CAPITULO 5

Alice

El pianista aumento la velocidad y mis giros tuvieron que aumentar, al séptimo giro tuve que detenerme bruscamente casi tropezando con mis propios pies

- ¡Alice! – la voz de mi maestra llego a mis oídos y supe al instante que el regaño sería peor de lo que pensaba

- Lo siento – baje la mirada ante el creciente dolor en mi pecho  

- ¡Estas demasiado descoordinada! ¡¿Crees que podemos aguantar tus estupideces?!  

- Perdón no me siento muy bien – trague fuerte y espere a que al menos algo ayudara a que el enojo menguara  

- Se nota – vi sus zapatos bien lustrados para después sentir como agarraba mi mentón haciendo que la viera – te hace falta color mejor vete no quiero que continúes aquí de esta manera

- Lo lamento

- Tienes dos días si no te recuperas hasta entonces habrán consecuencias – me soltó bruscamente

- Si

- ¡Ya vete!

- Gracias

- ¡Continúen no podemos atrasarnos más! – sin mirar a los demás me dirigí a los casilleros

Cambiarme no era opción así que opte por quitarme las zapatillas e ir a buscar a Jake, los planes quedarían para otro día de seguro

Puse el dorso de mi mano sobre mi boca cuando sentí que la manzana que desayune subía, todo me hormigueaba por alguna extraña razón y el hecho de que ella se comportara así solo empeoraba la situación

Sentía que mi cabeza explotaría en cualquier momento

Tome mis cosas y seguí el camino que me llevaría donde mi amigo

Al asomarme por el cristal vi al instante a Jake girar hacia mí, todos se dieron cuenta y el no tardo en venir a donde me encontraba

- Jake

- Bonita ¿todo bien? – el sudor viajaba por su sien luego por su cuello hasta perderse en su camisa

- Si, solo no me siento muy bien

- De verdad ¿qué tienes? – toco mi frente

- No lo sé solo necesito descansar me iré a casa

- Te acompaño

- No, tranquilo estaré bien

- ¿Estas segura?

- Si no te preocupes

- Escríbeme cuando llegues – me ayudo a quitarme el moño alto - dejamos la salida para otro día

- Esta bien

- Ten cuidado – asentí antes de despedirme

Seguí el camino y con un gesto me despedí de las chicas, al llegar a la calle el humo y el polvo que levantaban los autos me golpearon haciéndome estornudar varias veces

Pedí el taxi y la ruta me indicaba que no tardaría más de cinco minutos así que ni modo toco esperar

El taxi llego unos minutos antes y cuando comenzó el recorrido tome mi celular para marcar a mi lindo y bello jefe que de seguro me tratara con todo el cariño del mundo

📞 Alex

¿Por qué me llamas no deberías estar en tu academia? 📞

📞 Si solo que no me siento muy bien, ya voy de camino al departamento

¿Qué tienes? 📞

📞 No lo sé me siento mareada y me arde toda la garganta siento un sabor extraño

Puede ser algún virus que contrajiste ¿quieres que te valla ah hacer compañía? 📞

📞 No solo te llamaba para preguntarte si podría faltar hoy

No te preocupes tomate tú tiempo hasta que te recuperes 📞

📞 Gracias

Mantenme informado de cómo vas si pasare a verte mañana temprano 📞

📞 Bueno cuídate

Igual 📞

- Todo bien señorita – levante la mirada y me encontré con los ojos de preocupación del conductor

- Si – le sonreí y el asintió con extraña duda

- Ya llegamos – me indico luego de un corto tiempo

- Gracias – baje asegurándome de traer todas mis cosas y me despedí del conductor

Salude al portero y desee que todo pasara más rápido, al llegar a mi departamento tire mis cosas a un lado y fui directamente al baño para ver si el refrescarme me ayudaría con esta sensación

~

El baño no ayudo demasiado y el olor de comida solo empeoraba mis nauseas, decidí dejar a un lado la bandeja de comida calentada y me tire al sofá

Mis ojos ardían con cualquier luz que enfocaba lo cual era extraño, llevaba un tiempo sintiéndome mal sin embargo no llegaba a este punto

Algo subió por mi garganta y me senté con rapidez, me pico la nariz y al intentar rascarla algo mancho mis dedos, al alejarlos el pánico me inundo

Estaban rojos

Me levante y tome el primer pedazo de tela que encontré para ubicarlo en la zona, pasaban segundos para después minutos el sangrado no se detenía 

Mi cabeza giraba y sentir el entumecimiento en mis músculos haciéndome caer al suelo

Tosí y sentí algo salir de mi boca, el sabor metálico rodeo todo mi paladar y al tocar mis labios y el rojo carmesí volvió a pintar mi piel

El ahogo se hizo presente con la siguiente arcada y, sobre mis rodillas y manos logre llegar al baño donde no pude contenerme más 

Termine expulsando todo lo que tenía dentro de mi estómago sin embargo todo estaba lleno de sangre

Intente limpiar mi cara de las lágrimas que me comenzaron abarcar pero solo conseguí manchar mi rostro

Me arrime a la pared sintiendo el frio suelo bajo mi trasero, la comezón en mi cuello se presente y sin intentar evitarlo comencé a aruñar la zona con el solo deseo que se detuviera

Tosí una vez más y una gota de sangre mancho la cerámica frente a mí, todo daba vueltas mi cuerpo temblaba y la desesperación empeoraba mi situación

Entre sollozos tome la toalla tirada a un lado poniéndola sobre mi cara para intentar calmarme sin embargo solo sentí todo empeorar

¿Qué me está pasando?