Cásate conmigo

Capítulo 60

Al estar dentro del elevador me tardé unos minutos en llegar al último piso y sin interrupciones. Camino a pasos un tanto acelerados al ver que ya son las once con treinta y seis minutos. Lo que significa que solo quedan pocos minutos para llegar a la junta con los O’Neill. Al colocar la tarjeta en el marcador esta se abre de inmediato, por lo que entro y cierro detrás mirando a mi asistente y a mi novia sentadas en la mesa hablando y tomando un té sin percatarse de mi presencia.  

—¿Arreglando el mundo? — pregunto haciendo que ambas volteen la mirada un tanto asustadas. 

—No te oímos llegar — habla Sol mientras yo camino hacia ella. 

—Creo que será mejor que me vaya — murmura Emma por lo bajo. 

—Harry lo más seguro es que irá a tocar tu puerta. Le he dejado que haga él, el informe — le digo a Emma viendo su ceño fruncir tras escuchar mis palabras. 

—¿Y qué haré yo? — pregunta. Se supone que los informes los hago yo. Y Emma es quien me ayuda a hacerlos. Siempre es bueno tener una segunda opinión y más cuando tu asistente estudio sobre hotelería y turismo. 

—Ve que haga bien el trabajo — le digo viendo a Sol pararse y me fijo en su atuendo. Unos pantalones negros no tan ajustados, blusa blanca con diseño en el cuello y unos tacones color crema, hermosa como siempre. Veo a Emma aun sentada y ahora con cara de terror. 

—Señor por favor, si quiere déjeme ver todo el balance de los cuatro meses pero no me deje con él — Ruega Emma. 

Mi mirada vuelve a Sol al escucharla soltar una risa y de seguro por la cara de Emma. 

—Tocará doble trabajo si lo dejamos haciéndolo solo — le digo acercándome a Sol por detrás. 

—Está bien — dice con desgano. 

—¿Estas lista? — le pregunto a Sol rodeándola entre mis brazos por su cintura. Haciendo que de inmediato ella pegue un salto no sé si de susto o por mi cercanía.  

—S-Sí — tartamudeó haciendo que sonría. 

—Debemos irnos ya — murmuró dejando un cálido beso en su mejilla. Sintiendo una sonrisa asomar en sus labios. Me separo de Sol viéndola girar en mi dirección y efectivamente está sonriendo. Por lo que también lo hago. 

—Iré por mi bolso al cuarto y ya — dice desviando ahora su mirada hacia Emma quien nos mira sonriente. 

Sol desaparece de mi vista al ir hacia el pasillo que lleva a nuestra habitación por lo que centró mi mirada en Emma. 

—¿Cómo es que nunca la había visto en la empresa? — pregunta intrigada mientras se acomoda en el asiento y yo me apoyo en el mesón de mármol.  

—Trabaja, trabajo. Discreción me dicen — le respondo encogiéndome de hombros para parecer más relajado y natural lo que digo — Sabes que no me agrada que sepan de mi vida fuera de la oficina — agregó. 

—Buen punto — murmuró llevándose de la silla mientras se acomoda su falda — Iré a por Amy al cuarto y luego me la llevaré al mío. Lo más seguro es que ya esté buscándome el inmaduro de Harry — susurra lo suficientemente fuerte lo último para yo escuchar con claridad. Veo como abre sus ojos asustada sin embargo se relaja al escucharme reír por el apodo. 

—¿Con que así llamas a tu superior? — le preguntó en broma ya que es claro que nadie le tendría respeto a Harry sino fuera porque tiene el apellido Browne y porque es el vicepresidente de la compañía hotelera. Aunque debo decir que quien parece tomarse más enserio el peso de mantener una gran cadena de hoteles es Emma. Ha sido de mucha ayuda desde que llegó, por lo que se merece todos mis respetos. 

—B-Bueno no. Se me escapó — susurra avergonzada. 

—Sí te escucha apodandolo así. Creo que explotaría su cabeza — le digo viendo su cara de miedo ahora. 

—¿Usted cree? — pregunta en un susurro mientras mira hacia todos lados — P-Pero usted es mi jefe. Supongo que me defendería. Sí le causó gracia creo que piensa lo mismo — dice ella ahora mirándome con sus ojos entrecerrados. 

Iba a responderle pero soy interrumpido con la voz de Sol.

—Ya estoy lista — 

—Vamos — le digo girando en su dirección al estar para el lado de la puerta de salida — Ya sabe lo que tiene que hacer Emma — le digo mientras coloco mi brazo derecho por la cintura de Sol. Recibiendo una mirada de parte de ella. 

—Claro Señor — dice asintiendo. Le hago un movimiento de cabeza a Sol para que camine y entiende de inmediato. Llegamos a la puerta y es abierta por mi siendo So quien sale primero y luego yo. 

—Creía que te cambiarías también — Dice Sol cuando nos dirigimos hacia el ascensor. 

—También yo. Pero se alargó la reunión y si no fuera por la interrupción de Harry. Aún estaríamos ahí dentro — le digo presionando el botón de los ascensores. 

—¿Todo bien con él? — pregunta con sus ojos ahora puestos en mí. Por lo que le sonrío y asiento. 

—Lo normal en Harry. Lo más seguro es que se haya excedido en alguna de sus humildes compras del día y mi abuelo le canceló todas sus tarjetas — le digo viendo cómo se abren las puertas metálicas. Por lo que nos adentramos a él y presione de inmediato para el piso uno. 




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