Vacío

Hacía frío, lloviznaba y lo peor era que caminaba por el boulevard. Iba a su casa y estaba cansada de tanto caminar todo el día porqué se la pasó de un lado para otro. buscando a Gabriel. Hidan le había dicho que estaba en la ciudad y le mandó decir qué fuera a buscarlo a una cafetería; al llegar ahí una persona desconocida le dijo que Gabriel se había marchado y por lo tanto, le dio instrucciones para encontrarlo en otro lugar; así lo hizo, pero en cada local le decían lo mismo.

No entendía el juego. Se cansó y decidió volver a casa.

Perdida en sus pensamientos, comenzó a sentir que alguien la miraba; se giró y formó una sonrisa de lado a lado al mirar quien iba tras ella; no era Gabriel, incluso esas dos personas que iban detrás eran mejor que él.

Isaac y Yue la saludaron. Detuvo el paso y saludó a los dos chicos. Al tener la oportunidad de estar otra vez cerca de Isaac después de meses, lo tomó de la mano y después le preguntó a Yue por su novia.

—Dijo que me esperaría en la parada del camión en esa esquina—, miró hacía el letrero azul.

No había nada.

—¿Con este clima? —Preguntó y el pelinegro se encogió de hombros.

—Sí…se nublo de repente.

Yue caminaba atrás de la entonces pareja, porqué antes de conocer a Aram, su novio era Isaac. Un hombre muy difícil. La felicidad que la invadió por ese lapso de tiempo desapareció al mirar a Isaac. El veía hacia el frente y al estudiar su rostro, sintió tristeza. Una emoción que Isaac notó de inmediato.

—¿Qué tienes? —, preguntó con dulzura.

—Nada—, contestó muy bajo.

—¿Estás segura?

—Sí…comencé a sentirme vacía.

—¿Por qué?

— Porqué siento que te estoy perdiendo—, pensó. —He tenido un día…difícil.

Isaac sonrió de medio lado y apretó un poco más su mano. Se detuvieron en la parada del autobús,  abrazando a Isaac.

Sabía que lo iba a perder y no quería, sin embargo, no entendía por qué estaban más distantes que antes…Soñaba una vida con él, tenía la ilusión de un futuro…un futuro que se estaba perdiendo ante sus ojos.