Faltaba media hora para mi juicio, y me estaba enterando de que el testigo fundamental del caso del fiscal del distrito era nada más ni nada menos que mi profesora favorita: la profesora Mayte. Habían citado a muchos testigos. Había tantas personas que mi juicio solo por las declaraciones podría tomar días. Mi terapeuta que no veía hacía años; amigos de mi infancia; compañeros del instituto; maestros; tutores; Hugo.
Hasta donde sé, Hugo me dejó y fue él quien me entregó a la policía, ¿lo culpo? La verdad es que no. Mi situación, no es la mejor y si no salgo de esta, me alegra que por lo menos él no se verá afectado.
Siento impotencia ante esta situación: estoy siendo inculpada por un crimen que no cometí, pero que inventé; y mi ensayo es la muestra de que tengo la capacidad de haberlo cometido.
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Y sigue...
with love, Ocean Light 🩶