Capítulo 11.-

Olivia

Esperaba el golpe en mi brazo, ya no estaría partido en dos sino en cuatro o en seis, ¡Porque me pasa esto a mí!

― ¿Se divierten sin mí?― Abrí los ojos al escuchar una extraña voz.

―¡Suéltame idiota!― gritaba Amber, voltee rápido y un chico que nunca había visto la tenía del brazo ― ¡¿Quién te crees que eres idiota?!―Se zafó de su agarre.—No sabes con quién te metes, le diré a mi padre y créeme que te expulsara— salió del salón haciendo berrinche.

―Soy Max ― Sonrió y condujo su mirada hacia mí―Me encanta ver presas atrapadas en el bosque... pero esto es demasiado injusto así que ustedes dos ¡Suéltenla!, ― las secuaces de Amber me soltaron sin reprochar.

―¿Y tú eres? ―Hable confundida mientras me incorporaba.

― Soy Max no escuchaste, ¿porque siempre tengo que repetirlo? ― dio dos pasos atrás y se sentó en una butaca ― ahora si pueden seguir en lo que estaban chicas.― ¡Hey tú, tráeme unas palomitas de la tiendita!―Le gritó a un compañero el cual obedeció sin replicar. ¿Quién se cree?, tiene algo muy familiar como si lo conociera de algún lugar, pero donde...― Hey tú, la del yeso, bonito maquillaje― se levantó y se acercó a mí― creo que exageraste con el rojo― toco mi labio manchándose de sangre que no me había dado cuenta que salía.

―Max― hablo Liam muy serio, en la puerta del salón.

― Liam― todos los observábamos confundidos.

―¿Qué haces aquí?― Se acercó a él.

―Aquí estudiaré... hermanito...— ¿hermanito?

―¿De qué hablas? Ni lo pienses y lárgate.

—Mi padre ya pagó la inscripción, vamos Liam — golpeó su hombro— relájate, será lindo venir a la escuela juntos— comenzó a reír.

―Liam mi amor— Amber regreso al salón— mira lo que me hizo esa maldita ― Lloriqueo mostrándole unos cuantos rasguños en su mejilla y el poso su mirada en mí durante unos segundos, parecía molesto
.

―No me interesa Amber― contestó con cara de fastidio que no estaba segura si era por Amber, o por su supuesto hermano que acababa de llegar.

―¡Viene la maestra!―Grito un compañero desde la puerta y todos comenzaron a acomodarse en su lugar, yo caminé deprisa hasta la puerta tapándome la cara

―¡Hey Olivia! ¿A dónde vas?―Gritó la maestra.

―¡Tengo una emergencia en el baño! ― Corrí hasta el baño sin dejar que me dijera algo o que me viera, entre al baño y me recargue en la pared un momento, me miré en el espejo y limpié la sangre que salía de mi labio.

― ¡MALDITA AMBER!, no puedo creer que no le partí la cara― Solté mi cabello para tratar de volverlo a acomodar ―¡Si tan solo no tuviera este maldito yeso!―peinaba mi cabello una y otra vez, pero era en vano así que arroje la liga elástica frustrada ― ¡Maldición!― y me puse hacer lo que mejor sabía... Llorar, realmente me veía patética lloriqueando en el baño, pero mi frustración había llegado al límite, sabía muy bien que después de esto estaría metida en problemas simplemente porque es hija del coordinador lo más seguro es que me reporte y me suspendan. Limpie mis lágrimas y me lave la cara, respire profundo y salí del baño para dirigirme a clases de nuevo. Llegue al salón y la maestra me permitió entrar, Ruth me preguntó si estaba bien solo con señas yo asentí me fui a mi lugar.

―¿Estás bien? ― Pregunto Liam un poco avergonzado, ya le habían contado que todo el problema que armó Amber fue por él.

― De maravilla como siempre ― respondí seria, con la mirada en él pisaron.

—Ahora vuelvo muchachos, voy por el proyector— hablo la maestra y salió del salón.

― ¿Tú debes de ser Olivia? ― volteé y estaba Max parado junto a Liam.

―No, por el momento no se encuentra, pero si necesitas algo urgente puedo pasarle el recado ― Respondí y recosté mi cabeza en la mesa ― ahora mismo no está disponible, favor de dejar su mensaje después del tono ¡Biip! ― Se quedó en silencio.

― Disculpa…

―¡Biip! Se acabó el tiempo, para dejar otro mensaje llamé en 1400 años― Lo interrumpí.

― Olivia él es Max... es mi hermano― dijo Liam aguantando la risa.

―Mucho gusto señorita― extendió su mano y lo ignoré — tienes... algo rojo en la mejilla, un poco hinchado— comenzó a reír— yo te salvé, merezco por lo menos un Gracias.

― No me interesa, no pedí tu ayuda y tú — mire a Liam—no me hables más ―estaba molesta, porque me pegaron por su culpa, yo no soy una roba novios, aparte como puede llamar novio a alguien que solo le sirve de juguete sexual.

― ¿Cómo que no te hable? ― Dijo confundido.

―¡Mira!— voltee molesta y me acerque a su cara haciéndolo sorprenderse ― Tu linda noviecita me golpeó por tu culpa— puse mi dedo en su pecho y comencé a empujarlo con él― porque según ella soy una quita novios y no permitiré que por un chico que apenas conozco me hagan esto ¡Escuchaste!― Todos los compañeros voltearon a verme.― Y tu maldita loca, ― mire a Amber quien se hacía la sorda, ―cuídate al salir porque estás ¡Muerta!

― Olivia is back― Dijo Ken riendo con cara de entusiasmo.

—Haber chicos espero estén preparados— entro la maestra al salón con el proyector en las manos—¿Que pasa aquí? — dijo al ver mi cara de odio a todos, pero nadie le dijo nada— Vamos a empezar, Liam y Olivia, es su turno― nos señaló― pasen al frente ―Nos levantamos de nuestros lugares yo aún molesta, tome de la mochila la carpeta y la novela y se la entregue a Liam, él tenía que hablar, yo odio hablar en público, siempre pasa algo conmigo, me da un tic nervioso, normalmente vómito, me desmallo o salgo corriendo
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― Hola, compañeros a nosotros nos tocó Romeo y Julieta y...― dio un gran suspiro― Olivia nos hablara y explicara un poco sobre ella ― volteé a mirarlo rápidamente achicando los ojos y él solo sonreía ¡Maldito! Le dije que no quería hablar.

―Liam — le susurre y él solo me miró para que continuara con la exposición— Este... yo...―tartamudee mis manos comenzaron a sudar, tome un respiro profundo y comencé a hablar―Bueno Cuenta la historia de dos jóvenes enamorados que...― suspire, vamos Olivia ya comenzaste a hablar ahora ¡sigue! ― a pesar de la oposición de sus familias que eran rivales entre sí, deciden luchar por su amor hasta el punto de casarse de forma clandestina para poder vivir su amor, pero la presión de esa rivalidad y una serie de fatalidades conducen al suicidio de los dos amantes.