Contemplando el mundo desde nuestros ojos
y aún más allá de ellos,
porque escondidos entre las letras
nos volvimos luceros.
Porque las palabras permanecen después del tiempo
y a través del espacio,
las únicas que definen mi sentir, mi vivir y mi forma de pensar.
Escribir es una excusa para recordar los momentos pasados
y para definir los deseos presentes.
Busque que mis palabras fueran atemporales,
porque susurran mi pasado a los caminantes,
le platican mi presente a los luceros de la noche
y suspiran el futuro entre hojas y polvo.
#2279 en Otros
#154 en No ficción
#705 en Relatos cortos
prosapoetica, poemas cortos amor vida, temas sociales mundo muerte
Editado: 19.12.2020