AL DIA SIGIENTE:
Estoy en el bosque pero no reconozco este bosque no sé dónde está, estoy sola y descalza, pero ¿Qué diablos hago aquí? Tengo que salir cuanto antes. Espera hay alguien, es una mujer pero no la reconozco… espera su cara se me hace conocida…nop me equivoque jamás la eh visto, ¿Qué rayos dice?, pregunto mientras me acerco a ella.
Tienes que despertar…
¿Qué?
Ya es hora…
¿De qué?
Es tu destino…
¿Pero de qué?
Tienes que despertar…ya es hora… es tu destino…tienes que irte…
¿Qué diablos? ¿Hora de qué? ¿Mi destino? ¿Adonde? ¿Por qué? Hay esto no me está gustando, sabe señora no quiero saber nada.
Entonces despierta…si no quieres verlo… pero recuerda lo que te diré, no siempre podrás evitar este encuentro… solo espero que cuando estés lista no sea demasiado tarde… no puedes escapar de tu destino, si no vez lo que debes no estarás lista para lo que se aproxima, recuerda algo grande se viene… es hora de irte.
Desperté muy agitada, desde hace meses tengo estos extraños sueños, siempre estoy en ese bosque, pero es la primera vez que esa mujer se muestra, siempre escuche su voz que parecía que venía de las sombras, pero cada vez dice cosas diferentes pero lo de hoy, eso me dejo pensando… sigo pensando en lo que ocurrido hasta que me percato que ha amanecido, me baño y voy a la cocina, ya mi padre y Emett están en la cocina así que me apuro y les hago el desayuno, les sirvo y empezamos a desayunar, terminamos y ellos se van a trabajar hoy es sábado por lo cual no tengo clases, dentro de unas horas toca irme a la cafetería…ahora que lo recuerdo ayer cuando regresaba de la cafetería me encontré a un lobo malherido, y como siempre llevo un botiquín de primeros auxilios, pues soy muy despistada y con cualquier cosa me lastimo y ni cuenta me doy, él tenía una daga y una bala incrustadas en una de sus patas delanteras, le retire la daga primero y luego la bala ya que no estaba muy incrustada, cure la herida y vende su pata, una mujer se me acerco y me gruño, creo que era la dueña del gran lobo, así que me aleje, espera…¿Qué rayos dije? ¿Me gruño? Esa señora sí que es extraña, bueno ahora que lo pienso quien tendría a un lobo tan grande como mascota, dejo de discutir conmigo misma y subo a mi recamara para terminar los trabajos que tengo pendientes de la escuela.
JHONNY EMETT…
Mi nombre es Jhonny Emett, tengo 19 años y estoy en la universidad, vivo con mi padre y mi hermanita ella es muy dulce, demasiado a mi parecer, yo soy algo reservado, por lo cual no me gustan las muestras afectivas, y no dejo que me diga hermano, prefiero que me llame por mi nombre, sé que si se enteran que es mi hermana le harán daño, por eso papá y yo jamás le hemos dicho lo que somos ni a ella ni a mi madre, a pesar de no ser mi madre biológica la quiero y aprecio mucho, ella murió cuando yo tenía 9 años y me hizo prometer que cuidaría de esa pequeña niña, mi pequeña El… me levanto de mi cama y voy a darme una ducha, termino y bajo a la cocina, me encuentro con mi padre hay.
-¿Cómo amaneciste?- le pregunto a mi padre.
-Bien ¿y tú?-
-Bien-
-Tenemos que proteger a Mary- dice papá, lo cual me alerta.
-¿Qué pasa?-
-Últimamente están sucediendo muchas muertes, incluso hay algunos Rogues rondando la zona-
Lo último que dice mi padre me deja inquieto, estoy por preguntar más cuando El aparece en mi campo de visión, lo último que le digo a mi padre es:
-Hablaremos después- antes de que El llegue a donde estamos nosotros, ella se va directamente a la cocina y empieza a hacer el desayuno nos sirve y comemos, cuando terminamos ella se lleva los platos al lavavajillas, yo me voy al trabajo aunque no quiero dejarla sola, y menos después de lo que me dijo papá, El a veces me llama Vampirito, nadie sabe por qué, excepto yo.
FLASHBACK…
Era de noche, yo estaba un poco inquieto, intente que Ino se calmara pero fue en vano, de la nada escuche un ruido y un olor desagradable, como a muerto y entonces mi sistema se disparó, corrí a la recamara de Elsa, pero fue en vano ella no estaba, ese maldito Rogue se la llevo, no lo pensaría dos veces y tuve una transformación prematura, Ino quería matar a quien se atrevió a tocar a la pequeña El, Salí de casa y seguí su olor, lo encontré pero tenía a mi pequeña hermanita del cuello, ella lloraba desconsolada, y de repente él se percató de mi presencia.
-Vete niño si no quieres problemas-
-Suéltala- escupí furioso, el solo rio y le puso una navaja en la garganta a mi hermana, y eso fue lo que me hizo explotar en furia, en un rápido movimiento se la quite de las manos y la deje un poco alejada de donde estábamos, ya que golpearía a ese bastardo y no quería lastimarla en el proceso, me dirijo a él y lo golpeo, quería matarlo y lo habría hecho de no haber sido por esa pequeña niña de solo 5 años, El me pedía con lágrimas en los ojos que parara que quería regresar a casa. Desde ese día ella me bautizo como el Vampirito.
Fin del flashback…
Llego a la empresa, me encargo de llevar el correo correctamente y voy a la oficina del jefe.
En la oficina…
-Disculpe me podría comunicar con el señor Jhonn Hércules MC` All- le digo a la secretaria.
-Espere un momento por favor- contesta.
-Si claro- digo mientras observo como ella le marca a alguien.
-Disculpe- me dice la señorita.
-¿Que sucede?- respondo.
-¿Cuál es su nombre?-
-Ah claro, Jhonny Emett Mendoza- le respondo a la señorita, des pues de un rato me habla.
-Señor, puede pasar-
Entro a la oficina y me recibe mi gran amigo con un saludo de manos.
-A qué se debe tu visita amigo-
-Vengo a decirte que no voy a volver a trabajar- contesto.
-¿Por qué? ¿Qué paso?- pregunta el muy asustado.
-Lo que pasa es que las cosas se están poniendo feas, sabes que no me gusta dejar a El sola y hoy mi padre me dijo que hay Rogues rondando la zona, por eso me saldré de trabajar, para cuidar a El-
-Ok, está bien pensé que ya no querías trabajar conmigo- dice aliviado.
-Eso nunca sabes que eres un buen amigo, jefe y socio, pero por la situación en la que estamos necesito cuidar a mi hermanita-
-Valla, te sientes bien- pregunta mi amigo fingiendo preocupación.
-Sí, ¿Por qué?- pregunto un poco consternado por la forma en que lo dice.
-Por qué es la primera vez que le dices hermana-
-Si lose-
Y así duramos un rato más hablando de cosas triviales, después de un rato me despido y me regreso a la casa, son las 10:30 ella a las 12:00 se va a la cafetería, así que me da tiempo de llegar y llevarla a su trabajo. Tengo un mal presentimiento así que acelero el coche para llegar lo más rápido posible a casa.
Una vez que llego a la casa, me bajo del coche y escucho los gritos de El, corro a dentro de la casa y voy directo a su cuarto que es de donde provienen los gritos. Entro a la recamara de mi hermana y la sangre se me congela, la peor escena de mi vida está justo frente a mis ojos. No aguanto más y lo saco de encima de mi hermana y lo tiro al suelo, él se levanta y corre conmigo detrás de él. Lo alcanzo ya fuera de la casa y comienzo a golpearlo, quiero matarlo por atreverse a tocarla, a El nadie la toca, estoy más que dispuesto a matarlo cuando de pronto dos personas me agarran evitando que lo mate, el chico me agarra y la chica va y ayuda al bastardo que alguna vez llame “mi mejor amigo”
-No te vuelvas a acercar a esta casa y mucho menos a El, maldito hijo de puta- le solté al imbécil con toda la furia que tenía.
-Eso no lo decides tú- me contesta el muy infeliz- además bien que le gusto-
-Maldito bastardo, no te atrevas a tocarla otra vez, te lo advierto no sabes con quien te metes maldito malnacido- le amenazo.
El termina de levantarse-lo mismo digo, regresare y me echare otra vez a tu querida Elsa- voltea a donde esta ella y le avienta un beso, veo como ella lo ve con tanto terror en la mirada, e intento zafarme del agarre de este maldito Licántropo pero no tengo éxito- volveré por ti preciosa- dice mientras se va. Yo intento ir tras el pero el maldito pulgoso este no me suelta. Una vez que ya está lejos me suelta.
-¿Por qué? Eh ¿por qué no me dejaste ir y arrancarle la puta cabeza?- espeto furioso.
-Por qué estarías rompiendo el tratado que tenemos los humanos, Vampiros y Licántropos. Además no creo que a ella le guste que por su culpa te metan a la cárcel o te lleven a la orca- contesta el.
-Me vale una mierda ese puto tratado de la chingada, él fue el primero que falto a ese puto papel de paz, cuando se atrevió a tocar a mi hermana, ¡carajo!- estoy furioso, me siento muy mal por mi pequeña hermana, como pudo pasar semejante cosa, porque no me di cuenta antes.
Me dirijo a El y la abrazo.
-¿Desde hace cuánto tiempo ese hijo de puta te está haciendo esto?- le pregunto.
-El regresara y va a matarnos- me dice muy preocupada y desesperada.
-Contesta lo que te pregunte carajo- le grito, ella se aleja un poco de mí y me doy cuenta que sus ojos se han llenado nuevamente de lágrimas, es donde me doy cuenta de lo que eh hecho, a El no le gusta que le griten.
-Perdón, no debí gritarte- le digo un poco calmado- pero contéstame por favor desde cuando ese malparido hijo de puta te está haciendo esto- le pregunto aunque sé que no quiero saber la respuesta, no quiero saber desde hace cuánto no estoy cumpliendo la promesa que le hice a mamá.
-Hace 2 años- me dice aun con lágrimas en los ojos. No puedo contenerme y la abrazo, estoy cabreado, carajo me siento impotente, me siento la peor persona del planeta por Dios, desde hace 2 años mi pequeña está viviendo un infierno, no lo puedo creer soy un pésimo hermano.
-¿Por qué nunca me lo diste? ¿Por qué me lo ocultaste?- pregunto dolido.
-Él dijo que tu no me creerías si te decía, que le creerías siempre a él porque es tu mejor amigo, además me amenazó diciendo que si decía algo te aria daño a ti y a papá, y yo no quería que les hiciera daño a ustedes- dice un poco más tranquila.
-Pequeña, mi pequeña prometo que el jamás volverá a hacerte daño, te protegeré de lo que sea, de quien sea, como sea y al precio que sea, aun si tengo que dar mi vida a cabio de la tuya lo are, te protegeré al precio que sea, no sabes lo que daría por cambiar lo que paso-
-Pero no se puede- me dice ella y tiene toda la razón no puedo hacer nada más que esperar la hora de mi venganza y protegerla por sobre todas las cosas.
De la nada escuchamos un estruendo proveniente de la casa.
-Ustedes váyanse, nosotros nos aremos cargo de esto-
-¿Por qué hacen esto?- les pregunto.
-¿Por qué ella me salvo la vida una vez?- me contesta el chico.
Otro estruendo más fuerte que el anterior se escucha de la casa, no espero más y subo a El a mi espalda y salgo corriendo con ella a cuestas, ellos se quedan un poco atrás para cubrir nuestro escape.
-Protégela, mantenla con vida que aún no le agradezco lo que hizo por mí- dice el chico.
-Así lo are- le respondo.
De pronto escuche unos aullidos, ellos están llamando a su alpha, así que corro con mucha más fuerza al saber que ellos estarán bien, de repente me percato que dos lobas siberianas corren cada una a un costado de mí. El al ver mi desconcierto por la aparición de las lobas me responde.
-Están conmigo, las rescate hace unos años, estaban atrapadas en trampas así que las saque y las lleve a casa, las cure y cuando ya estaban recuperadas las traje de regreso al bosque, pero ellas no quisieron quedarse aquí en el bosque, así que decidí que ellas serian mis acompañantes en casa- mientras avanzamos ella me contaba la pequeña historia de las lobas así que me sentí un poco aliviado al saber que si yo llegaba a faltar El tendría quien la cuidara.
Llegue a la casa que tenemos en el bosque, entramos y le dije a El que fuera a darse un baño en lo que yo preparaba la comida. Terminando de comer nos pusimos a ver películas y así se nos fue la mayor parte del día, cuando de pronto sonó el teléfono de casa.
El se levantó a contestar, y de repente vi cómo se echaba al suelo echa un mar de lágrimas, intente preguntarle que sucedía pero no me contesto, así que me limite a consolarla, secar sus lágrimas que cada vez eran más y decirle que todo estaría bien. Que esta vez sí cumpliría mi promesa, después de un rato ella se quedó dormida, tal vez cansada de tanto llorar, me levante con ella en brazos y la lleve a su recamara, cuando la vi así tan frágil, tan indefensa, tan inocente, jure que nadie volvería a hacerle daño, nadie toca a El y se va sin sufrir las consecuencias, porque nadie se mete con mi familia y sale ileso, nadie, juro que todos pagaran por lo que nos han hecho, todos y cada uno de los que han osado lastimar a nuestra pequeña familia.
Es una promesa jurada con sangre.