≋Capítulo 19

 T/n

—Así de la nada— esquiva la vista—Quiero decir... ¿Estás segura?

—Por supuesto.

Me puse de pie para luego ponerme en marcha, pero en ese momento su voz me detuvo. 

—T/n— dice con voz gruesa y giro a verlo— Gracias

—Me voy— me limito a sonreír y sigo mi camino. 

...

Luego de un largo recorrido a pie llego al punto de encuentro. 

<<Respira, t/n. Respira. Puedes hacerlo.>> 

Me autoconvenzo y luego ingresó al auto que está al frente de mí. 

—¿Qué es eso importante que tienes que decirme?— pregunta la señora Kim enmarcando la ceja. 

—Solo vine a decirle que no voy a irme—la miro— A mi hermano le gusta esta ciudad, así que no pienso marcharme—ella sonríe con picardía— Si piensa que puede intimidarme con lo de mi pasado está equivocada. Además... yo ya no tengo nada que ver con su familia.

—¿De qué estás hablando?— me mira inquisitiva. 

—No creo que sea difícil de entender. Su hijo y yo hemos roto. Así que ahora no hay necesidad de que nos volvamos a ver usted y yo. No quiero tener ningún tipo de contacto con su familia, déjeme en paz a mi y a mi hermano, le aseguro... que no me acercaré a Taehyung. 

—Si es así... está bien, lo dejaremos aquí. Mientras cumplas con tu palabra, todo estará bien. 

Asiento con la cabeza y la apoyo en la ventanilla. 

—Adiós— digo cerrando la puerta del auto. 

—Cuida bien de tu hermano—sonríe y presiona el acelerador. 

Me quedo viendo el auto hasta perderlo de vista. 

<<Aquí empezó todo y aquí termina.>> 

De ahora en adelante, las cosas cambiarán. A muchos se les paraliza el corazón con el sólo hecho de pensarlo, cambiar la situación no es algo que se haga fácil, pero estoy segura que estoy haciendo lo correcto, no quiero depender emocionalmente de nadie en el futuro. Los inicios pueden ser difíciles, pero es el comienzo para una realidad diferente, es ser valiente... si necesito llorar, lloraré, si necesito detenerme un tiempo, me detendré, si requiero cambiar de dirección, lo haré,  y  si necesito volver a empezar 

… empezaré de nuevo. 

Taehyung.

Aún estoy desorientado por lo que sucedió ayer. Las palabras de T/n no dejan de dar vueltas en mi mente: 

“A partir de hoy, ya no me gustarás más” 

Esto no me debería de afectar, pero por alguna razón lo hace. 

—Qué tonterías estoy diciendo— hablando solo. 

Me apresuro a desayunar, tomo mis cosas y me pongo en marcha, pero me detengo al ver a una mujer entrar por la puerta, ese olor... lo reconocería en cualquier lugar. 

—¿Nana?—ladeo la cabeza.

Ella se acerca lentamente y se cubre la boca con sus manos.

—¿Taehyung? ¿Eres mi Taehyung?— pregunta con voz afligida— Mi niño, cuanto has crecido—me agacho para que pueda tocar mi rostro. 

Realmente la extrañaba, ella me ha cuidado desde que tengo memoria. Pero cuando mi familia se mudó a Seúl se tuvo que quedar con sus hijas. Fué muy doloroso en ese entonces, ella es como mi madre. 

—¿Qué te trae por aquí?—le regaló una sonrisa.

—Te extrañaba, mi casa está vacía, ya sabes, mis hijas se casaron y ahora esta anciana tiene que vivir sola—sonríe— Vine en cuanto tu mamá me dio su nueva dirección. Pienso quedarme unos días. Claro, si se puede— dice con la mayor dulzura que existe. 

—Por dios, nana, esta es tu casa.

—Estás mucho más guapo. Mirate. Me supongo que debes tener una novia— esquivo la mirada. 

—De hecho no, eres la única en mi corazón. 

—Mentiroso— me empuja y me hecho a reir— Por cierto, ¿Has vuelto a ver a T/n? 

—¿A T/n? ¿Cómo sabes de ella?

—Como no voy a saber de ella, si cuando eras niño siempre hablabas de ella. Tengo mucho que agradecerle a esa niña, bueno, ahora debe ser una hermosa jovencita. 

—Ahh, esa t/n—suspiro con nostalgia— La verdad, no la he vuelto a ver, pero hablemos de ello cuando regrese ¿si? 

—¿Te vas a la escuela?—pregunta y asiento— Aigoo, pero que bien te queda ese uniforme. 

—Todo me queda bien nana—bromeó y me golpea el hombro.

—Aishh, este mocoso vanidoso— chisquea. 

—Me voy ahora, si llego tarde cargarás con ello. 

Jungkook.

Estoy afuera de la preparatoria esperando a T/n, sin embargo ella no aparece. Ya casi es hora de que cierren la entrada principal y el decano es muy riguroso con esto. 

—¿Jeon Jungkook? ¿Qué haces ahí afuera? Ya vamos a cerrar, apresúrate— dice el decano y yo vuelvo a voltear una vez más a mirar a t/n, por suerte la veo a lo lejos correr con varios jóvenes más que llegan tarde al igual que ella. 

—8:30 en punto— mira su reloj— Señor Choi cierre la puerta y no deje pasar a los alumnos que lleguen tarde—advierte y se marcha. 

 Tengo que detenerlo. Corro hacia la entrada y me detengo en el medio de la puerta. 

—¡Hey! Chico, tienes que salir, la puerta se tiene que cerrar.

—¡Señor Choi! Tengo un regalo para usted— sonrió y miro a t/n acercándose. 

—¿Para mí? Ahhh, no debiste molestarte— dice mientros abro mi maleta. 

T/n entra rápidamente, Gracias, dice moviendo los labios. 

—Tome— le entrego una bebida— Trabaje duro ¡Fighting!

—¡T/n!— digo alcanzandola— Eso estuvo cerca.

—Si, muchas gracias— apenas puede hablar— ¿Ya sabes en qué aula te tocará?

—Oh, había olvidado que hoy cambiaban las asignaturas. 

—Espero nos toque en la misma aula—sonrío— Por cierto, ¿Como está No Jik?

—Come a sus horas y llega temprano a la secundaria si es lo que te preocupa

—Me refiero, a cómo la está pasando. Ya sabes, tu mamá...