Capitulo 54

Capítulo 54

 Después de nuestra nueva tradición todos fuimos a dormir, había sido un día largo y lleno de mucha información.

         Sin darle muchas vueltas al asunto me dormí en el pecho de Sebastian, ese lugar que me hace sentir tan segura.

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         Desperté en el bosque, esta vez se  que estoy soñando.

         Escucho unos gritos que provienen cerca del lugar de donde me encuentro.  Camino en dirección a ellos, y lo que encuentro me deja perpleja, es una aldea. Pero todo está hecho un desastre, las casas calcinadas, algunas envueltas en las llamas, otras ya vueltas cenizas.

         Los cuerpos por todas partes y en todas las edades, ¿quién podría hacer algo así? Camino a los límites de la aldea donde el olor a sangre es cada vez más fuerte. Una manada completamente masacrada, las lágrimas salen sin poder evitarlo, tantos lobos muertos, puedo sentir  lo pesado del ambiente en este lugar.

         Una brisa fría llega hasta mí, me  abrazo a mi misma para mantener el calor,  sigo caminando mis pies están llenos de sangre, después de este sueño tendré que volver con la psicóloga.

         El grito desgarrador  de un lobo me saca de mis pensamiento, volteó y me encuentro con un hombre que lo  sostienen del cuello, un lobo, gritó  para que no lo maten pero no me escucha, con un rápido movimiento saca una daga de su bota y procede  a darle múltiples puñaladas hasta que muere, cuando salgo de mi aturdimiento me lanzo contra el hombre, pero traspasó su cuerpo cayendo al suelo como si fuera un holograma.

         Pero lo que más me sorprende es ver el rostro de ese hombre, aquel a quien creía muerto, quien aparece en mis pesadillas.  Se da la vuelta y simplemente se marcha, ¿pero cómo era posible?

         >>>El hechizo del cazador.

         Cómo había dicho mi madre, vuelve más rápido, más fuerte, Sebastian es un ser sobrenatural y fue quien lo mató. Esto no puede ser posible, esto no puede ser verdad, esto es solo un sueño, es solo un sueño, me repito una y otra vez intentando calmarme. Todo se vuelve oscuro y una luz azul ilumina el bosque, esa luz me llama,  me atrae.  La sigo por el camino el cual parece el de un cuento de hadas.        Aunque por mi mente, solo pasa esa expresión fría, ese rostro de pura crueldad.

         Llegó al lago donde estuve la última vez con mi pequeña, pero ella no esta , aun así busco mi reflejo en el agua. Kira aparece, solo me mira con un brillo  especial en sus ojos.

--Nuestro momento está cerca –- son sus únicas palabras, luego salió del agua como si fuera a comerme al intentar retroceder todo se vuelve negro.

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         Despierto llena de sudor, el brazo de Sebastian me agarra con fuerza  y yo me agarro de él, fue solo un sueño, un sueño, él está muerto, no fue real. Intento calmarme pero no puedo, el agarre de Sebastian se vuelve más fuerte contra mi cintura.

Presente.

         Sus palabras llegaron a mi mente, ese fue el segundo sueño, entonces por eso tantas manadas masacradas, fue èl, todo comenzó después de su muerte, como fue que me dijo mi madre, piensa Elena, piensa, Paola tiene razón soy una banana, mi cerebro no funciona, activate amigo sirve para algo, conecta los puntos algo quieren decirme los sueños, trabaja.

         Ya parezco loca, me regaño a mi misma, ¡ Ah si!.

         "Cuando la luna llena sale, los regresa más fuertes, más rápidos"

         Nadie quemó el cuerpo de Jhon, así que volvió, Dios mío, esto parece película de misterio  donde el fantasma vuelve para cobrar venganza. Sebastian acaricia con su nariz mi cuello sacándo me de mis pensamientos locos.

--¿Que haces Sebastian? –- deposito un beso en mi cuello, mandando me una corriente eléctrica por todo mi cuerpo. Cuándo lo miro a los ojos estan amarillos, pero no me dejó verlos por mucho tiempo ya que beso mis labios.

--Te necesito –- susurro sobre mis labios  y yo sigo besándolo, la verdad yo también lo necesito desde ayer, èl hace que me olvide de todo. Recorrió todo mi cuerpo, y yo me perdí en el suyo.

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        Después de pasar nuestra mañana juntos estábamos todavía en la cama, yo sobre él.

--¿Cómo te sientes? –- me pregunta mientras traza círculos en mi espalda.

--Bien –- él sonríe y besa mi frente.

--Me refiero por lo de hoy –- me aclara y la verdad no lo había pensado, Sebastian hoy me convertirá en loba en una ceremonia frente a los Crecientes y la manada que se queda con nosotros.

--Pues ahora que lo dices nerviosa –- soy sincera, ya siento esa electricidad en el estomago, solo falta que me suden las manos.

--No tienes porque estar lo –- él sigue acariciando me. –- sabes tu olor a cambiado de un tiempo para acá.

--¿Cómo así?--no sabia ni que tenía olor particular.

--Tu sueles oler a vainilla y lavanda, cuando te marque también se añadió la mente y mantecado, pero leve, solo se siente si hay muchos machos, por eso los más fuertes son los dos primeros, pero ahora también hay un pequeño olor a –-- lo medita antes de decirme –- como a primavera, es muy leve pero esta ahí –- el vuelve a besar mi frente.