PLAYLIST : Invisible - Anna Clendening
Estaba tan placidamente dormida, que si no fuera por el tedioso despertador, todavía estuviera dormida como roca. Me quedé en la cama, todavía sin pararme, cuando el despertador dejo de sonar, pero sin duda volvió a sonar. Decidí pararme, por qué si no es el despertador animandome a despertar, es mi mamá gritando a todo pulmón que me despierte.
Me paro de la cama, decidida a darme una lenta y refrescante ducha. Al terminar, salgo y voy al armario a buscar algo que ponerme.
Después de mi rompimiento con Blake más nunca me he preocupado por mi aspecto, recuerdo muy bien ese día, el día en el que me humilló delante toda mi clase, fue hace mucho, pero el dolor todavía no se ha ido, este permanece muy en el fondo de mi corazón-- o así creo yo -- , pero no se soluciona nada con solo guardarle rencor, pero por más que quiera no se me es facil.
Me coloco una simple camisa negra holgada y unos pantalones de chándal , y por supuesto mis zapatillas. Amarro mi cabello despelucado en una coleta alta. Tomo mis cosas y salgo de mi alcoba.
Al bajar las escaleras, un olor a panqueques inundan mis fosas nasales. Voy a la cocina y veo a mi madre bailando a corde de la musica que suena, y al mismo tiempo que cocina animadamente.
-- Hola, Nesrin-- saluda mi madre sin voltear. Me acerco a ella y la abrazo por detras.
-- Hola, mamá. ¿Cómo te sientes?-- la preocupación es notable en mi tono de voz. Resulta ser que ayer tuvo dolor estomacal, y se la paso toda la noche vomitando.
La escucho suspirar con pesades para luedo responder:-- Me encuentro bien, no te preocupes por tonterias.-- se queja.
-- ¿Cómo quieres que no preocupe? ¿Enserio...? ya, que importa.-- le di por sentado al tema. Tomé asiento en la mesa a esperar que Astrid-- mi madre --, me diera de comer.
Al ya tener los panqueques frente mis narices pidiendo a gritos que lo coma, empezé a devorarlos como un león ambriento.
Me di cuenta que ya se me hacia muy tarde, me despedí de mi madre, y practicamente salí corriendo de la casa hacia la parada de autobuses. Tome el primero que vi llegar, y aguarde intranquila a llegar.
Ya en mi parada, baje tan apresurada que no me di cuenta que no le había pagado al conductor. Volví a subir, y le di el dinero al señor con una sonrisa de disculpa, este me dedico una mirada de desaprovación.
Todas las afueras del instituto estaban desiertas, hasta apostaria que n¡ siquiera habia alguna alma rondando por ahí. Pase adentro y hay fue cuando me di cuenta que no estaba sola, que si habia alguien por ahí.
Y no cualquier persona, no sino Blake...
El idiota que no supo como apreciarme, el que me humilló, al que le di mi corazon en bandeja de plata, y que lo unico que hizo fue partirlo en dos, del por qué ahora soy la burla de todos, por el... por el ya no soy quien era hace unos años atras, por qué si no fuera por el,mi padre todavía estuviera vivo.
<<deja de echarle la culpa, sabes muy bien que el no fue la razón de la muerte de Harris>> Y muy en el fondo sabía que eso era la verdad pura, pero solo no lo quiero creer.
Quise pasar desaapercibida, pero fue en vano, el me noto. Temerosa me aleje unos pasos de el, pero el se iba acercando a mi con una sonrisa retorcida pintada en su rostro. A primera vista podras creer que es todo un amor, pero solo al principio. Después de que el terminara conmigo, mostro su realmente ser, un chico muy vil, al que no le importa que le pase a nadie, solo piensa en su bienestar y en el de nadie más.
-- Nesrin...-- murmuro ya muy cerca de mi -- que bueno es verte...