GUSTAVO Y CAMILA?
PARTE DOS
Samanta
Al llegar cerca del club y verlo sentí como mi corazón comenzó a saltar que me puse demasiado nerviosa, no soy de salir a fiestas porque me gusta quedarme en casa leyendo cualquier libro o comiendo. Aunque con los chicos estoy disfrutando demasiado el momento, pero en mi aún en mi cabeza navega la incógnita de preguntarle a él sobre Gustavo.
Alex me hace una seña con sus labios señalando hacia arriba y yo asiento con la cabeza nada más porque no entendí nada.
—¿Y son novios?, no me lo niegues porque llegaron tomados de la mano —Me preguntó Deiner.
—Eh, no somos “novios”
—¿Amantes?
—Menos…
—¿Entonces?
—Son eso que tienen una conexión imparable pero no están seguro de arriesgase o no —Dice Charlie.
—A penas están nadando entre aguas claras para llegar a las profundas porque es muy atento contigo en la forma en que te mira, los detalles y lo caballeroso que es contigo —Dijo Lianis—. Algo que jamás me pasara.
—Si te pasara lo único es que no estás conmigo —Respondió Deiner.
—Fuerte declaraciones
Todos comenzamos a reírnos hasta que comienza retumbar en toda la pista “Time of our life”
—¡Wey mi canción! —Grito Charlie.
—Vengan vamos a la pista —Animo Rosa levantándose de su asiento mientras que los chicos hacían lo mismo.
—Vamos Sam… —Lianis alza su mano.
—No te preocupes, vayan ustedes yo me quedo acá.
—¿Segura?
—Si, anda.
—Vale te todas maneras estaremos pendiente de ti.
Suelto una pequeña risita mientras le daba un sorbo a mi fresco y desde donde estoy los veo bailando, algunos viéndose los pulmones «Besándose de una forma que no es decente» pero al final la música esta movida.
—¿Por qué no fuiste con tus amigos? —Su voz me saca de mis pensamientos cuando volteo a verlo.
—No tenía ganas…
—¿En serio?
—Si
—¿Estás bien?, ¿Quieres ir a otro lugar?, te veo muy ida.
—Estoy bien no te preocupes hay instante que me siento así, pero nada del otro mundo.
—Cualquier cosa me dices.
—Ajá.
Luego el ambiente musical se tornó diferente al escucharse esa famosa bachata que todo el mundo conoce.
—¿Quieres bailar conmigo? —Ofrece su mano.
—Si
Nos acercamos a la pista tomándome de la cintura pegarme a su cuerpo mientras apoyo mi brazo en su nuca y con la otra entrelazamos nuestras manos para comenzar a bailar. Sus pasos son casi profesionales sin perderle el ritmo a la música, inesperadamente me da una vuelta cuando me toma del brazo hasta que nuestros rostros se encontraron cerca pero tan cerca que se podían apreciar nuestras respiraciones.
—Y si eres gorda, flaca todo eso no me importa a mí y tampoco soy perfecto sólo sé que yo te quiero así y el corazón no tiene cara, y te prometo que lo nuestro nunca va terminar. Y el amor vive en el alma ni con deseos nada de ti va cambiar —Poso sus dedos en mi mentón para mirarlo fijamente sin perder el ritmo de nuestros pasos—. Cada letra y melodía de esta canción te la dedico —Me susurra.
──── ∗ ⋅◈⋅ ∗ ────
Después de bailar con Alex me invito a caminar por la playa cerca de unas rocas ya que el tiempo había pasado rápido porque los chicos estaban borrachos y nos sentamos en la arena observando el hermoso reflejo de la luna en el mar. Observo como el viento golpea su rostro dejando esos pequeños mechones en su cara decido en acercarme para alzarme un poco y apartárselos.
A su lado me dado cuenta que entre más perfectos luzcamos por fuera más demonios tenemos dentro.
—Puedes preguntar —Dijo él.
—¿Qué? —Vuelvo a sentarme su lado.
—Sam, comencé a darme cuenta que si juegas con tus manos estas nerviosa y cuando tu mirada se encuentra perdida es que quieres preguntarme algo, pero no sabes cómo hacerlo.
—¿Desde cuándo conoces a Gustavo?
—Gustavo era un amigo cercano a mi hermano al principio comenzó animarnos a las peleas para pagar nuestras deudas lo tomamos enserio y comenzamos a pelear por mamá. Se convirtió en nuestro “manager” por así decirlo en ese entonces aún no sabíamos de la existencia de Camila hasta que una tarde apareció en el gimnasio con una tarta de verduras, él nos la presento y comenzamos a salir los cuatros luego de unas semanas yo me encontraba limpiando el camerino entonces llegó ella distinta, cuando tuve un descanso me confeso que Gustavo empezó a cambiar de personalidad estaba obsesionado y al tener mi siguiente pelea invertir dinero en ella, conseguí pasaportes, una identidad nueva junto un hogar seguro gracias a un conocido —Suelta un suspiro hondo para hacer una pausa que se podía escuchar el sonido de las palmeras por el viento—. Ella nunca llego al aeropuerto y nuestra pelea fue suspendida, no recuerdo el motivo, pero eso hizo que volviéramos a casa quiero estar más seguro que ella se le olvido algo y lo fue buscar…
—Alexander sino puedes contarlo no lo hagas… —Susurre acariciando sus nudillos.
—Ella nunca se suicido fue él que la asesino, pelearon tan fuerte y recuerdo su última llamada que se encontraba encerrada en el baño no dude en tomar mi motocicleta para salir disparado a su casa… Cuando llegue era tarde ya estaba la ambulancia junto una patrulla.
—Él me dijo cantidades de veces que se suicidó por culpa de Damon ¿Entonces que tiene que ver él en esto?
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Editado: 19.09.2022