Ya ha pasado un mes, puedo llegar a decir que un mes muy duro en mi vida, se supone que el tiempo arregla las cosas, sana y da comprensión de los acontecimientos, pero mi tiempo se detuvo y eso no pasó. Cada día es más complicado ponerme en pie, me baño solo lo necesario, hace varios días que me da pereza bañarme el cabello, no le encuentro sentido a lucir bonita, no le presto atención a los sucesos felices, me siento sola, y mi mecanismo de defensa es pelear, pelear con el ser que me acompaña todos los días. Resulta que si no lo siento lo "suficientemente" cerca me lleno de rabia, siento que por mi tristeza ya no me quiere igual, siento que busca estar con sus amigos día y noche para pasar de mí, mí tristeza, mi oscuridad, mi aura lo fastidia, y bueno ¿a quién no?.
Siento que él siguió con y como los demás, me dejo sola, me aferro a ´él como quizá no pude aferrarme a Copito, lo culpo por no darme el amor que ahora mismo creo necesitar, quiero que solo este conmigo y solos sin nadie rodeandonos, si no me dice que me ama, me lastima, me lastima que no busque verme sonreír, pienso que pasé a un segundo plano porque claro si fuera la "amiga" que se sintiera triste, gastaría dinero y tiempo para verla feliz, pero como es su esposa la que siempre ha estado a su lado en las buenas y en la malas, no lo merezco. Empiezo a sentir celos, empiezo a dudar del amor que siente por mí, la importancia de nuestra relación, hay días que lo veo tan cercano pero tan ausente en mi realidad. Siento que esta fastidiado, cada día me mira menos, me habla menos, ni me llama, ya no le importo, le importan más su amiga, sus amigos, ¿será solo amistad? pienso repetidas veces, él no lo nota pero pido a gritos silenciados que me diga que esta a mi lado y lo estará en las buenas y malas.
La relación va de mal en peor, mi autoestima igual, mis inseguridades salen a flote y él sencillamente no puede con tanto, lo siento, busca cualquier pretexto para salir de casa, con o sin mi. Le cocinan por fuera, le parece exquisito, lo de casa es rico, llega cansado no habla, no pregunta nada de mi vida, o quizá lo estrictamente necesario. Cada día es más dificil esperarlo con una sonrisa, son predecibles sus ausencias, no sé como manejarlo, no quiero que nadie sepa que me siento mal, me siento desubicada, no quiero nada, ni conmigo misma, pero a la misma vez quiero recibir todo de él su atención, la necesidad de comprensión me invade.
Mis conocimientos en medicina me llevan a pensar que quizá este en depresión, mi rutina ha cambiado por completo, no me apetese nada, mucho menos lo que antes me atraía, los días son mejores si me quedo en casa, si no veo a nadie, si nadie nos visita, nadie nos invita a nada, y mucho más si mi esposo no quiere visitar a sus amigos. Esos días son menos cada día, debo trabajar, estudiar, socializar y sonreír, siempre sonreír.
Empiezo a buscar ayuda, necesito ayuda lo sé, pero no sé que psicologo me puede ayudar, pienso en que quizá no haría falta, alguien muere y la vida sigue, el mundo sigue, total ya no soy yo, todo se esta dañando, ¿por qué no terminar de dañar todo de una forma más rápida?, le pregunto a ese Dios que dice existir ¿por qué estoy pensando así? ¿acasó no tengo razón de todo lo que siento, de exigirle y seder toda la responsabilidad a una sola persona?.
Ayuda.