Cuando las rosas florecen

Elio

-Lo tendré en mente- No iba a permitir que me subestimé , nunca, pero mi vista se distrae con algo azul, su figura sale después- olvidalo

 

Su esbelta figura cubierta con ese vestido le daba un aire sofisticado y como todos los miembros de la realeza caminaba con un porte que daban a entender su superioridad, pero su mirada era solemne y en una pequeña cantidad se podía ver la molestia que cargaba. Y al ver el color del vestido pude entender por qué. En un principio se espera que la princesa elija colores neutros para intentar encontrar un balance entre sus prometidos, de esa forma no se vería ninguna preferencia , pero la modista parece que no pensó en eso.

 

En cuanto nos ve sonríe tiernamente, y luego en compañía de nosotros caminamos en dirección al gran salón, puedo notar como los hombros de la princesa se tensan a medida que caminamos, su respiración se vuelve lenta y puedo estar casi seguro que su corazón bombea menos sangre que de costumbre, está sufriendo una descompensación, miro a mi hermano y se que piensa lo mismo que yo por la forma en que se prepara para actuar, pero en el instante en que creemos que está por derrumbarse una capa de oscuridad la recorre y cuando se va esa sombra puedo ver que su cuerpo se recompone. 

 

Pero entonces esa energía residual llega a mi, y a todos nosotros, o eso quiero creer. Es adictivamente dulce, apenas si puedo controlarme, mis oídos martillean  y siento mi sangre arder bajo mi piel. La energía residual sólo es eliminada cuando Ezra , con un movimiento sutil, la obliga a desaparecer. Entonces como si estuviera en un estado de abstinencia me siento cansado y avergonzado, porque mi mente pedía a gritos un poco más. 

 

La princesa camina despacio y parece no tener prisa, comprendiendo un pcoo la situación, ella fue comprometida de la noche a la mañana y no parece que haya sido de su elección, lord Clyde y ella siempre han sido reconocidos como una pareja natural, siempre estan juntos y parecen entenderse, pero en el trasfondo de la situacion yo solo veo a dos amigos unidos por las circunstancias, nada más. Clyde es una persona obsesiva por naturaleza pero le encanta la libertad, mientras él puede apresar no dejara que su presa lo retenga. 

Siendo así, que más de una vez lo he visto con uno que otro arañon en la parte de baja de su cuello, mis colegas senadores han revelado que efectivamente, el intachable lord, el fiel, el gran amigo, tenía a otra pareja con la que no solo compartía palabras.

 

Con esto en mente, no puedo estar seguro de poder jurar lealtad al rey, por que todos sabemos secretamente que Clyde se convertirá en el Rey, ya las cartas están sobre la mesa, el favorito del reino y el de la princesa es y será Clyde. Pero los principes bien podrían cambiar eso, o al menos eso quiero creer, no me imagino el dolor que sentira la princesa cuando se entere de este engaño. Protegerla es mi deber pero estoy en una encrucijada, hablar o no hablar, si le digo podría destruirla pero si no cuando se entere, por que lo hará, no sería peor para ella; la verdad pesa y la mentira mata. 

 

En cuanto estamos próximos a llegar a la puerta del salón donde se está llevando a cabo la cena, unos gritos nos detienen, más que gritos era una discusión que empezaba a salirse de control y amenazaba con subir de tono, en lugar de molestarme me sorprendío ¿Acaso los nobles de la capital no tenían modales?, ja, y dicen que los aristócratas de los otros distritos son los que menos clase tienen. Pero pienso en la persona que cuido y en como se siente, ahora ya no me parece tan fenomenal esto, si no grosero y un tanto insultante. Pero claro, solo ese trio podría hacer este tipo de escándalo. 

 

En lugar de prometidos parecían tres locos desquiciados, o al menos eso me parecían a mí, y también unos ladrones, como se atreven a querer algo con la princesa, escuchó su latido acercarse y con gusto me encantaría detenerlo por completo, el peor de todos se acercaba y claro sus rivales jamás estaban demasiado lejos. 

 

-ya te dije esto es un conejo- le replica el príncipe Liam, sostiene entre su manos una figura de cristal, que no parece tener ninguna figura en especial. 

 

-pero qué es un perro Liam que no le ves la cola- Le replica el otro príncipe, incluso yo puedo saber que no es ninguno de esos animales 

 

-son unos idiotas, por eso el vendedor les cobró tanto-se burla de ellos Clyde, los dientes del lord brillan ante la luz de los candelabros flotantes - eso claramente es un zorro

 

-no puede ser, esto es un conejo, tarado- le contesta rápidamente el príncipe Liam, su cabello castaño casi rojizo se desprende de su peinado y el lo acomoda energéticamente de vuelta en su lugar 

 

-a quien le dices  tarado, a mi o a ti que compraste un regalo sin saber que era ni lo que representa - parece que el lord disfruta haciéndolos sufrir, así como nos hacía sufrir mandandonos a correr en medio de tormentas que él mismo provocaba,- esa cosa es un zorro por que es el animal que es relacionado con nuestro reino, lo sabrían si leyeran un poco más de nuestra historia.

 

-Pero esto se parece a un conejo- habla entre dientes el príncipe Liam mientras el otro príncipe miraba con miedo a la princesa que ya los miraba - mira

 

-si lo miraras bien, esto es una cola y estas son las orejas- CLyde se lo arrebata de las manos y lo inicia a acomodar -lo ves

 

-entonces si es un zorro- dice Sean para rematar, su amigo lo fulmina con la mirara- lo ves Liam si es un zorro



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En el texto hay: deciciones, pasadooscuro, dolor amor

Editado: 12.03.2022

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