Esa mañana estaba en mi casa sentada, revisando mi móvil viendo como costumbre mis redes sociales, me llega una notificación en mi bandeja de chat, reviso el mensaje es una persona desconocida saludándome, en mi vida lo había visto, busco su perfil no me parece tan interesante cierro el perfil y el chat dejándolo en visto, de repente el desconocido me vuelve a escribir, se me hizo extraño y reviso el mensaje
Desconocido: hola, vi tus fotos me pareciste muy interesante y más tu sonrisa.
Quede extraña con ese mensaje, no sabía si responder por mi mente paso debe ser un intenso, pero me dio curiosidad saludarlo.
Pariss: Hola, jajajja muchas gracias,
Desconocido: cómo vas, vives en España.
Pariss: muy bien, si claro pero ahora me encuentro en Canadá la otra semana ya estoy de vuelta.
La conversación se fue alargando contándonos ambos de nuestra vida.
Los días pasaban y todos los días hablábamos y nos íbamos contando más cosas, hasta que llego ese día donde el desconocido me pidió que nos conociéramos en personas.
La verdad no sabía si hacerlo tenía miedo que no sea lo que esperaba porque ya me llamaba la atención esta persona misteriosa, pero le di esperanzas que pronto nos íbamos a ver.
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Editado: 25.09.2019