Se que la orden que di me hará perder toda la confianza de Vastrozza, por eso decidí decirle, lo cual no tomó muy bien
—¿como te atreves dar una orden como esa a mis espaldas Taylor?— se veía muy molesto, pero mantuvo su distancia y caballerosidad
—señor Enzo, es por eso que le estoy notificando, no quiero que nuestra gran amistad se pierda, usted es uno de los pocos hombres con palabra que conozco en este negocio y no quiero perder eso—
—Taylor, ¿te das cuenta de la situación en la cual me pones?— miró a su alrededor —todas estas personas que ves aquí, en su gran mayoría son enemigos, pero este es el único lugar donde dejan de lado sus diferencias, se respetan y en el mejor de los casos surgen alianzas y tú has puesto en peligro todo eso— tomó de golpe su trago
—él se metió con mi familia Enzo y usted mejor que nadie sabe que eso es sagrado, es uno de los códigos más respetados y él faltó a eso... señor Vastrozza, usted pasó por algo igual a esto, cuando su primera esposa Elizabeth fue secuestrada por el cártel del pacífico y terminó matándola y yo no quiero pasar por lo mismo—
—no vuelvas a mencionarla, respeta su memoria— se acercó a mi —lo siento Taylor, pero no puedo poner en riesgo las vidas que han puesto sobre mis manos— se iba a marchar, pero lo detuve
—no le pido que se involucre, solo le pido que en cuanto escuche los disparos, ponga a salvo a sus invitados y ahora que tiene tiempo le explique de la mejor manera lo que está por suceder— le mire fijamente
—eres un petulante de mierda— se safo de mi agarre —voy hacer lo que me pides, solo, solo por el hecho de tratarse de la familia, pero nunca más te atrevas a ponerme en semejante encrucijada...espero que puedas lograr lo que te propones— se marchó y vi como iba deteniéndose a hablar con alguno de sus invitados, lo cual imagino es para informar sobre lo que pasará, luego localice con la mirada Matt, quien lucía relajado entre un grupo de amigos.
Estaba aterrado con la sola idea de pensar que Matt se diera cuenta de lo que planeaba al ver a Enzo acercarse al grupo, cuando iba a asomarme Enzo se fue del lugar y mi movil empezo a sonar —¿ya esta todo listo?— pregunte a Esteban
—sí señor, le llamo para decirle que en la puerta habrá uno de nuestros hombres con una capucha negra, el le dará su arma y otra cosa concerniente a Matt, ¿el plan es secuestrarlo?—
—sí Esteban, no importa si queda herido, pero no nos serviria de nada si resulta muerto—
—bien— colgué la llamada, fui al mini bar y pedí una trago doble de bourbon a la roca
—¿te puedo acompañar innamorato?— Arabella apareció en mi campo de visión, impidiendo que pudiera seguir viendo a Matt
—no Arabella, ahora no— me puse de pies y me fui dejando atrás el resto del trago y llame a Esteban —va hacia afuera— camine con rapidez hasta que llegue a la salida, pero se había espumado, ví al hombre con la capucha el cual me entregó el arma, le ordene que vaya por la derecha mientras yo iba por el otro camino
—¿en verdad pensaste que no me daría cuenta de lo que planeabas?— Matt salió de entre de un auto apuntando con su arma
—estás completamente rodeado Matt— sonrei mientras también le apuntaba —solo dime donde esta Marlene y juro que jamas volveras a saber de nosotros— este río a todo pulmón
—eso jamás Taylor y creeme que con esto acabas de perderla para siempre— realizó tres disparos hacia mí, uno de los cuales rozó mi hombro izquierdo, pero pude dispararle y herirlo en su pierna, pero aquellos disparos que él me hizo en verdad no fueron para herirme, fueron una señal para que sus hombres aparecieran en la escena, donde se produjo lo pedido: una lluvia de balas.
Escuchaba disparos por doquier, las personas corriendo y algunos de ellos realizando disparos, yo junto a Esteban y uno más de mis hombres estábamos persiguiendo a Matt, el cual iba en un auto a toda velocidad junto a dos de sus hombres, los cuales iban produciendo disparos
—¡DISPARENLE A LAS MALDITAS LLANTAS ANTES DE QUE ELLOS LO HAGAN!— les grite a mis hombre los cuales estaban respondiendo a los disparos. Centre la mirada hacia el frente, pero una de las balas enemiga atravesó el parabrisas rozando cerca de mi rostro
—¿ESTÁ BIEN SEÑOR?—
—SÍ ESTEBAN,ESTOY BIEN, CÉNTRATE EN HACER QUE ESE AUTO SE DETENGA— tuve que hacer algunos zigzag para evitar morir en medio de esta cruzada de balas, necesito poder atrapar a Matt y estar con Marlene, pero debido a la velocidad una de las llantas delanteras explotó, perdí el control y choque contra uno de esos grandes carteles que ponen en las carreteras, perdiendo asi la unica oportunidad de encontrarla y con ese pensamiento cerré mis ojos.
MARLENE
Deje de pensar en todo lo visto y lo vivido, de ahora en adelante no me atormentare pensando en si es verdad o mentira, me aferrare a vivir aunque aquello signifique quedar cautiva en las garras de Matt, porque solo tengo una cosa en claro: la vida de mi hijo es más importante que todo esto.
Me puse de pies, limpie mis lagrimas y fui directamente hasta el baño para retirar el maquillaje que tenía y ponerme una pijama cuando de pronto escuché un fuerte alboroto, salí del baño y me asomé a la puerta para ver si escuchaba con mayor claridad, pero nada, respire profundamente para así poder armarme de valor y bajar para saber qué estaba pasando.
Me quite las zapatillas para evitar el repiqueteo de estos y así no ser descubierta. Camine con sumo cuidado, baje las escaleras de igual modo y mi estómago se retorció ante la escena que veía:
Matt estaba acostado en uno de los muebles todo ensangrentado, mientras varios de sus hombres descansaban en el piso cubiertos de sangre, también habían algunas personas que debido a su agilidad presumi eran enfermeros o doctores, con las náuseas presentes y el miedo recorriendo mi sistema termine de bajar las escaleras y fui hasta Matt