Unica parte

Matías Matías Matías- repetía frente al espejo, los cambios físicos ya eran muy obvios, la voz, el rostro, aunque parecía de 15 a sus 20 años no se quejaba, por primera vez en su vida podía vivir en consecuencia a lo que sentía, a lo que él sabía que era y estaba satisfecho con lo que hoy el espejo le mostraba.
Se puso unos vaqueros azul gastado y su camiseta negra favorita, tomo la mochila y corrió a clases, estudiaba medicina habiendo decidido qué hacer con su vida hacia solo un año, cuando les dijo a sus padres que quería ser libre, ellos no estuvieron de acuerdo creyendo que estaba confundido, que solo era una lesbiana muy masculina, pero Matías sabía muy bien quien era y que quería; ignorando las negativas de su familia empezó con su transicion solo pero cuando los cambios fueron obvios a la vista su familia cambio poco a poco su forma de verlo y de pensar, cambio su documentación para poder estudiar sin ser confundido con una chica nunca más; desde que empezó la carrera uno de sus compañeros le llamo la atención, moreno de ojos negros, más alto que él, delgado pero no demasiado, con una forma de ser suave y gentil quedo cautivado de inmediato, pero el aún era muy inseguro, no podía acercarse sin tartamudear y avergonzarse, una de sus amigas le dijo que Pablo no era gay pero Matías no lo creía, su comportamiento, forma de hablar y vestir a veces desmentían eso, sintió curiosidad y la noche anterior se había puesto a investigas en internet descubriendo un mundo completamente nuevo para él, descubrió a las "Tomboy, los Tomgirl" y decidió que tal vez si tendría una oportunidad para acercarse a Pablo.
Armándose de valor esa tarde lo espero al final de las clases, caminando detrás de él tomo una respiración profunda y lo llamo
-¡Pablo! hola
El chico se detuvo y volvió a verlo, creyó que lo reconoció por la sonrisa que este le dio
-Hola ¿cómo estás?
-Oh… Bien, ¿y tú?
Sentía los nervios creciendo dentro de mí y sabía que si no lo decía pronto no podría hacerlo
-Bien, ¿vamos juntos a clases verdad?
- Si y me preguntaba si me ayudas con algo
-Claro
La emoción me desbordo y por la sonrisa y el brillo de sus ojos lo noto
-Tomamos algo y te cuento ¿quieres?

El acepto y caminamos juntos hasta un café cercano, yo estaba nervioso, tenía al chico que me gustaba junto a mí a punto de decirle que era trans sin presiones pensé; el lugar era muy agradable, intimo, acogedor; tomamos una mesa junto a las ventanas, ordenamos y esperamos unos minutos en silenció antes de que Pablo hablara

-y...¿En que necesitas que te ayude?
Nervioso e incapaz de mentir solo le dije la verdad
-En realidad eso era solo una excusa para que me acompañaras...quería hablarte de algo
En ese momento la mesera llego con el pedido, nos sirvió y se alejó, Pablo hablo otra vez luego del silenció en que callo Matías
-¿Que querías decirme?
-...yo...bueno...me gustas...
Dije en voz baja y muy nervioso, él se quedó mirándome por un momento
-Me alagas pero o me gustan los hombres
-Eso me dijeron. Pero pensé que tal vez serias algo así como un Tomgirl?...yo soy un chico trans...
Las últimas palabras fueron dichas en un bajo susurro, el silenció duro un poco más que antes hasta que ya no aguanto y levanto la vista para ver a un Pablo sonriendo casi tímidamente
-¿Pablo?
-Si...soy un Tomgirl
-¿Pero?
-No he estado nunca con alguien como tu
-Oh
Digo con algo de desánimo decepcionado en el momento en que Pablo se acercó y me sujeto mano sobre la mesa
-No dije que no me gustaría probar, pero me gustaría conocerte un poco mas
Entrelacé mis dedos con los suyos y le sonreí recuperando mi entusiasmo
-Claro que sí, podemos salir
-¿Esta noche?
-¡Si!..¿Puedes?
-Claro ¿a qué hora?
-Paso a buscarte a las 8, podríamos ver una película y comer algo
Pablo se soltó de mi mano y de su mochila saco un papel y un bolígrafo, anotando su dirección y numero de teléfono antes de entregármelo y levantarse
-Estaré esperándote
Dijo y beso mi mejilla antes de caminar fuera, yo me quede allí sentado por un rato incapaz de creerme que realmente todo esto acababa de pasar.....
Las manos me temblaban un poco, frente a su puerta respire profundo varias veces tratando de tranquilizarme antes de tocar rezando por que no se hubiera arrepentido, no paso mucho para que un Pablo sonriente vestido con pantalones negros que se abrazaban a sus piernas como un sueño y una camiseta rosa suave que resaltaba el tono de su piel, el conjunto me hacía pensar en un esfuerzo por su parte de verse bien y lo había logrado
-Te ves bien
Dije sin pensar porque era la verdad y en el acto mi rostro se calentó aunque por la brillante sonrisa que me dio valió la pena
-¿Vamos?
Asentí y caminamos al cine de la ciudad, acordamos en ver una comedia que según las críticas no era muy buena; nos acomodamos en el centro de la sala sin prestar atención a la película hablando tonterías y riendo de todo, no se me paso por alto que cada vez que podía me tocaba, tomaba mi brazo o un apretón en el hombro hasta que me pareció el momento de tomar su mano, una costumbre que tenía era acariciar con el pulgar el dorso de la mano que sujetaba y fue lo que hice con él, Pablo de repente se quedó en silenció y quieto viendo la pantalla frente a nosotros así que lo imite, tal vez la película se ponía interesante después de todo pero no era así, el moreno movió nuestras manos lentamente a su muslo unos centímetros sobre la rodilla, lo mire de reojo curioso, estaba un poco sonrojado y su respiración agitada, sin dejar de mirarlo ni acariciarlo subí un poco más nuestras manos notando una ligera inhalación antes de detenerme solo un momento y volver a subir un poco más hasta alcanzar ese lugar justo antes de la ingle mientras acariciaba la tela del pantalón solo lo suficiente para que lo sintiera, la respiración de Pablo aumento más profunda y acelerada, sintiéndome valiente solté su mano para sujetar su pierna en el mismo lugar, él se recargo casi desplomándose en el asiento separando un poco más las piernas, pude ver el momento en que comenzó a morder sus labios y creció más grande y duro, moví mi mano más arriba justo por debajo de su excitación, el moreno se arqueo ligeramente separando sus labios en un gemido silencioso, disimulando lo que estaba haciendo me acerco a su oído y apretando con firmeza mientras paso mi brazo por el espaldar de su asiento le susurro
-¿Pasa algo malo?
Solo niega con un movimiento lento y abre más las piernas empujando su pelvis hacia mi mano como pidiendo algo, me rio ligeramente de una manera que esperaba sonara seductor y confiado mientras suave la muevo sobre su erección en un rose ligero solo provocándolo, esta vez Pablo gimió audiblemente pero bajo, viendo los que estaban sentados detrás de nosotros distraídos giro un poco el rostro al frente ocultándome de la vista me acerco a su cuello y dejo un ligero beso, al sentir al moreno estremecerse doy un apretón antes de retirar la mano
-Creo que deberíamos irnos ya
Con un entusiasmado asentimiento de su parte nos ponemos de pie y torpemente salimos de la sala, mi acompañante me hace detenerme al sujetar mi mano, viéndolo con curiosidad mientras me jala en dirección a los baños, nos mete en una cabina empujándome contra la pared se apega a mí y me besa casi con desesperación, respondo igualando su intensidad mientras lo abrazo por la cintura acariciando su espalda, sin dejar de tocarlo llevo mis manos a su pecho y lo empujo sobre la otra pared, arrastro los dedos sobre su piel llevando la tela de su camiseta conmigo me acomodo como puedo para poder probarlo lamiendo su ombligo hacia arriba a sus pezones que succiono antes de volver a sus labios y decir entre besos
-Vamos a mi casa....
Lo miro como en shock por lo que le dijo, provocando que la risa de Gabriel se intensificara, él ya sabía eso no necesitaba que se lo dijeran, lo que necesitaba era que le dijeran que es lo que pasaba de malo en su cabeza, Matías ya no sabía quién era y no tenía ni idea de que era lo que estaba mal