Ha pasado una semana desde que mi tío se fue a Shanghái, mi amiga Isabella no ha regresado a los Estados Unidos y tampoco ha estado aquí conmigo, me siento sola, Lina está la mayoría del tiempo en el hospital ella está muy comprometida con su trabajo de enfermera, y los muchachos tampoco han estado aquí, en especial me duele que Adel esté tan aislado de mí, ya que las pocas veces que lo he visto hablamos muy poco.
Todos aquí han estado extraños conmigo, y eso me tiene un poco triste, pero me toca tragarme mis lágrimas y ser fuerte por el bien de mi embarazo.
Esta semana he tratado de enfocarme en leer este libro: nueve meses de espera, ahora sé que debo empezar a ir al ginecólogo y tener un control, estoy esperando la visita de mi tío para que me ayude a buscar un buen médico para mí y mi bebé aquí en Pekín, por lo menos para tener el primer control de mi embarazo.
Anhelo que Alam llegue para irme de este país. Lo pensé bien y he decidido regresar a los Estados Unidos, no quiero que mi bebé nazca aquí, el recuerdo de mi madre, me atormenta día y noche, el no saber si está viva o muerta, o el no saber por qué desapareció mi detective, todos esos pensamientos me torturan, así que espero y Alam me apoye.
En Estados Unidos mi trabajo es una distracción, quiero irme después de ver a un doctor, y que él me dé la autorización para viajar porque no quiero comprometer la vida de mi criaturita.
—Jazmín, tu tío te dejó esto, alístate, él te pasa buscando dentro de dos horas. —Jamir entra a la habitación y me muestra un paquete.
—¿Por qué no me avisaste que él había llegado? —Le pregunto un poco irritada a Jamir, no entiendo por qué mi tío se iría sin saludarme.
—No sé, él dejó la bolsa y se fue. —Responde Jamir sin expresión alguna, algo muy común en él.
—Gracias Jamir, tú estás muy bien arreglado, ¿vas a salir a algún lado?
—Sí, ¿no te molesta quedarte sola? —Indaga el mientras me levanto y tomo el paquete en sus manos.
—¿Sola? ¿Es que acaso Heydar tampoco está?
—No, él salió con la rubia y Adel está, bueno… — Jamir se queda en silencio y al ver mi mirada traga saliva.
—Estoy segura de que todos ustedes me están ocultando algo. —Digo molesta lanzando el paquete a la cama.
—No pienses eso, bueno, —se vuelve a quedar en silencio, así que yo le volteo mis ojos y él sonríe—. Tranquila, hoy te vas a enterar de todo y perdónanos por estar tan ausentes. —Dice él acercándose a mí tomándome por los hombros y dándome un beso en la frente, algo que me toma desprevenida, ya que él no es de esa clase de personas, Jamir no es afectuoso con nadie.
—Mientras no se metan en problemas, acuérdense que todos ustedes están ilegales en este país. —Hablo mirando los ojos del joven en frente, estoy preocupada por ellos, están sin papeles y aun así van para donde ellos quieren.
—Me tengo que ir. —Dice él apartándose de mi lado y saliendo de mi habitación a las carreras.
Estoy muy confundida, ellos antes no querían despegarse de mi lado, sin embargo, desde que todos saben que estoy embarazada no se la pasan aquí, no me dirigen la palabra, y sin contar que mi amiga se la pasa ausente, según ella venía a visitarme ahora se la pasa con Heydar, en no sé donde, a la señora Lina la entiendo, pero qué tanto pueden hacer unos jóvenes que ni conocen a este país.
------Narra Jia------
Jun que bueno que llegaste, ya todos estamos listo, Jamir y Adel van a proteger la entrada del restaurante, Heydar va a estar junto a Isabella en una de las mesas del restaurante haciéndose pasar por una pareja, ellos van a estar pendiente de cualquier movimiento y a la vez deben evitar que Jazmín los vea, y tú debes llevarla y salir del restaurante inmediatamente.
—Jajaja, Jia hermanita, tú estás algo paranoica con esto, ¿acaso a Jazmín la están persiguiendo? —Pregunta mi hermano con burla, al verlo así me hierve la sangre, así que decido contarle todo pero en resumen.
—Jun, mi hija si está en peligro, ella en Afganistán hirió a un militar y él está vivo y según mis informantes ese hombre está aquí en China.
—Jajaja, ahora sí que estás loca hermanita, Jazmín no lastimaría ni a una mosca. —Habla mi hermano muerto de la risa, pero al ver la cara de todos en la furgoneta endereza su postura y nos ve a todos pidiendo una explicación.
—Fue en defensa propia, y no me llames loca odio que me llamen así.
—Está bien, entonces si es cierto lo que tú dices, no es mejor que tú vallas a la casa de doña Lina y te reencuentres allí con tu hija, ¿por qué si ella está en peligro, la citas a ese restaurante?
—Ella va a ser mi carnada para acabar con ese hombre. —Digo sin rodeos.
—Y dices no estar loca, tú estás utilizando a tu hija para encontrar al hombre ese, no estoy de acuerdo, si a Jazmín le pasa algo va a hacer tu culpa.
—Tranquilo, tengo todo bajo control, yo he hecho esto por más de 10 años y con la ayuda de estos muchachos vamos a acabar con ese hombre, pero antes de matarlo hay que averiguar quién le ordenó a James y a ese tal Harry matar a mi niña.
—¿James, que tiene que ver él en esto?, ya bastante daño le hizo a mi niña en el pasado y todavía sigue empeñado en destruir su vida.
—Señor Jun, ese hombre ya está muerto, Alam el hijo de doña Lina lo asesinó —Interviene Heydar.
—Oh, Dios mío, eso yo no lo sabía.
—Señor Jun, ese hombre secuestró a Jazmín en Afganistán, es una historia muy larga, pero lo importante es que él ya no va a causarle más dolor a Jazmín.
—¿Qué le hizo ese hombre a Jazmín? —Pregunta Adel, el más joven y tierno de todos.
—Adel, ese hombre abusó de ella en el pasado y también quiso acabar con la vida de ella. —Le contesta mi hermano ya con lágrimas, después de tanto burlarse de mí ahora está llorando y asustado.
—Y lo que tú, hermano, no sabes, es que él fue el causante de la muerte de Andrés. —Le informo con la mirada en las pantallas, de aquí puedo ver la casa de Lina en todos los ángulos y en todo momento.
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lucha por sobrevivir, infancia dificil, conoceras el verdadero amor.
Editado: 31.10.2024