≋Capítulo 24

T/n 

-minutos antes- 

Una vez que llegamos al hospital las enfermeras trasladaron a Taehyung en una camilla a toda prisa, de camino llamé a su familia, estoy segura que deben estar por llegar. 

—Tiene que quedarse afuera—me impiden el pase y no me queda de otra que soltar su mano. 

El tiempo aquí afuera me está volviendo loca, no hago más que dar vueltas en todo el pasillo, mis nervios han bloqueado mi mente por completo debido al sinnúmero de emociones que tengo, donde la angustia y desesperación lideran.

Me detengo y descanso con la frente sobre la pared dejando caer mi cabello.  

—¡Mi hijo! ¡¿Dónde está mi hijo?!—escucho los gritos de la señora Kim. 

Giro y veo a la enfermera señalándome.

—¡¿Qué le pasó a mi hijo?! ¡Por qué está entre la vida y la muerte! ¡Por qué!—me coge de los hombros y los mueve con brusquedad. 

—Yo...lo siento... de verdad lo siento mucho—se me hace un nudo en la garganta y lágrimas brotan sobre mis mejillas. 

—¡Todo es tu culpa!—solloza desesperada—¡Te dije que te alejaras de él! ¡Es tu culpa!—da golpes en mi pecho.

 Todo es culpa mía... es cierto. 

—De verdad lo siento...—lloro a lágrima viva. La culpa me está matando. 

—Señora, cálmese, la niña no tiene responsabilidad—dice una señora que me resulta familiar. En cuanto me ve se acerca y entrelaza sus manos alrededor de mi cintura pero no respondo a ese abrazo. Lo único que hago es llorar en su hombro mientras da pequeñas palmadas en mi espalda.

—Realmente eres tú—me suelta y acaricia mi rostro—No llores, no es tu culpa pequeña.

No entiendo sus palabras pero su voz me da mucho sosiego. 

—El paciente está respondiendo, necesitamos a un familiar en la sala—dice un enfermera con prisa. 

—Yo iré, soy su madre—dice mientras se limpia las lágrimas.

—No, señora, tiene que ir ella—la mujer me mira con lágrimas en los ojos. 

—¡¿Por qué?! Yo soy su madre, ella no es nadie—se altera y la mujer la detiene de los hombros—Halmeoni, suéltame, tengo que ir yo—gritaba. 

Mis lagrimas no se detienen mientras veo la discusión. ¿Por qué quiere que entre yo? No entiendo nada, pero siendo sincera si quiero ir. 

—¡Por qué! ¡Tengo que entrar! ¡Suéltame halmeoni! ¿¡Por qué tendría que dejarla entrar!?

La mujer se acerca y le susurra algo que no logro escuchar, pero hace que la señora kim se quede en silencio.

—No puede ser...—cae al suelo y llora—No puede ser…

—Niña, ve, apresúrate—me dice y asiento rápidamente. 

Ingreso a la sala recorriendo con la mirada todo el lugar, cuando llego solo me permiten quedarme detrás de una vitrina donde se refleja la sala donde está Taehyung recibiendo oxígeno. Él gira su cabeza y se me queda viendo como si quisiera decirme algo pero no puede, el corazón me da fuertes punzadas al verlo así. 

—Doctor, estamos perdiendo al paciente—el monitor de frecuencia cardiaca empieza a sonar y se me cae el alma al suelo. 

—Enfermera, coloquele parches de los electrodos. 

—De inmediato

—Dígame cuando la onda llegue a 200

—Está cargado al máximo

—Un paso atrás. 

—3, 2,1, ¡cargue!

Lloro desconsoladamente y él sigue mirándome con dificultad.  

—Doctor, el paciente se está quedando sin oxígeno—dicen cuando el monitor deja de detectar su frecuencia cardiaca. 

—¡Por favor no mueras!—grito pero él cierra sus ojos—¡no me hagas esto! ¡no puedes hacerme esto! 

-tiempo actual- 

Taehyung

Todo se ha tornado oscuro pero aún puedo escuchar las voces a mi alrededor...el hablar de los doctores...el sonido de la máquina pasando electricidad a mi corazón... el llanto de T/n. Todo es muy desolador. 

—¡Por favor no mueras!—solloza fuertemente 

Lo siento. 

—¡no me hagas esto! ¡no puedes hacerme esto! 

No pude decir esas palabras entonces... 

—Cargue una vez más. Inyéctele FB1F

Mis palabras... debieron ser muy hirientes para ti.

<<Eres muy tonta. Pasar tiempo conmigo hizo que te confundieras, no somos novios reales y jamás lo seremos. No me gustas.>> 

<<Aunque las pruebas sean claras, el culpable siempre lo niega. ¿Por qué lo hiciste? ¿Por celos? Pensé que dejaría de gustarte.>>  

Debiste haberte culpado a ti misma por sentimientos que ni siquiera puedes controlar. 

—Despejen. 3, 2, 1, ¡carguen! 

Te dije cosas tan malas… 

—¡Por favor…! ¡despierta! 

Me arrepiento mucho. 

—No hagas esto...no…

Si esta es la última vez… te culparas a ti misma por mi culpa. Estoy preocupado por ti. 

—¡Carguen! ¡Una vez más! 

No puedo soportar esto. Debo decirte… que lo siento. 

Lo siento mucho. 

—¡¡Por favor despierta, idiota!!—golpea la vitrina y cae al suelo. 

—¿...idiota...?—susurro apenas audible. 

—Su pulso está de vuelta—dice la enfermera y T/n levanta la mirada. 

—Llevemoslo a la sala de operación, llama al anestesista. Revisa la presión sanguínea. 

—¡Si! 

No puedo morir, no así. 

T/n

Escucho a los doctores dar señales de vida y de inmediato se llevan a Taehyung a sala de operaciones, trago en seco y me siento un poco aliviada, pero la pesadilla aún no termina. 

—¡T/n!—grita Jungkook a la hora que me ve saliendo de la sala de emergencia.— vinimos en cuanto nos enteremos. 

—¿Cómo está mi hijo? ¿Estará bien verdad?—la señora Kim se acerca a mí pero Jungkook me arrastra detrás de él. Su manera de tratarme ha cambiado, está más apacible.

—Él reaccionó, así que ahora lo están operando—digo con dificultad.