Comienza la Revolución

CAPITULO 6

ACTUALIDAD, SÓTANO DE LOS DARBY

 

-Irina, ¿realmente crees que esto va a funcionar? - Adam coge las fotocopias acumuladas en la impresora y se las acerca a sus ojos- la gente de la zona está agotada, no van a pararse a buscar un mensaje subliminal en esto- Adam gira la hoja mostrándome el contenido de ellas, una representación en hojas de tamaño A2 del peón que mi madre había dejado dibujado en el lienzo.

 

-No queremos que cualquier persona se una a nosotros Adam- rodeo la mesa de escritorio donde había encontrado los pinceles y acuarelas de mi madre- queremos que se una gente que realmente quiere luchar por encontrar una salida- agarro la hoja que Adam sostenía en sus manos y ahora soy yo la que acerca su cara a ella- queremos personas que quieran realizar un jaque mate y terminar victoriosos de una vez esta partida- las pequeñas letras escondidas en una de las sombras dibujadas en la figura del peón se abren paso- sigue las casillas blancas, es el principio de la partida, es la primera jugada de nuestra última partida.

 

La impresora no paró de sacar copias de aquel peón hasta pasadas varias horas, cuando decidimos que con lo que teníamos podíamos empapelar toda la ciudad, desde el rincón más inhóspito hasta las avenidas principales. Tras dividirnos la repartición de los carteles nos pusimos manos a la obra, Adam se dedicó a pegarlos por la zona norte, una de las zonas con mejor economía de toda la ciudad, no teníamos mucha fe de que la gente que habita en aquella parte de la ciudad se parase si quiera a mirar los carteles, pero, aun así, decidimos arriesgarnos, siempre hay posibilidad de llevarse una sorpresa. A mí me tocó la zona sur, la zona donde se encuentra mi casa, y todas aquellas casas de las personas que por este gobierno han perdido algo importante en sus vidas, desde familiares cercanos hasta amistades de la infancia. Pegué uno tras otro, no quería que quedase ningún rincón sin empapelar con los peones de mi madre, hasta que se me acabaron las copias, y tal y como habíamos acordado, una vez que terminásemos nuestro trabajo, nos volveríamos a reunir en el sótano de mi casa.

 

-Listo- la voz de Adam sonó tras mi espalda, se acerca a un sillón de cuero negro que había en el sótano y se deja caer sobre él- esto de pegar carteles por la ciudad cansa más de lo que creía- un resoplido cargado de cansancio se escapa de sus labios- con tu permiso, voy a tumbarme un ratito- no me dio tiempo a responderle, cuando me giré ya estaba completamente tirado sobre los almohadones del sillón, con las zapatillas tiradas por el suelo y los pies por fuera, estamos hablando de un tío de metro ochenta completamente estirado en un sillón biplaza. Sobresale.

 

-No te preocupes Adam, ahora hay que esperar a que alguien vea los carteles- me siento en la silla del escritorio- pero más imprescindible aún, que sepa encontrar y descifrar el mensaje que le otorgue la pista para encontrarnos- los ronquidos de Adam empezaron a hacerse eco por todo el sótano de mi casa.

 

No había notado los nervios que toda esta situación me había provocado hasta este momento, hasta que, por fin, después de un día intenso de repartir y colgar carteles por gran parte de la ciudad, mi mente había dejado de estar activa y me había dado un respiro. Notaba la ansiedad recorriendo cada parte de mi cuerpo, acompañado también del temblor que mi pierna derecha estaba sufriendo, haciendo chocar mi pie contra el suelo y creando un sonido intermitente por mi zapatilla desgastada con cada choque.

Muchas incógnitas se formaban en mi cabeza ¿cuánto tiempo pasaría hasta que alguien sepa descifrar el mensaje oculto de los carteles? ¿acaso sigue quedando gente como nosotros con la valentía y las ganas de parar todo esto? ¿y si nadie lo consigue nunca? ¿habremos echado a perder todo el tiempo y esfuerzo que hemos empleado para llevar a cabo esta venganza?
 

Con cada pregunta mis nervios iban en aumento, una gran presión en el pecho se abrió paso y con ella, más dificultades a la hora de respirar, no me podía creer que me estuviese dando un ataque de pánico, y menos después de todos los años que llevaba orquestando el plan con la ayuda de Adam.

 

¿Qué pensaría mamá si nos ve así Irina? - la voz de mi mente reapareció, después de mucho tiempo sin escucharla- vamos, no es momento de ponerse así, hemos nacido preparadas para hacer esto- la tela que cubría mi retrato infantil cayó, justo en el momento preciso, como si de una señal enviada por mi madre se tratase- mamá sabía para lo que habíamos venido al mundo, ¿por qué sino iba a dibujar un peón en nuestro retrato incluso antes de que esa gente la matara?- mi vista se fijó en el minúsculo peón del cuadro- sabía que seriamos nosotras las que ejecutaríamos el primer movimiento.

 

Apreté el borde de la mesa del escritorio con mis manos, intentando liberarme de todas aquellas sensaciones negativas que se habían apoderado de mi cuerpo hace un momento, y, parece ser que estaba dando resultado. Mi pulso y respiración volvieron a su ritmo normal, los temblores también desaparecieron, un suspiro se escapó de mis labios como muestra de aquella calma que estaba volviendo a hacerse presente en mí.

 

Unos golpes en las pequeñas puertas que daban paso a las escaleras del sótano terminaron por marcar el final de esta situación estresante, Adam me miraba confuso desde el sillón, aquellos golpes le habían despertado, nos miramos durante unos segundos en completo silencio, aunque fuese casi imposible, ya que ambos los habíamos escuchado, al no volver a oír ninguna otra muestra de algún golpe, comenzamos a pensar que había sido fruto de nuestra imaginación y del cansancio que llevábamos acumulado. Pero no, porque en cuestión de segundos, los golpes volvieron a repetirse.

 

Me levanté de la silla intentando no hacer ruido, anduve de forma sigilosa hacia la escalera y empecé a subir, uno por uno, con calma, los escalones que la conformaban. La mirada de Adam pesaba sobre mi espalda, sabía que se había levantado y estaba preparado para cualquier suceso que tuviese lugar a continuación.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.