Capítulo 18 - Grand Marshall

“Alice, parece que estás de mal humor. ¿Pasa algo malo?” Preguntó Quinton mientras bajaba las escaleras con las manos en los bolsillos. Quinton sintió que su corazón se conmovió un poco cuando vio a Alice, que parecía ser aún más hermosa de lo que era hace dos años.

“Estoy bien. ¡Sólo estoy un poco asqueada por algunas personas!” Alice miró entonces a Gerald con una fría expresión en su cara.

“¡Exactamente! ¿Cómo puedes decir tonterías sin saber cuál es tu lugar?” Jocelyn y las otras chicas también parecían odiar a Gerald.

Todas miraban a Gerald con una expresión aguda en su cara. Quinton miró a Gerald. Cuando vino al restaurante antes, pareció notar que Alice ya estaba disgustada con Gerald. Sin embargo, después de bajar las escaleras, Alice parecía aún más infeliz y disgustada con Gerald.

‘¿Será posible... que este chico tuviera una relación ambigua con Alice? Jajaja. ¡No, eso no sería posible!’ Quinton lo supo tan pronto como miró el traje de Gerald.

‘¡El precio total de toda su ropa no superaba los treinta dólares! ¿Cómo podría Alice tener una relación ambigua con alguien como él?’

“¿Hay algún malentendido entre ustedes dos? ¿Por qué no le hablas? ¡Son todos compañeros de clase, así que deberían tratar de llevarse bien entre ustedes!” Quinton sonrió, pero sus ojos estaban enfocados en Gerald en ese momento.

“Hola, amigo mío. Me llamo Quinton. Encantado de conocerte”. Después de eso, Quinton extendió su mano para estrechar la de Gerald, revelando un reloj Rolex de oro en su mano. El reloj Rolex de oro fue extraordinario a primera vista y todas las chicas lo miraron con admiración en sus rostros.

Gerald se dio cuenta inmediatamente de que Quinton no era sincero y que tenía intenciones maliciosas.

Cuando estaba a punto de estrechar la mano de Gerald, Quinton preguntó repentinamente con una expresión de sorpresa en su cara: “¡Vaya! Amigo mío, ¿de qué marca es tu camiseta? No he visto esta marca antes. ¿Crees que es porque acabo de regresar del extranjero?”

Quinton miró fijamente a Gerald mientras hacía una expresión de caída de mandíbula en su cara y sus labios se enroscaron ligeramente mientras le sonreía a Gerald.

Quinton quería impresionar a Alice y se dio cuenta de que Alice tenía una relación muy mala con Gerald. Por lo tanto, también podría golpear a este chico con unas pocas palabras.

“Jajaja”.

“Es sólo una marca ordinaria”. Gerald no tenía intención de discutir con Quinton. No podía ser molestado con alguien como Quinton. Para ser honesto, Gerald ya había planeado comprar ropa usando la tarjeta de Comprador Supremo Universal Global que su hermana le había dado. Sin embargo, sentía que el consumo mínimo de 50.000 dólares era demasiado extravagante.

“Oh. ¿Es realmente de una marca ordinaria? Por cierto, Harold, ¿has visto esta marca antes desde que siempre has estado en el país?”

Quinton se dio la vuelta para mirar a su compañero de clase. El hombre llamado Harold tenía el pelo rubio y había estado ocupado mirando a todas las chicas guapas, desde Alice hasta Hayley y Jocelyn.

Harold supo inmediatamente a qué se refería Quinton cuando le hizo la pregunta. Después de eso, Harold sacudió la cabeza antes de sonreír y dijo: “No, no he visto esta marca antes. ¿Quiere que la busque en Internet?” Ambos continuaron su discusión de manera seria.

De hecho, todo el mundo podía decir que sólo intentaban burlarse de Gerald. Sin embargo, Gerald no parecía avergonzado en absoluto. En ese momento, Alice y las otras chicas tenían una expresión de satisfacción en sus rostros mientras miraban a Gerald.

“¡Ja, ja, ja! ¡Se lo merece por estar celoso de Quinton! ¡Ahora podemos ver a otras personas ridiculizándolo por ser pobre!” Jocelyn dijo mientras se reía.

“Después de todo, Quinton acaba de regresar al país después de estudiar en el extranjero. ¿Cómo se puede comparar a Gerald con él de todas formas?” Alice también dijo en voz baja.

Alice obviamente sabía que Quinton estaba ridiculizando y haciendo las cosas difíciles para Gerald por su culpa. Sin embargo, lo hacía de forma indirecta en comparación con Danny. Lo implicaba sin señalar a Gerald. Esto hizo muy feliz a Alice ya que sintió que Quinton era una persona muy inteligente.

“¡Quinton, déjame presentarte a mis amigos!” Después de echar un vistazo a Gerald, Alice presentó rápidamente a Quinton a todos los que estaban alrededor de la mesa.