Cinderella Story ~ El joven mosquetero

~36~

-Jules- sonrió Gustave al ver a su hijo entrar al comedor, a lo que el chico se limito a contestar con una sonrisa decaída.
-Sera mejor que comamos- dijo incómodo Gustave y por primera vez en mucho la cena fue en silencio y con uno incómodo. Haciendo que terminara rápido y todos se fueran a dormir, aunque eso sí todos pensando en cómo avanzo el día.

El día siguiente a Jules le dejaron dormir prácticamente toda la mañana mientras su hermano asistió a todas sus clases. Haciendo que Eric se enojara más con el y también los profesores se les veía preocupados, empeorando el humor de Eric.

-Jules- se oyó la voz cansada de Gustave por buscar a su hijo por toda la casa menos su cuarto. Y más porque jamás Jules estaba en su cuarto. Aunque en esta ocasión si estaba ahí y al verlo, repitió su nombre aliviado.
-¿Que pasa?- preguntó Jules serio mientras se vestía.
-¿Cómo te sientes por lo de ayer?- preguntó al ver a su hijo. El cual se veia muy imponente y más por la seriedad y por como su cuerpo mostraba que parecía más un mosquetero que lo que el deseaba en sus hijos. Haciendo que Gustave no supiera que decir o hacer por miedo de perder a su hijo menor.
-Mucho mejor, quiero pensar sobre algunas cosas, iré a montar un rato- soltó y se marcho mientras se acomodaba bien la chaqueta, para ir por Balios y alejarse de los terrenos de lo que llamaba hogar. Dejando a su padre y a todos los que vieron como se marcharán preocupados y sorprendidos por su actitud.

-¿Y Jules?- preguntó Eric ya que su hermano seguía desaparecido a la hora de la cena.
-Queria pensar en algo, creo- contesto Gustave preocupado. Ya que llevaba varias horas Jules fuera y temia que algo malo le pasara.
-¿Y Dastan?
-Esta en la cocina ayudando- contesto uno de los sirvientes mientras terminaba de poner la mesa. Después de que Jules se marchara y Klaus se enterará, este decidió quedarse a ayudar a Amelie. Lo cual significó que Eric tuviera todas las clases solo para el, como ya se estaba haciendo una costumbre en esta casa.
-Que venga entonces- contesto Gustave serio. Ya estaba acostumbrado a que sus 2 hijos y el danes estuvieran con el en todas las comidas, además de que Dastan estuviera apoyando en la cena. Tan acostumbrado estaba que ya sabía qué pasaba con cada uno y se lo había memorizado. Dastan callado y trabajando, Jules y Klaus hablando con miradas y gestos, y el y Eric platicando de sus planes.
-Ya viene- contesto el sirviente cuando Klaus llegó con una manzana. Acto que como siempre llamaba la atención y nadie sabía porque, menos los que sabía la procedencia del chico.
-Sientate- le pidió Gustave al chico que parecía perdido en su manzana. El cual al oír esa palabra se sentó, no sin antes ver el lugar vacío de Jules y bajar su mirada por la preocupacion.
-¿No le preocupa su hijo menor mi señor?- preguntó el hombre.
-¿Cree que no me preocupa?- grito Gustave enojado.
-Lo pregunto por como lo dejo ir sin mas. Ni sabe dónde esta- contesto asustado.
-¿No tienes algo mejor que hacer?- preguntó Gustave serio.
-Estoy poniendo la mesa mi señor ¿Cree que venga a cenar?- preguntó el hombre con la mirada baja y mostrando que tenía duda si poner o no su lugar.
-No lo se- contesto Gustave decaído y avanzo la cena con las cosas de Jules esperándolo. Hasta que llego a media cena.
-Jules- sonrió Gustave y Klaus se calmo. Se veía como llego, sano.
-Lamento la tardanza- contesto serio Jules.
-Jules de seguro tienes hambre, no has comido en todo el dia.
-Gracias- sonrió Jules y se sentó a comer. Y la cosa mejoro en la cena, pero se sentía ligeramente como la otra, con un silencio incómodo.



#18410 en Otros

En el texto hay: cenicienta, mosquetero

Editado: 19.04.2022

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