12|| Ayudas

Observe a Soraya que estaba sentada al lado de Lilian, aun se notaba algo tímida pero era cuestión de tiempo para que tomara confianza.

—Creo que se a quien podemos pedirle ayuda —dije recordando al chico que siempre estaba en frente de una portátil.

Mire a mi alrededor al ver que no estaba Bastien.

—¿Dónde se habrá quedado? —pregunto Lilian también percatándose de la ausencia de nuestro amigo.

De repente por la puerta de la cafetería cruzo Bastien con el semblante tranquilo y las manos en sus bolsillos.

El llegó hasta nuestra mesa y nos miró con una sonrisa.

—Estamos en una situación de investigación y tu desapareces —dijo Marion mirando a Bastien— mira ella es Soraya.

Otra vez mire hacia la puerta de la cafetería y por ella cruzo Emeric. Tenia un golpe en su mejilla y el labio cortado.

Rápidamente mire a Bastien que tenia sus manos apoyadas sobre la mesa y sus nudillos estabas rojizos.

¿Bastien había golpeado a Emeric?

Después de haber compartido la clase de química, donde había hecho mi intento por fingir que el no estaba ahí lo perdí de vista.

Por un momento por mi mente paso la idea de ir a ver si su rostro había sufrido un golpe grave.

El y Bastien no se habían peleado porque Emeric era el único con golpes.

Me puse de pie de repente y las chicas me miraron extrañadas de mi repentina acción.

—¿Pasa algo? —pregunto Bastien sin borrar su sonrisa.

Negue con mi cabeza y sonreí sin mostrar mis dientes.

Caminé hacia mi objetivo, debía pasar por lado de esa mesa de los chicos del equipo y vi por un momento a Emeric junto a Alban que le decía algo.

Fueron unos segundos que ambos cruzamos miradas.

—Hola Elise —me detuve al ver a la persona que se había atravesado en mi camino.

—Hola Sean —dije fingiendo simpatía.

Di una rápida mirada a mi lado y Emeric miraba fijamente con el ceño fruncido.

—Si me disculpas tengo que hacer algo —dije mirando a Sean con una sonrisa.

—Olvide de darte mi número te envié un md por Instagram —dijo el llevando la mano detrás de su cuello.

—Entonces te responderé por ahí luego hablamos —sin esperar respuesta pase rápidamente por su lado.

Camine hacia la mesa que estaba detrás de ellos y Gustave miraba su pequeña portátil.

—Gustave —dije con una sonrisa.

El me miro y luego sonrió mostrándome sus relucientes dientes. Y el arito de su nariz brillaba.

—Diva, ¿A que debo este placer? —el cerro su portátil.

—Necesito tu ayuda… —dije mirando a nuestro alrededor que nadie estuviese escuchando— amenazaron a mi amiga con publicar sus fotos intimas.

El abrió su boca sorprendido y luego su expresión cambio a seriedad.

Gustave se puso de pie tomando su portátil y móvil, me arrastro por el pasillo.

—Espera, ¿A dónde vamos? —pregunte al ver que el se veía decidido.

—¿Quieres hablar de eso aquí a la vista de todos estos? —dijo dando una rápida mirada a su alrededor— además ¿por que Elise Fontaine hablaría con el marica de Gustave?

Su comentario me hizo sentir y recordar que Gustave casi siempre estaba solo o era la rata de las computadoras.

—Y tu chico no deja de mirarme amenazadoramente —dijo mirando a mis espaldas— me pregunto que pasara por la mente del sujeto con pene para pensar que yo tocaría a una chica.

¿Mi chico? Giré rápidamente mi cabeza y volví a mirar a Gustave.

—No es mi chico y el no me interesa —dije frunciendo el ceño.

El soltó una risita y miro justo a la mesa donde se encontraban mis amigas.

—¿Se van a quedar ahí o qué? —el se dio la vuelta y se dirigió a la salida de la cafetería.

Salimos todos excepto Soraya que prefirió quedarse en la cafetería.

—Gustave, ¿Por qué carajos no te vi antes? —pregunto Marion.

—¡Oh mi queridísima! Llámenme Gust please y… —el saco unas llaves y abrió la puerta al lado del salón de robótica— yo estoy en todos lados créanme.

—¿Pero por que nunca te vimos? —dijo Lilian observando a nuestro alrededor.

Era una pequeña oficina y era donde daban los anuncios por los parlantes, varias pantallas que daban a las cámaras por todo el instituto.

—¿Tienes acceso a las cámaras de seguridad? —pregunto Bastien viendo lo que mostraban las cámaras.

—Digamos que tengo bastantes conocimientos pero debo tener autorización para ver las grabaciones —dijo Gust abriendo su portátil.

—¿Podrás ayudarme? —Ariane se paro a su lado mirándolo a los ojos.

El la miro con una sonrisa y volvió la mirada a su pantalla.

—Hare lo posible pero no les prometo nada —dijo mientras tecleaba.

Bastien se sentó a su lado mirando la pantalla.

—También tengo conocimientos de informática.

—Lo se, digamos que se la vida privada de todos aquí —explico Gust— se sorprenderían la cantidad de personas que vi teniendo sexo.

—¿Lo dices en serio? —pregunto Marion sorprendida y como si fuese divertido.

—Claro… se el secreto de todos y una vez me toco ver parir a una chica —los cinco cruzamos miradas al oír eso— tengo información de cada profesor pero eso no puedo decir nada.

Me sorprendía la cantidad de cosas que sabia Gustave y que nosotros teníamos idea de lo que el hacia.

Esperamos unos minutos hasta que el soltó un suspiro y chasqueo su lengua.

—Tengo noticias —el se giro para mirar a Ariane— la buena es que puedo hackear sus cuentas y lo malo es que necesito el teléfono de Marcus en su nube se encuentran los archivos.

Los ojos de Ariane se pusieron brillosos.

—¿Cómo hare para conseguir su teléfono? —dijo ella para luego romper en llanto.

Me acerqué a ella y la envolví en mis brazos.

Salimos de ese pequeño cuarto y agradecimos a Gust por ayudarnos.

Todos estábamos pensativos porque no sabíamos que hacer.