Eivelinn:
confiarnos a nosotros mismos, y nuestra confianza es escasa. Ya no hay gentileza en nadie, todo es egoísmo y crueldad. He perdido a todos mis amigos a lo largo de los años, y ahora solo me queda estar con mi hermano gemelo, Said, a quien amo y jamás imaginaria poder vivir sin él. Pero ¿Cómo llegamos aquí? Un recuerdo de cuando teníamos 7 años, él me persigue a diario y todavía es tan real como si hubiera sucedido ayer.
Era un día común y corriente, un día tranquilo y normal. Mi padre, mi hermano y yo estábamos viendo las noticias mientras mi madre hacía un pastel en la cocina. Cuando de repente, algo nos atrajo la atención. Una reportera que nunca habíamos visto antes estaba claramente preocupada mientras leía un papel en su mano. Intentó arreglar su cabello y su vestido para disimular lo alterada que estaba, pero era evidente que esta noticia no estaba en su guión habitual...
-Pueblo de Nubilum- dice con voz muy profesional, tratando de mantener su propia calma- el gobierno acaba de emitir un comunicado mundial, por favor mantener la calma a lo siguiente.-hace una pausa al parecer para calmarse a si misma, después de todo ella fue la más alterada por aquella misteriosa noticia, tomó aire y continuó- El gobierno acaba de declarar que el agua limpia de nuestro planeta está agotada en un 90%.- el jugo que tenía en mi boca salio a chorro.
Si bien hace un tiempo se había escuchado de la escasez de agua limpia, llegar al punto de estar casi totalmente agotada era suficiente para dejar a cualquier en shock, hasta a una niña.
-El gobierno se está comunicando con diferentes países los cuales cuentan con fracciones del 10% restante. Ciudadanos si ustedes cuentan con algún pozo de agua potable o cualquier fuente de ella, por favor hacer saber a las autoridades, recuerden que el agua es nuestra principal fuente de vida- continuó diciendo, ya este punto aquella hermosa y profesional reportera le temblaban las manos- Por último, se les recomienda a los ciudadanos no salir de sus hogares ya que a ser nosotros unos de los países con mayor producción de productos agrarios, hemos recibido ya varios atentados de parte de otros países vecinos con una posible guerra en ellos por nuestros suministros. Por favor mantengan la calma, les prometemos que nuestro gobierno está haciendo todo lo posible para mantenernos lejos de cualquier peligro. Está fue una noticia de parte de ITV, gracias.- en el momento que se terminó la noticia se fue la luz y toda la casa quedó iluminada solamente por luz solar, nuestro padre se apresuró y nos llevó hacia la cocina con nuestra madre.
-¿Que pasa?- preguntó Said un poco consternado ante aquella reacción mientras observaba a mis padres intercambiar miradas.
-Cariño- llama mi padre a mi madre y ella asiente entendiendo la indirecta y rápidamente y sin explicación alguna nos lleva al sótano en total silencio.
...
Todo pasó tan rápido después de eso, teníamos una reserva de agua, gracias a la preparación de mi madre al ver que cada día llegaba menos agua a nuestra casa, la cual se fue acabando más rápido de lo que queríamos, cada día había menos comida y el calor se volvía más y más intenso cada día al punto de ser casi insoportable, no habíamos salido de nuestra casa desde que esa noticia llegó a nuestros oídos, mi padre salía cada tanto y volvía cada día con menos reservas, solo podíamos escuchar los ruidos, gritos, golpes secos, estruendos que hacían temblar todo el suelo y estar en un sótano no ayudaba en nada a todas esas situaciones. El no saber que estaba pasando era nuestra peor tortura.
Luego de no sé cuántos días, el estar encerrados nos estaba agotando, el calor nos hacía sudar hasta no dar más, sentíamos que estábamos en un horno que nos podía hacer cenizas en segundos pero prefería torturarnos lentamente en vez de matarnos de una vez. Solo podíamos tomar un vaso de agua diariamente porque ya casi no quedaba, no nos quedaban ya ni lágrimas en ese sufrimiento, solo parecíamos sin vida, tan flacos con varas, deshidratados y con ropas sucias, pero al menos seguíamos vivos.
Se escuchó un estruendo tan fuerte que luego de el solo podia escuchar un pitido en mi oído tan incómodo como doloroso, busqué entré los escombros a mi hermano aún cuando me fallaba la vista, mis pequeñas manos luego de ser rasguñadas por las rocas por fin encontraron un cuerpo y al contrario de ser mi hermano lo que vi ese día hizo que me olvidará del ruido en mis oídos, de mi vista borrosa, solo me paralicé al ver a mis dos padres abrazados, parecían dormir profundamente y hasta pensé que solo tenía que despertarlos e iban a regañarme como siempre con un "duerme Eivelinn" así que lo intente, una, dos, tres, no sé cuántas veces fueron, solo sé que intenté despertarlos hasta que sentí haber desperdiciado toda el agua existente en mi cuerpo llorando y caí al suelo con un golpe seco.
No paso mucho y volví a la realidad cuando recordé que todavía no había visto a Said, voltee y busqué con mi vista entre todos los escombros y no pasó mucho cuando lo vi, sentado en un gran pedazo de pared, estaba tan perplejo como yo, o más, parecía que solo se limitó a ver aquella escena en la que yo intentaba creer que solo era un sueño, lo abrace sin importarme nada, ni el calor, la suciedad o el saber que ese abrazo iba a generar más lagrimas que no tenía.
Como si no hubiera sido suficiente, sentimos como dos hombres se acercaban a nosotros y nos arrastraban de las camisas a lo que parecía una carreta, nos arrojaron adentro con fuerza, nos vendaron los ojos y nos amarraron los pies y manos, intenté gritar y patalear pero no sirvió de nada. Lo que siguió de eso fue tanta oscuridad como fue posible, me limité a hacer cualquier ruido o movimiento, busqué entre la oscuridad de mis ojos y sostuve la mano de mi hermano la cual temblaba por el miedo y sudaba por el calor y allí quedamos solo agarrados de las manos sin poder ver o movernos más de lo mínimo.