Recomendación:Nunca dejar la puerta de tu depa abierta.

        M e alisté para las clases de la tarde. Agarré un spray anti-violadores(quién sabe que podría hacer esa fea) Y me peiné. Me miré al espejo. No soy fea, pero yo creo que no soy linda. Soy alta, más o menos 1.70, tengo el pelo rubio como en la entrada, ojos azles con gris y...tengo una buena figura. No necesito pasarme un bisturí por todo el cuerpo para tener lo necesario. 

   Como sea, solo espero que la venganza de la fea haya terminado. Sino, esto podría ponerse feo, muy feo. Podría ponerme a golpear a la fea, o directamnete podría usar mi mejor arma. Las palabras. Puedo herir como una bala en la cabeza con las palabras. Ahh, era re Harry Potter, Cruxio!! Nah, solo que siempre hiero a las personas dicíendoles cosas feas. Buenoa, la clase que tengo es con una profesora. Solo espero que le caiga bien. lo último que necesito es que una profesora se encarge de humillarme. 

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-Hola, chicos

-ksniewjodajnoewnfre

-Dije hola chicos.

-NISNFINEINV

-HOLA, MALDITOS DESGRACIADOS QUE NO ME DEJAN DORMIR EN LAS NOCHES POR EL DOLOR DE CABEZA QUE ME DAN. 

  Todos se callan.  Y yo digo:

-Perdón, profesora. Buenas tardes, cómo le va? 

-Alguien minimamente educado acá. Bien, supongo que todos saben que esta el la clase de literatura, no? Acá vienen a estudiar, no a ponerse a follar en los últimos asientos.

    Alguien de fondo grita:

-Necesitas que te follen a tí, vieja bruja!

-Quién fue? Quién ha sido?

-Fue ella, profesora. La que se disciulpó.

  La profesora me miró.

-Me toman por tonta? Fue un hombre el que gritó.

-No, profesora. Yo me hago cargo de esto. Bájeme la nota a mí. Tomo la culpa.

   La profesora me mira. Otra vez. Y pronuncia:

-Alexander, te has ganado 10 puntos de esta clase.

   Yo me sorprendo y me sonrojo. Bajo la vista y me tiran algo por detrás. Una nota. Esta dice

Hola, aborto fallido de macaco. Te aconsejo que te cuides, y uses la pastilla. Porque ellos no se van a poner condón.

Yo sonrío. Pobres aquellos que me intenten violar. 

    Llegué a mi depa, pero me di cuenta que la pelotita de papel que había dejado no estaba. Alguien entró a mi depa. Estarán Lisa y Mik bien? Saco la daga de mi bolsillo, la escondo bien y entro cantando. Todo estaba oscuro. Y de repente, recuerdo que a la mañana no cerré la puerta con llave. Me reprendo mentalmente. Y luego, sombras se avalanzan sobre mí.