mientras hace una mueca.-Quiero aclarar.-tartamudea.-Que todo lo que dicen de mi, es mentira.
-Lo sé.-le dije escogiéndome de hombros, ella asiente.-Bueno, Marsh, pasatela bien en tus vacaciones de verano.-iba a seguir mi camino pero ella me para.
-¿M-me acompañas a la farmacia?.-una pequeña sonrisa sale de mis labios.
-Ya que insistes.-ella también sonríe, y sin más, prendemos rumbo hacía la farmacia.
Editado: 09.10.2019