El inicio.

Narradora externa.

El incendió empezó en la habitación de John y Alicia Adam alrededor de las tres treinta de la mañana, rápidamente calcino el dormitorio con la pareja dentro, el humo empezó a expandirse por toda la casa y rápidamente las llamas siguieron su curso adueñándose de cada estructura, el fuego era tan violento y se movía de forma tan salvaje y a la vez tan preciso que en tiempo record acabo con todo a su paso quemándolo todo.

Los mellizos Adam hijos de esta adinerada y reconocida pareja lograron salir a tiempo por puro milagro, tal vez. El humo en los pulmones de estos jóvenes era tanto que ambos pierden el conocimiento desmayándose uno al lado del otro, pero logrando mantenerse con vida.

Las llamas continuaron adueñándose de la mansión Adam la cual se encuentra en las afuera de Castle en territorio de una ciudad vecina. El cuerpo de bomberos no llegó hasta una hora con treinta y cinco minutos después de haber iniciado el incendio, las llamas continuaron quemando cada estructura de la mansión, mientras que el cuerpo de bomberos trataba de controlar el fuego, una mujer encuentra los cuerpos de los jóvenes Adam y rápidamente se acerca a ellos para revisar y comprobar que ambos estén bien.

—Están vivos, sus latidos son débiles, pero están vivos. —informa a su compañero.

Los mellizos fueron trasladados al hospital más cercano donde ambos fueron atendidos de emergencia, tenían una que otras quemaduras en su cuerpo, humo en sus pulmones, pero responden muy bien a los tratamientos que se les aplica teniendo una buena recuperación.

A medida que ambos sanan físicamente exponen que tanto les afecto mentalmente el incendio. Ambos permanecen en un estado de shock donde no hablaban, no comían y tampoco hacían contacto visual con ninguna persona. Su tía Teresa quien no tardó en hacerse presente estuvo ahí con ellos intentando avanzar sin obtener resultados; hasta que unos días después decidieron enfrentar a ambos hermanos para ver si así lograban obtener una reacción.

Roxanna Adam levantó su fría y vacía mirada para observar a su hermano, él se acercó a ella mirándola de igual forma y la abrazo, por las mejillas de ambos empezaron a rodar lágrimas, un llanto de dolor, un llanto de sufrimiento algo jamás antes visto o escuchado en el hospital ni en ningún otro lugar se hizo presente, los mellizos lloraban desconsoladamente.

El doctor encargado de este caso se queda observándolos a detalle. El caso de los mellizos parecía interesante ya que según se decía ninguno mostraba dolor ante lo que les pasaba, esto es algo inesperado.

Los días fueron pasando y ellos seguían sin hablar o comer. Los reporteros molestaban día tras día por obtener información o una foto de los mellizos Adam. Los Adams son de las familias más antiguas de Castle y de los más reconocidos por sus múltiples negocios, su tía en un intento de alejar a la prensa de ellos cerró las puertas de la ahora decadencia de estos jóvenes con la estricta regla de que solo personal de confianza y autorizado podía entrar.

Un año y siete meses pasaron luego del incendio para que una mañana lluviosa de abril luego de total silencio se escuchara por toda la cocina Adam la grabe, varonil, hostil y gélida voz de Ryan Adam sorprendiendo a todos los presentes. Durante mucho tiempo estuvieron molestándolo, intentando hacerlo hablar hasta que esa mañana una chica se detuvo justo frente a él impidiéndole el paso y llamando su atención, le hizo una sencilla y amable pregunta.

Los presentes se miraron entre ellos y como la chica había obtenido una respuesta positiva y una orden directa ella empezó a hacer lo que el chico quería mientras que el solo se quedó ahí, esperando sin hablar con nadie. Al obtener lo que quería abandono la cocina dejando a todos murmurando sobre él y a la chica muy nerviosa por al fin haberlo hecho hablar, haberlo escuchado.

La incógnita del silencio de estos mellizos es algo que aun sigue presente, su forma de actuar, expresarse y su forma de manejar su vida es un misterio, su carácter irradia poder, su voz seguridad, siempre observando, juzgando y cambiando.

Los mellizos Adam son el misterio que mueve nuestro alrededor.