– Nat, no me puedo aguantar más.
– Blake quedamos en algo.
– Tengo muchas ganas.
– Esta bien, hagámoslo. – Blake corrió al baño y cerro enseguida la puerta, creo que un segundo más curando su herida y se hubiera echó del baño en mi cama, y el tendría que lavar las sabanas.
– Me siento libre. – alzo sus musculosos brazos para hacer énfasis en la oración.
– Bien, ahora vuelve a sentarte aún no término de curar tu herida. – enseguida se hizo para atrás.
– No, no, ni en sueños me vas a poner otra vez esa cosa. – parecía un niño pequeño.
– Blake son ordenes del doctor, tengo que hacerlo para que no se infecte y revisar si no se abrieron los puntos.
– No, no quiero. – se encerró dentro del baño.
– ¡Blake no voy a dejar que duermas conmigo sin playera! – grite para que pudiera escucharme.
– Un día al año no hace daño. – contesto del otro lado de la puerta del baño.
– No me obligues a tomar medidas drásticas Muchachote.
– No te tengo miedo. – se escucho como puso seguro a la puerta.
Bien el lo quiso así, salí de mi cuarto cerrando con llave la puerta para que no pueda salir, y fui caminando hasta la sala, ahí estaban todos, y cuando digo todos es todos, Alex, Jhon, Yess, Máx, Vane, Oscar y hasta mi mamá, quién por las noticias y mi aparición en ellas la preocuparon, si el "atentado" en la escuela salió en las noticias, y mi llanto al ver a Blake tirado desangrándose y llevándolo con los chicos hasta mi auto fue parte también del programa, el cual mi mamá vio, y vino hasta aquí para ver que Oscar, Vane y yo estuviéramos bien, pero lo que no contaba mi propia madre era en que Blake estuviera aquí, no lo iba a dejar solo en su apartamento y yo no quería estar lejos de mi hermano, así que en cuanto el doctor preguntó, quien se iba a hacer cargo de sus cuidados de inmediato levanté la mano, y me explicó todo, así que Blake no tuvo de otra que mudarse temporalmente a mi departamento, y eso conllevo a que todos nuestros amigos lo hicieran igual, pero la más desafortunada fue mi mamá, ya que nos encontró en una situación un tanto comprometedora, Blake y yo lo estábamos haciendo en el sofá, si, si, ya se, pero el esta herido, les explicó, cuando piensas que puedes perder a la persona que más amas, y después lo tienes enfrente de ti sin playera y con una inmensa necesidad de besarlo, pues ocurre que tu madre entra por la puerta con tu hermano y mejor amiga encontrándote en pleno acto lo único bueno fue que mi mamá nos lanzo condones y lo tomo un tanto bien, claro ayer nos dio una plática de como debemos protegernos y los riesgos, lo admito fue muy vergonzoso.
Regresando al tema, haré que Máx, Alex, Jhon y Oscar me ayuden a sacar a Blake del baño para poderlo terminar de curar.
– ¿Ya acabaron? – Jhon habló con doble sentido, lo cual ocasiono que Oscar y Máx le dieran un zape.
– Que salvajes. – se quejo sobándose la parte afectada.
– Querida ya está la comida, dile al bombón que se apure. – ¿hace falta recordar que Vane le dijo el apodo de Blake? No, bueno.
– Necesito que me ayuden Blake se encerró en el baño y no me dejó terminar de curar sus heridas. – Máx sonrió feliz en cuanto escuchó eso.
– Yo lo sacó. – Máx intento levantarse pero Oscar lo detuvo.
– Tu no lo vas a sacar, lo vas a querer golpear y no voy a dejar que hagas eso. – todos nos quedamos con la boca abierta sin creer lo que estábamos presenciando, ¿Oscar defendiendo a Blake? se va a acabar el mundo.
– Hey, tienes que quedar bien con el hermano mayor de tu novia. – Máx reprocho.
– A mi no me metan en sus peleas. – mi amiga se defendió.
– Bueno ya, ¿me van a ayudar a sacar a Blake de ahí dentro para poder comer? – Alex y Jhon se levantaron de su asiento al escuchar mi petición.
– Pero sin nada de golpes, o los golpeare yo. – advertí para todo el mundo, en especial para Máx.
– Huy que miedo. – Alex se burlo.
– Tu le quitas lo divertido a la vida mujer. – se quejo Máx.