Capitulo 2. Confrontación

Siendo ya muy tarde para volver a la institución quede en mi antigua habitación en casa de mamá. Aun despierta bien entrada la noche, a través de mi ventana veo el cielo estrellado, en el cual mis pensamientos se convierten en una densa neblina de incógnitas y preocupaciones. Aun no proceso la extraña actitud de Esteban con respecto a la riña de esta mañana y mucho menos la actitud de mi hermano que aun estando enfermo tiene la fuerza para reclamarme. ¿Qué es lo que insinuaban decirme? Mientras analizo sus palabras suena mi teléfono celular, al ver quién es el remitente sin mucho ánimo contesto.

—Sí, ok, ujum… No se preocupe gobernante iré a ese lugar para arreglar las cosas— *cuelgo* —Tendré que analizar estas dudas luego.

Me visto para salir, ropa de fácil movimiento como la deportiva y una chaqueta con capucha, tomo lo necesario y al salir de la casa subo a un auto  que ya me espera.

El auto comienza su rumbo al destino designado, ya no hay personas en la calle y el cielo nocturno es muy pacifico, pero todo esto se derrumba cuando el auto frena de repente ocasionando que casi me golpee con el asiento delantero por no usar el cinturón de seguridad. Al entrar en mí, miro al conductor y dice que me quede  dentro del auto. Los lideres acostumbran a tener un grupo especialmente seleccionado por el gobierno para protegerles llamados seguidores, por lo tanto, uno de esos hombre comienza a tener un conversación con el conductor, no presto atención al fin y al cabo no me llevo bien con ninguno de ellos ya que solo siguen ordenes del gobernante yo solo estoy pintada bajo sus ordenes, al acto siguiente resuenan disparos en el aire.

Sin perder tiempo subo mi capucha para ocultar mi rostro y salgo rápidamente del auto.

Los disparos son ensordecedores, ametralladoras que vacían sus casquillos en el aun caliente pavimento, todos corremos para refugiarnos de ellos, poco a poco los disparos cesan pero no para bien pues un lanzacohetes fue apuntado a nuestra dirección, corremos tan rápido como podemos pero impacta en un auto, este sale volando por los cielos y aterriza delante de uno de mis hombres impidiendo que esta pueda moverse — ¡Ayuda! ¡Que alguien me saque de aquí! —

Sus gritos llegan a mis oídos, voy a su encuentro, una segunda oleada de disparos comienza al notar mi presencia, por lo que, no me queda más remedio que usar mi poder para protegernos del enemigo. Este poder es como un gran escudo que puede ser extendido varios metros y rebota ataques enemigos.

— ¿Te encuentras bien? — le pregunto sin mucho ánimo pero en guardia con los alrededores.

—Sí, muchas gracias representante. Usar sus poderes para esto me siento muy apenado, el gobernante de seguro llamara nuestra atención.

—No debes preocuparte por eso— digo mientras mantengo activo mi poder, no es poderoso, pero es lo suficientemente eficiente para mantener al enemigo alejado.

—Es hermoso ¿sabes? — Una voz de un hombre aparece desde el bando enemigo. —Ese campo de fuerza que puede repeler los ataques es verdaderamente hermoso, aunque es un tanto inconveniente para mis planes.

El hombre hace aparecer una guadaña y yo hago lo mismo. La guadaña es símbolo de liderazgo territorial, es decir, quien lo posea es representante de su gobierno, es la prueba de poder. Cada guadaña tiene un sello y color  que representa cada territorio. Para Antirda es azul con sello de hielo, Ocania es amarillo con el sello de un sol, Irop es verde con sello de una gota, Afriz es marrón son sello de una piedra, Esia es rosa con sello de una flor y Amira es blanca con sello de un ave para el sur y un león para el norte. Los sellos son la unión del representante con su territorio y limita los poderes de este como una correa.

Su guadaña es de dos mangos delgados que están conectados por aros y cadenas, su hoja es más pequeña que un cegador común y de igual color que el mío, por lo que esta persona es el líder de Amira Norte, mi principal némesis. En Amira la lucha por ver quién derrotará al otro primero lleva mucho tiempo, razón por el cual Amira está dividido en dos y es un oponente débil en comparación con los otros territorios.

—Justo a quien quería ver— esbozo una sonrisa y me preparo para atacar. —Es hora de unificar este territorio.

—Estoy de acuerdo con ello, pero estás equivocada si crees que será bajo tu gobierno, eres, más débil que yo, solo sabes defenderte, por lo tanto este territorio me pertenecerá por completo.

—No me parece, seguiré el ejemplo de un amigo y voy a demostrarte a ti y a tus seguidores que conseguiré el control total de esta situación, obteniendo con ello el mayor alcance de gobierno.

Marinep se decide a realizar un contraataque  contra el hombre misterioso, pero antes de que pueda llegar a él unas cadenas la sujetan por los brazos y las piernas por lo cual queda inmovilizada. Uno de los seguidores del hombre se acerca a ella, los hombres de Marinep intentan ir en su ayuda pero nuevos disparos no los dejan aproximarse y si devuelven fuego ella puede salir lastimada aunque están más preocupados por ellos mismos, al momento siguiente el seguidor le quita la capucha revelando su identidad.

—Tienes razón chica, si lo pones de esa manera pienso que lo que te dijeron es lo mejor, es bueno que lo hayas seguido, pero, de nada vale seguirlo si no puedes ejemplificarlo.

El rostro de Marinep se distorsiona por la impotencia, su identidad había sido revelada así sin más y ella no sabía lo básico en esta ocasión ¿Cuál es la identidad real de su contrincante?